Homicidio de Fabián Acuña: harán pruebas de ADN en el casco hallado cerca de la casa del principal sospechoso

Creen que se trata del casco que utilizó Marcos Álvarez, el imputado por el crimen de Fabián Acuña, el entrenador y ex integrante de la banda de los “poliladron” que fue asesinado de cinco disparos en la puerta de un gimnasio en Madryn.

29 MAR 2021 - 12:06 | Actualizado

El domingo se logró hallar el casco de motocicleta que habría utilizado el autor del homicidio de Fabián Acuña (54) cometido a mediados de enero y por el cual se encuentra detenido Marcos Álvarez (37), un profesor de artes marciales mixtas, a quien testigos vieron discutir en la vía pública días antes del crimen.

Álvarez está imputado de “homicidio agravado” y los fiscales revelaron los elementos que se encuentran en su contra, principalmente, los registros de cámaras de seguridad.

El fiscal Alex Williams, a cargo de la investigación, explicó que “se logró hallazgo de elemento relevante, porque es idéntico y entendemos que es el que utilizó el autor para ocultar su rostro. Vamos a hacer un cotejo de ADN”.

Williams sostuvo que “teníamos la información que podría estar en ese sector, ya que un testigo observó a Marcos Álvarez en la zona”. Y adelantó que en los próximos días estará el resultado de distintas pericias en curso: “Estará el informe final de la pericia informática y las pericias antropométricas comparativas de las imágenes y las filmaciones”.

El fiscal se mostró confiando con el avance de la investigación y sostuvo que “tenemos elementos para sostener nuestras hipótesis”.

El caso

La noche del pasado 18 de enero, Acuña fue asesinado de cinco disparos a “quemarropa” que impactaron en su brazo, espalda, pecho y rostro. El autor no robó nada del lugar y, según quedó registrado en cámaras de seguridad, del crimen ingresó solamente a ultimar a Acuña para luego huir del lugar en una motocicleta.

El hombre, que queda captado por las cámaras de seguridad externas del gimnasio “Tupac Gym” propiedad de Acuña, ingresó pasadas las 21 al local con el casco de la moto puesto, lentes, guantes y vistiendo una campera y pantalón largo. Estuvo menos de dos minutos, ya que efectuó los disparos y se retiró. La hipótesis de los investigadores es que se trató de un “ajuste de cuentas”, aunque se desconocen los motivos.

Acuña había sido condenado en 2012 como uno de los integrantes de la banda que intentó asaltar el cajero automático de Puerto Pirámides junto a un grupo de policías. En el último tiempo manejaba el gimnasio Tupac Gym y se dedicaba a la compra venta de automóviles.

Letras japonesas, claves en la investigación

La investigación permitió cotejar la vestimenta que poseía el autor del homicidio. Y hubo un dato clave: las letras japonesas del pantalón, que significan “Jiu Jitsu”. Se trata de un arte marcial japonés, y con ese dato los investigadores lograron llegar hasta Álvarez. Al corroborar la vestimenta, pudieron determinar que además del pantalón, poseía las mismas zapatillas y mochila.

En la pericia informática lograron recuperar una fotografía donde Álvarez exhibía un arma, del mismo calibre que el utilizado en el homicidio, sobre la mesa de su casa.

Cámaras de seguridad y antenas de teléfono

Otro dato que consta en la causa es el recorrido de las cámaras de seguridad que captan el recorrido del autor del crimen, a bordo de su motocicleta, momentos previos del homicidio desde cercanías del domicilio de Álvarez hacia el gimnasio. Y luego de cometido realiza el mismo itinerario de manera inversa. A esto se suma que las antenas de telefonía celular captan al celular de Álvarez en la zona del gimnasio.

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29 MAR 2021 - 12:06

El domingo se logró hallar el casco de motocicleta que habría utilizado el autor del homicidio de Fabián Acuña (54) cometido a mediados de enero y por el cual se encuentra detenido Marcos Álvarez (37), un profesor de artes marciales mixtas, a quien testigos vieron discutir en la vía pública días antes del crimen.

Álvarez está imputado de “homicidio agravado” y los fiscales revelaron los elementos que se encuentran en su contra, principalmente, los registros de cámaras de seguridad.

El fiscal Alex Williams, a cargo de la investigación, explicó que “se logró hallazgo de elemento relevante, porque es idéntico y entendemos que es el que utilizó el autor para ocultar su rostro. Vamos a hacer un cotejo de ADN”.

Williams sostuvo que “teníamos la información que podría estar en ese sector, ya que un testigo observó a Marcos Álvarez en la zona”. Y adelantó que en los próximos días estará el resultado de distintas pericias en curso: “Estará el informe final de la pericia informática y las pericias antropométricas comparativas de las imágenes y las filmaciones”.

El fiscal se mostró confiando con el avance de la investigación y sostuvo que “tenemos elementos para sostener nuestras hipótesis”.

El caso

La noche del pasado 18 de enero, Acuña fue asesinado de cinco disparos a “quemarropa” que impactaron en su brazo, espalda, pecho y rostro. El autor no robó nada del lugar y, según quedó registrado en cámaras de seguridad, del crimen ingresó solamente a ultimar a Acuña para luego huir del lugar en una motocicleta.

El hombre, que queda captado por las cámaras de seguridad externas del gimnasio “Tupac Gym” propiedad de Acuña, ingresó pasadas las 21 al local con el casco de la moto puesto, lentes, guantes y vistiendo una campera y pantalón largo. Estuvo menos de dos minutos, ya que efectuó los disparos y se retiró. La hipótesis de los investigadores es que se trató de un “ajuste de cuentas”, aunque se desconocen los motivos.

Acuña había sido condenado en 2012 como uno de los integrantes de la banda que intentó asaltar el cajero automático de Puerto Pirámides junto a un grupo de policías. En el último tiempo manejaba el gimnasio Tupac Gym y se dedicaba a la compra venta de automóviles.

Letras japonesas, claves en la investigación

La investigación permitió cotejar la vestimenta que poseía el autor del homicidio. Y hubo un dato clave: las letras japonesas del pantalón, que significan “Jiu Jitsu”. Se trata de un arte marcial japonés, y con ese dato los investigadores lograron llegar hasta Álvarez. Al corroborar la vestimenta, pudieron determinar que además del pantalón, poseía las mismas zapatillas y mochila.

En la pericia informática lograron recuperar una fotografía donde Álvarez exhibía un arma, del mismo calibre que el utilizado en el homicidio, sobre la mesa de su casa.

Cámaras de seguridad y antenas de teléfono

Otro dato que consta en la causa es el recorrido de las cámaras de seguridad que captan el recorrido del autor del crimen, a bordo de su motocicleta, momentos previos del homicidio desde cercanías del domicilio de Álvarez hacia el gimnasio. Y luego de cometido realiza el mismo itinerario de manera inversa. A esto se suma que las antenas de telefonía celular captan al celular de Álvarez en la zona del gimnasio.


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