Un 11,2 por ciento de las empresas de Chubut tuvo facturación mínima o nula

En abril, en el mes más duro de la cuarentena, la cantidad de firmas prácticamente paradas llegó al 25%. Otro de los indicadores para medir los efectos económicos tiene que ver con las actividades autorizadas para funcionar: en la provincia el 63% del empleo privado está habilitado.

24 OCT 2020 - 22:51 | Actualizado

Luego de cifras que empezaron a amesetarse en la zona del AMBA respecto al nivel de contagios del coronavirus, la enfermedad se trasladó en los últimos meses con fuerza al interior y con multiplicación de contagios en las provincias. Lo que ha alterado el ritmo habitual de actividad.

Hay dos indicadores que pueden definir la realidad económica en las diferentes jurisdicciones, que fue diferente de acuerdo a la situación epidemiológica. Un informe del Centro de Estudios para la Producción, que depende del Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación, analiza el nivel de facturación por empresa y a nivel general cuál es el porcentaje de actividades habilitadas según cada distrito.

Para el caso de Chubut, el último dato disponible para el mes de agosto marca que el 11,2% de las empresas tuvo facturación mínima o nula durante el mes de agosto. En el momento más duro de cuarentena, para abril, ese registro llegó a alcanzar casi al 25% de las firmas que hay en la provincia (una de cada cuatro empresas).

Ahora bien, este 11,2% de agosto de empresas que prácticamente estuvieron paradas, también hay que analizarlo en el contexto del país. Hubo muchas otras provincias incluso en peor situación que Chubut. En Jujuy por ejemplo. en agosto el 25,6% de las pymes no facturaron. Le siguió de cerca Tierra del Fuego, con el 24,4%.

Delante de Chubut en relación a mejores indicadores y por lo tanto menor afección en porcentaje para las empresas estuvieron Tucumán (10,9%), Catamarca (10,9%), Formosa (9,6%), Córdoba (9,3%), Entre Ríos (9,1%), Misiones (8,8%) y más aliviada llamativamente aparece Santa Fe (7,1%), ya que es una de las áreas que está siendo más castigada por la cantidad de contagios.

Después del pico de abril de empresas que estuvieron sin actividad (casi 25%), el indicador fue bajando paulatinamente en Chubut. Fue del 15,4% en mayo, 13,1% en junio, 12,7% en julio y el 11,2% de agosto. Lo que muestra una mayor flexibilización a medida que fue avanzando el año.

Según el documento de Nación “en el plano regional también se vienen observando grandes diferencias. En enero-febrero, alrededor del 6% de las firmas de país tuvo facturación nula o mínima, con diferencias regionales relativamente acotadas (un mínimo del 4,4% en Santa Fe y un máximo del 10,8% en Tierra del Fuego). En abril, este indicador alcanzó el 25,9% en el promedio del país, aunque con brechas regionales mucho más marcadas. Tierra del Fuego, CABA, el conurbano bonaerense y Río Negro fueron los distritos más afectados, con más del 30% de las empresas con facturación nula/mínima”.

“A la inversa, Jujuy, Entre Ríos, Misiones y Santa Fe salieron relativamente menos afectadas, con menos del 20% de las empresas en esta condición. ¿A qué se debió este impacto desigual? En el caso de CABA y el conurbano bonaerense, a que los contagios fueron mayores allí desde el principio (y por ende las medidas de restricción fueron más profundas), a lo que se suma un menor peso relativo de actividades esenciales, como por ejemplo la agroindustria”.

Recalca que “en el caso de Río Negro, al elevado peso del complejo turístico en Bariloche y Las Grutas (donde el porcentaje de firmas con facturación nula/mínima rondó el 50%). En Tierra del Fuego se dio la combinación más adversa: escaso peso de la agroindustria y alta dependencia de las industrias no esenciales –como la electrónica de consumo– y del turismo, y por ello fue la provincia con mayor porcentaje de firmas sin facturación en abril (38,6%).

Para junio-julio, todas las provincias habían mejorado significativamente este indicador respecto de abril, aunque lógicamente se encontraban peor que en la prepandemia; a su vez, no se observaron grandes cambios en la dinámica territorial. Sin embargo, desde entonces –cuando comenzaron a incrementarse los casos en muchas provincias y a descomprimirse en el AMBA– se observaron tendencias disímiles.

“Por ejemplo, Jujuy –que había sido de las menos afectadas en abril tanto en lo sanitario como en lo económico– pasó a ser la más golpeada en agosto, con un 25,6% de las empresas con facturación nula o mínima (cifra peor que la registrada en abril), producto de un dramático brote de coronavirus iniciado en julio que obligó a imponer restricciones a la circulación. Tierra del Fuego también deterioró sus cifras en agosto (24,4% de las firmas con facturación nula o mínima), producto de que Río Grande tuvo un severo brote que obligó a retornar a fase 1”.

“El caso de Tierra del Fuego es muy particular, de todos modos: si bien aparece como una provincia muy afectada medida con este indicador, a la vez es la única que en julio (último dato disponible) tuvo más empleo asalariado formal privado que en febrero (+1,1% según el Ministerio de Trabajo).

Actividades habilitadas

Desde el 18 de abril, las actividades exceptuadas comenzaron a diferir por provincia, de acuerdo con las posibilidades sanitarias y las necesidades de las economías regionales. A partir del 11 de mayo, se sumaron las normativas provinciales que permitieron reanudar las ramas industriales que faltaban, el comercio y la construcción en la mayoría del país, a excepción de AMBA (región en la que se avanzó en reabrir la actividad comercial en CABA y la industrial en el conurbano).

Por debajo del promedio nacional de empleo exceptuado se encuentra el Área Metropolitana de Buenos Aires; mientras que por encima del promedio se observan zonas como el interior de la provincia de Buenos Aires y las provincias de Catamarca, Chaco, Chubut, Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, Formosa, La Pampa, Mendoza, Neuquén, San Juan, Santa Cruz y Tucumán, donde se alcanzó al menos el 90%. Jujuy, La Rioja, Salta, San Luis, Santa Fe, Santiago del Estero y Tierra del Fuego retrocedieron y quedaron por debajo de los registros de julio.

Chubut llegó a tener en julio el 93% del empleo habilitado para trabajar. Ese indicador fue retrocediendo hasta el 63% en los primeros días del mes de septiembre.

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24 OCT 2020 - 22:51

Luego de cifras que empezaron a amesetarse en la zona del AMBA respecto al nivel de contagios del coronavirus, la enfermedad se trasladó en los últimos meses con fuerza al interior y con multiplicación de contagios en las provincias. Lo que ha alterado el ritmo habitual de actividad.

Hay dos indicadores que pueden definir la realidad económica en las diferentes jurisdicciones, que fue diferente de acuerdo a la situación epidemiológica. Un informe del Centro de Estudios para la Producción, que depende del Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación, analiza el nivel de facturación por empresa y a nivel general cuál es el porcentaje de actividades habilitadas según cada distrito.

Para el caso de Chubut, el último dato disponible para el mes de agosto marca que el 11,2% de las empresas tuvo facturación mínima o nula durante el mes de agosto. En el momento más duro de cuarentena, para abril, ese registro llegó a alcanzar casi al 25% de las firmas que hay en la provincia (una de cada cuatro empresas).

Ahora bien, este 11,2% de agosto de empresas que prácticamente estuvieron paradas, también hay que analizarlo en el contexto del país. Hubo muchas otras provincias incluso en peor situación que Chubut. En Jujuy por ejemplo. en agosto el 25,6% de las pymes no facturaron. Le siguió de cerca Tierra del Fuego, con el 24,4%.

Delante de Chubut en relación a mejores indicadores y por lo tanto menor afección en porcentaje para las empresas estuvieron Tucumán (10,9%), Catamarca (10,9%), Formosa (9,6%), Córdoba (9,3%), Entre Ríos (9,1%), Misiones (8,8%) y más aliviada llamativamente aparece Santa Fe (7,1%), ya que es una de las áreas que está siendo más castigada por la cantidad de contagios.

Después del pico de abril de empresas que estuvieron sin actividad (casi 25%), el indicador fue bajando paulatinamente en Chubut. Fue del 15,4% en mayo, 13,1% en junio, 12,7% en julio y el 11,2% de agosto. Lo que muestra una mayor flexibilización a medida que fue avanzando el año.

Según el documento de Nación “en el plano regional también se vienen observando grandes diferencias. En enero-febrero, alrededor del 6% de las firmas de país tuvo facturación nula o mínima, con diferencias regionales relativamente acotadas (un mínimo del 4,4% en Santa Fe y un máximo del 10,8% en Tierra del Fuego). En abril, este indicador alcanzó el 25,9% en el promedio del país, aunque con brechas regionales mucho más marcadas. Tierra del Fuego, CABA, el conurbano bonaerense y Río Negro fueron los distritos más afectados, con más del 30% de las empresas con facturación nula/mínima”.

“A la inversa, Jujuy, Entre Ríos, Misiones y Santa Fe salieron relativamente menos afectadas, con menos del 20% de las empresas en esta condición. ¿A qué se debió este impacto desigual? En el caso de CABA y el conurbano bonaerense, a que los contagios fueron mayores allí desde el principio (y por ende las medidas de restricción fueron más profundas), a lo que se suma un menor peso relativo de actividades esenciales, como por ejemplo la agroindustria”.

Recalca que “en el caso de Río Negro, al elevado peso del complejo turístico en Bariloche y Las Grutas (donde el porcentaje de firmas con facturación nula/mínima rondó el 50%). En Tierra del Fuego se dio la combinación más adversa: escaso peso de la agroindustria y alta dependencia de las industrias no esenciales –como la electrónica de consumo– y del turismo, y por ello fue la provincia con mayor porcentaje de firmas sin facturación en abril (38,6%).

Para junio-julio, todas las provincias habían mejorado significativamente este indicador respecto de abril, aunque lógicamente se encontraban peor que en la prepandemia; a su vez, no se observaron grandes cambios en la dinámica territorial. Sin embargo, desde entonces –cuando comenzaron a incrementarse los casos en muchas provincias y a descomprimirse en el AMBA– se observaron tendencias disímiles.

“Por ejemplo, Jujuy –que había sido de las menos afectadas en abril tanto en lo sanitario como en lo económico– pasó a ser la más golpeada en agosto, con un 25,6% de las empresas con facturación nula o mínima (cifra peor que la registrada en abril), producto de un dramático brote de coronavirus iniciado en julio que obligó a imponer restricciones a la circulación. Tierra del Fuego también deterioró sus cifras en agosto (24,4% de las firmas con facturación nula o mínima), producto de que Río Grande tuvo un severo brote que obligó a retornar a fase 1”.

“El caso de Tierra del Fuego es muy particular, de todos modos: si bien aparece como una provincia muy afectada medida con este indicador, a la vez es la única que en julio (último dato disponible) tuvo más empleo asalariado formal privado que en febrero (+1,1% según el Ministerio de Trabajo).

Actividades habilitadas

Desde el 18 de abril, las actividades exceptuadas comenzaron a diferir por provincia, de acuerdo con las posibilidades sanitarias y las necesidades de las economías regionales. A partir del 11 de mayo, se sumaron las normativas provinciales que permitieron reanudar las ramas industriales que faltaban, el comercio y la construcción en la mayoría del país, a excepción de AMBA (región en la que se avanzó en reabrir la actividad comercial en CABA y la industrial en el conurbano).

Por debajo del promedio nacional de empleo exceptuado se encuentra el Área Metropolitana de Buenos Aires; mientras que por encima del promedio se observan zonas como el interior de la provincia de Buenos Aires y las provincias de Catamarca, Chaco, Chubut, Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, Formosa, La Pampa, Mendoza, Neuquén, San Juan, Santa Cruz y Tucumán, donde se alcanzó al menos el 90%. Jujuy, La Rioja, Salta, San Luis, Santa Fe, Santiago del Estero y Tierra del Fuego retrocedieron y quedaron por debajo de los registros de julio.

Chubut llegó a tener en julio el 93% del empleo habilitado para trabajar. Ese indicador fue retrocediendo hasta el 63% en los primeros días del mes de septiembre.


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