El Presidente de Israel encargó al líder opositor Lapid conformar un nuevo gobierno
El presidente de Israel encargó hoy al líder opositor Yair Lapid que intente formar Gobierno, una decisión que podría derivar en el fin a la prolongada permanencia en el poder del primer ministro saliente, Benjamin Netanyahu.
El presidente Reuven Rivlin hizo el anuncio durante una intervención televisada por cadena nacional un día después de que se venciera el plazo que había dado a Netanyahu para tratar de formar una coalición con mayoría en el Parlamento.
"Hablé con Yair Lapid y le dije que le otorgo el mandato de formar Gobierno", dijo Rivlin en la sede de la presidencia, en Jerusalén, luego de celebrar consultas con los líderes de todos los partidos con representación en el Parlamento, o Knesset.
Según lo que se desprende de las consultas, "está claro que el miembro de la Knesset Yair Lapid tiene posibilidad de formar un Gobierno que obtenga la confianza de la Knesset, pese a que las dificultades son muchas", dijo Rivlin, informó la agencia de noticias AFP.
Lapid, líder del partido de centro Yesh Atid y un veterano político y periodista cuyo fallecido padre fue ministro del gabinete nacional, tiene ahora cuatro semanas para intentar alcanzar un acuerdo con otros partidos.
El encargo, aunque difícil de llevar a buen puerto, da a Lapid la posibilidad de hacer historia al poner fin a los gobiernos de Netanyahu, el primer ministro con más tiempo en el poder de la historia de Israel.
Netanyahu, líder del partido de derecha nacionalista Likud, ha sido primer ministro durante 15 años, incluyendo los últimos 12.
Lapid, de 57 años, y cuyo Yesh Atid (Hay Un Futuro) llegó en segundo lugar con 17 diputados en las elecciones legislativas de marzo pasado, busca formar un gobierno de unión nacional para desbancar a Netanyahu, juzgado por corrupción y malversación.
Lapid ingresó al Parlamento en 2013 luego de una exitosa carrera como columnista de diarios, presentador de TV y autor. Su partido hizo entonces una gran elección, lo que le permitió entrar al gabinete como ministro de Finanzas.
Pero no se llevó bien con Netanyahu, y la coalición se derrumbó.
En la oposición desde 2015, Yesh Atid es un partido cuya base electoral está formada por votantes de centro y laicos.
Lapid ha criticado las estrechas relaciones de Netanyahu con los partidos judíos ultraortodoxos y dice que el premier debe renunciar mientras es juzgado.
Las elecciones celebradas el 23 de marzo, las cuartas en los últimos dos años, terminaron, otra vez, sin un claro ganador.
Luego de varios encuentros con muchos de sus rivales y de un acercamiento sin precedentes al líder de un pequeño partido islamista árabe, Netanyahu no pudo formar Gobierno.
Rivlin, cuyo cargo es mayormente protocolar, dio el encargo inicial a Netanyahu luego de que el bloque de partidos que lo apoya sumara 52 de las 120 bancas del Parlamento, lejos de las 61 que hacen mayoría absoluta.
Lapid, quien en las consultas de hoy recibió el apoyo de 56 legisladores, ya ha ofrecido un acuerdo para compartir el poder a Naftali Bennett, líder del partido de derecha nacionalista Yamina.
Según la propuesta, los dos se alternarían como primeros ministros, con Bennett primero.
Bennett, un exaliado y luego rival de Netanyahu, solo controla seis bancas, pero que son suficientes para dar a Lapid la mayoría que necesita en el Parlamento.
El presidente Reuven Rivlin hizo el anuncio durante una intervención televisada por cadena nacional un día después de que se venciera el plazo que había dado a Netanyahu para tratar de formar una coalición con mayoría en el Parlamento.
"Hablé con Yair Lapid y le dije que le otorgo el mandato de formar Gobierno", dijo Rivlin en la sede de la presidencia, en Jerusalén, luego de celebrar consultas con los líderes de todos los partidos con representación en el Parlamento, o Knesset.
Según lo que se desprende de las consultas, "está claro que el miembro de la Knesset Yair Lapid tiene posibilidad de formar un Gobierno que obtenga la confianza de la Knesset, pese a que las dificultades son muchas", dijo Rivlin, informó la agencia de noticias AFP.
Lapid, líder del partido de centro Yesh Atid y un veterano político y periodista cuyo fallecido padre fue ministro del gabinete nacional, tiene ahora cuatro semanas para intentar alcanzar un acuerdo con otros partidos.
El encargo, aunque difícil de llevar a buen puerto, da a Lapid la posibilidad de hacer historia al poner fin a los gobiernos de Netanyahu, el primer ministro con más tiempo en el poder de la historia de Israel.
Netanyahu, líder del partido de derecha nacionalista Likud, ha sido primer ministro durante 15 años, incluyendo los últimos 12.
Lapid, de 57 años, y cuyo Yesh Atid (Hay Un Futuro) llegó en segundo lugar con 17 diputados en las elecciones legislativas de marzo pasado, busca formar un gobierno de unión nacional para desbancar a Netanyahu, juzgado por corrupción y malversación.
Lapid ingresó al Parlamento en 2013 luego de una exitosa carrera como columnista de diarios, presentador de TV y autor. Su partido hizo entonces una gran elección, lo que le permitió entrar al gabinete como ministro de Finanzas.
Pero no se llevó bien con Netanyahu, y la coalición se derrumbó.
En la oposición desde 2015, Yesh Atid es un partido cuya base electoral está formada por votantes de centro y laicos.
Lapid ha criticado las estrechas relaciones de Netanyahu con los partidos judíos ultraortodoxos y dice que el premier debe renunciar mientras es juzgado.
Las elecciones celebradas el 23 de marzo, las cuartas en los últimos dos años, terminaron, otra vez, sin un claro ganador.
Luego de varios encuentros con muchos de sus rivales y de un acercamiento sin precedentes al líder de un pequeño partido islamista árabe, Netanyahu no pudo formar Gobierno.
Rivlin, cuyo cargo es mayormente protocolar, dio el encargo inicial a Netanyahu luego de que el bloque de partidos que lo apoya sumara 52 de las 120 bancas del Parlamento, lejos de las 61 que hacen mayoría absoluta.
Lapid, quien en las consultas de hoy recibió el apoyo de 56 legisladores, ya ha ofrecido un acuerdo para compartir el poder a Naftali Bennett, líder del partido de derecha nacionalista Yamina.
Según la propuesta, los dos se alternarían como primeros ministros, con Bennett primero.
Bennett, un exaliado y luego rival de Netanyahu, solo controla seis bancas, pero que son suficientes para dar a Lapid la mayoría que necesita en el Parlamento.