Las y los trabajadores que, a partir de septiembre, perciban una remuneración bruta mensual de hasta $ 175 mil no pagarán el impuesto. Gozarán, además, de la exención del Sueldo Anual Complementario* (SAC) de diciembre.
La medida incrementa el piso de $ 150 mil y el umbral de $ 173 mil a $ 175 y $ 203 mil, respectivamente.
También exime del pago del Sueldo Anual Complementario a las y los trabajadores cuya remuneración promedio del segundo semestre no supere los $ 175 mil.
Con la actualización, 1.267.000 personas que dejaron de pagar el Impuesto a las Ganancias cuando se aprobó la ley en abril, seguirán sin pagar el impuesto. Es decir que se mantiene el universo de los beneficiados.
La medida apunta a fortalecer el poder adquisitivo de los contribuyentes del impuesto y de sus familias y, con ello, la consolidación de la demanda y del mercado interno.
Las y los trabajadores que, a partir de septiembre, perciban una remuneración bruta mensual de hasta $ 175 mil no pagarán el impuesto. Gozarán, además, de la exención del Sueldo Anual Complementario* (SAC) de diciembre.
La medida incrementa el piso de $ 150 mil y el umbral de $ 173 mil a $ 175 y $ 203 mil, respectivamente.
También exime del pago del Sueldo Anual Complementario a las y los trabajadores cuya remuneración promedio del segundo semestre no supere los $ 175 mil.
Con la actualización, 1.267.000 personas que dejaron de pagar el Impuesto a las Ganancias cuando se aprobó la ley en abril, seguirán sin pagar el impuesto. Es decir que se mantiene el universo de los beneficiados.
La medida apunta a fortalecer el poder adquisitivo de los contribuyentes del impuesto y de sus familias y, con ello, la consolidación de la demanda y del mercado interno.