Los fiscales que investigan el Lava Jato insisten en pedir prisión preventiva para Keiko Fujimori
El equipo especial de fiscales de la operación anticorrupción Lava Jato en Perú apeló hoy la decisión judicial que rechazó el lunes pasado ordenar una nueva prisión preventiva contra la candidata presidencial de derecha Keiko Fujimori y volvió a argumentar que la exlegisladora violó las condiciones de su libertad condicional.
"La acusada Keiko Fujimori ha tenido conocimiento y voluntad de incumplir la regla impuesta por el órgano judicial de forma sistemática", argumentó el fiscal jefe del equipo de Lava Jato, José Domingo Pérez, en referencia a los contactos que la líder de Fuerza Popular habría mantenido con testigos del proceso legal que enfrenta por financiación ilegal de sus campañas electorales de 2011 y 2016.
Pérez citó publicaciones en los medios de comunicación y sostuvo que la actual candidata, que cuestiona por todos los medios legales y políticos el escrutinio de las elecciones presidenciales que perdió, según el conteo oficial, se reunió con tres testigos de la causa, informó la agencia de noticias DPA.
El lunes pasado, el juez encargado del caso, Víctor Zúñiga Urday, resolvió que el nuevo pedido de prisión preventiva contra Fujimori era "infundado", aunque reconoció que dado algunos acercamientos entre la procesada y testigos de la causa, debían establecerse nuevas restricciones.
Aclaró que si estas nuevas restricciones son violadas, la exlegisladora e hija del exmandatario Alberto Fujimori podría volver a la cárcel hasta que su condena quede firme o sea absuelta.
Si la apelación presentada hoy finalmente es admitida a trámite por el juez Urday, será remitida a la Segunda Sala Penal de Apelaciones Nacional, que se encargará de tomar una decisión final.
La líder de Fuerza Popular abandonó en mayo del año pasado la cárcel de Lima después de que la Justicia revocase la prisión preventiva que cumplía desde principios de 2020 por supuestamente haber recibido sobornos de la constructora brasileña Odebrecht.
La Justicia decidió aprobar la apelación presentada por la defensa de Fujimori y revocar la prisión preventiva porque consideró que "la sospecha de culpabilidad basada" no era suficiente por sí misma para dictar esta medida cautelar.
El caso Odebrecht es el proceso de corrupción más importante en Perú de los derivados de la operación Lava Jato, que estalló en Brasil y que durante mucho tiempo tuvo como uno de sus objetivos al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien esta semana terminó de ser absuelto por la corte suprema.
"La acusada Keiko Fujimori ha tenido conocimiento y voluntad de incumplir la regla impuesta por el órgano judicial de forma sistemática", argumentó el fiscal jefe del equipo de Lava Jato, José Domingo Pérez, en referencia a los contactos que la líder de Fuerza Popular habría mantenido con testigos del proceso legal que enfrenta por financiación ilegal de sus campañas electorales de 2011 y 2016.
Pérez citó publicaciones en los medios de comunicación y sostuvo que la actual candidata, que cuestiona por todos los medios legales y políticos el escrutinio de las elecciones presidenciales que perdió, según el conteo oficial, se reunió con tres testigos de la causa, informó la agencia de noticias DPA.
El lunes pasado, el juez encargado del caso, Víctor Zúñiga Urday, resolvió que el nuevo pedido de prisión preventiva contra Fujimori era "infundado", aunque reconoció que dado algunos acercamientos entre la procesada y testigos de la causa, debían establecerse nuevas restricciones.
Aclaró que si estas nuevas restricciones son violadas, la exlegisladora e hija del exmandatario Alberto Fujimori podría volver a la cárcel hasta que su condena quede firme o sea absuelta.
Si la apelación presentada hoy finalmente es admitida a trámite por el juez Urday, será remitida a la Segunda Sala Penal de Apelaciones Nacional, que se encargará de tomar una decisión final.
La líder de Fuerza Popular abandonó en mayo del año pasado la cárcel de Lima después de que la Justicia revocase la prisión preventiva que cumplía desde principios de 2020 por supuestamente haber recibido sobornos de la constructora brasileña Odebrecht.
La Justicia decidió aprobar la apelación presentada por la defensa de Fujimori y revocar la prisión preventiva porque consideró que "la sospecha de culpabilidad basada" no era suficiente por sí misma para dictar esta medida cautelar.
El caso Odebrecht es el proceso de corrupción más importante en Perú de los derivados de la operación Lava Jato, que estalló en Brasil y que durante mucho tiempo tuvo como uno de sus objetivos al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien esta semana terminó de ser absuelto por la corte suprema.