Noche de tensión en Trelew: persecución, disparos y una fugitiva detenida
Una joven de 16 años protagonizó una persecución a gran velocidad y a contramano. La policía realizó disparos al aire para que detuviera la marcha. Al ser interceptada arrojó golpes de puño y patadas a una empleada policial.
El episodio comenzó minutos antes de la medianoche cuando un móvil que realizaba un patrullaje preventivo divisó en la intersección de la Avenida Rawson y la calle Buenos Aires, a un vehículo marca Chevrolet Astra, color oscuro, que doblaba bruscamente por estas arterias, tomando por la Avenida Rawson en dirección Oeste, con exceso de velocidad. A partir de allí, dadas las circunstancias, comenzó una peligrosa persecución.
Según indicaron fuentes policiales, en la loma de burro de la Avenida Rawson, frente al Cuartel de Bomberos, los efectivos lograron acercarse al vehículo, no observando a los ocupantes puesto que el laminado oscuro de los cristales impedía la visibilidad.
El patrullero encendió la sirena a los efetos de solicitar que detengan la marcha, haciendo caso omiso, continuando por la avenida, doblando en contra mano en la intersección con Santa Fe, y tomando nuevamente en contramano por la calle 25 de Mayo, circulando en dirección Oeste.
Los fugitivos no seguían un trayecto preestablecido, sino que seleccionaban de manera aleatoria, las calles por donde continuar la fuga. Los vehículos que circulaban correctamente por la calle, tuvieron que tirarse a los costados para no colisionar con el Astra, por lo que el “escopetero”, ante la gravedad de la situación, y a los fines de impedir una colisión, realizó un disparo con municiones antitumulto hacia el aire, con fines disuasivos, logrando que el auto detuviera la marcha.
Pero al ponerse a la par de los fugitivos y solicitarles a los ocupantes del rodado que desciendan, este aceleró nuevamente, continuando una nueva persecución hasta calle Simón de Alcazaba y San Martín.
Se pudo individualizar a cuatro ocupantes. La conductora era una mujer de 16 años que comenzó a propinar golpes y patadas a una empleada policial.
Del lado del acompañante descendió un joven de 16 años que mostró la misma actitud desafiante, lanzando golpes de puño a los numerarios.
Se constató que el rodado no contaba con papeles identificatorios. En tanto que los jóvenes fueron trasladados a la sede de la Comisaría Tercera por el delito de “desobediencia” .
El episodio comenzó minutos antes de la medianoche cuando un móvil que realizaba un patrullaje preventivo divisó en la intersección de la Avenida Rawson y la calle Buenos Aires, a un vehículo marca Chevrolet Astra, color oscuro, que doblaba bruscamente por estas arterias, tomando por la Avenida Rawson en dirección Oeste, con exceso de velocidad. A partir de allí, dadas las circunstancias, comenzó una peligrosa persecución.
Según indicaron fuentes policiales, en la loma de burro de la Avenida Rawson, frente al Cuartel de Bomberos, los efectivos lograron acercarse al vehículo, no observando a los ocupantes puesto que el laminado oscuro de los cristales impedía la visibilidad.
El patrullero encendió la sirena a los efetos de solicitar que detengan la marcha, haciendo caso omiso, continuando por la avenida, doblando en contra mano en la intersección con Santa Fe, y tomando nuevamente en contramano por la calle 25 de Mayo, circulando en dirección Oeste.
Los fugitivos no seguían un trayecto preestablecido, sino que seleccionaban de manera aleatoria, las calles por donde continuar la fuga. Los vehículos que circulaban correctamente por la calle, tuvieron que tirarse a los costados para no colisionar con el Astra, por lo que el “escopetero”, ante la gravedad de la situación, y a los fines de impedir una colisión, realizó un disparo con municiones antitumulto hacia el aire, con fines disuasivos, logrando que el auto detuviera la marcha.
Pero al ponerse a la par de los fugitivos y solicitarles a los ocupantes del rodado que desciendan, este aceleró nuevamente, continuando una nueva persecución hasta calle Simón de Alcazaba y San Martín.
Se pudo individualizar a cuatro ocupantes. La conductora era una mujer de 16 años que comenzó a propinar golpes y patadas a una empleada policial.
Del lado del acompañante descendió un joven de 16 años que mostró la misma actitud desafiante, lanzando golpes de puño a los numerarios.
Se constató que el rodado no contaba con papeles identificatorios. En tanto que los jóvenes fueron trasladados a la sede de la Comisaría Tercera por el delito de “desobediencia” .