Salió de la rotisería, hizo cinco goles y volvió al trabajo
La figura en cuestión es Brenda Mena, futbolista de Deportivo Madryn, que hizo esa cantidad en Trelew el pasado domingo. "El fútbol es mi pasión", sentenció.
Por Francisco Caputo
Al entretiempo, el marcador indicaba que Deportivo Madryn goleaba 6-0 a CEC en Trelew, en el torneo femenino de la Liga del Valle. La figura excluyente del encuentro, jugado el domingo pasado, era Brenda Mena, autora de cinco de los goles.
Pero no pudo seguir jugando. Eran las 17 horas y Brenda debía volver a Puerto Madryn para retornar a las 19:30 a su puesto de trabajo en la rotisería. El domingo, como dato agregado, había terminado su turno del sábado a la 3 de la mañana. Tras regresar de la cancha, trabajó hasta la 1 de la madrugada del lunes. Y a las 8 AM de aquel día, comenzó su nueva semana laboral.
Brenda rechazó un ascenso para jugar en Deportivo Madryn.
“Tuve que salir a las corridas ese día. Soy franquera en la rotisería Lizard, trabajo ahí hace cinco años. Es dura la gastronomía. Puedo llegar a terminar muy cansada. Pero el fútbol es mí pasión”, le comentó Brenda a Jornada, de 28 años, una de las capitanas del equipo, que ganó el partido finalmente por 12-1.
“Trabajo de lunes a sábado e incluso los domingos en los fines de semana largos. Pero no voy a dejar de lado a mis compañeras ni al DT”, expresó. Además, cría a un hijo que tuvo a los 18 años, con quien vive.
Su historia
Hablar de Brenda Mena implica hacer mención a una futbolista de vasta trayectoria en el ámbito local. Empezó a los siete años en un club llamado Audio Visión.
“No pude jugar mucho porque era petisa. Me fui entonces a Cachorras, equipo dirigido por el actual DT deMadryn”, relató. Ese fue su primer contacto con Vega, DT con el cual se formó.
Desarrolló su carrera bajo la tutela de Vega, que además de ser DT del equipo femenino del “Aurinegro”, comanda el equipo Puerto Futbol.
Es una de las canteras principales del fútbol femenino de Puerto Madryn, asiduo protagonista en los Juegos Evita, que Mena ha jugado.
Una "perlita": jugó con su prima Sheila Otero, actual jugadora de Moreno que debutó con goles en Alumni de Puerto Madryn a los 12 años.
“Fue mi primer DT. Es un maestro Raúl, lo admiro mucho. Cuando no me dejaban jugar porque era chica, él me dio la oportunidad”, recalcó.
Brenda en los Juegos Evita, representando a Chubut con Germinal.
Sueño cumplido
El puesto natural de Brenda es volante central, pero juega de arquera inclusive. Hoy, se desempeña como delantera. Integró el plantel multicampeón de Barraca/Alumni, que obtuvo seis títulos oficiales en la Liga del Valle entre 2015 y 2018, al mando de Roberto Monserrat. Posteriormente, jugo en Germinal y en Guillermo Brown. También ha jugado diversos torneos de fútbol de salón, con gran suceso.
Brenda, con la camiseta que ama.
Pero su sueño era jugar el torneo femenino con los colores del club que ama: Deportivo Madryn. “Soy hincha del Madryn, fanática. Nos está yendo muy bien en la Primera Nacional, disfruté mucho el ascenso. Pero nosotras también estamos jugando bien”, dice con orgullo. Razón no le falta. “Las Aurinegras”, en su primer torneo tras varios años de ausencia, integran el pelotón principal del torneo.
“Tenemos un buen equipo, aspiramos a llegar lo más alto que se pueda. Mis compañeras son unas genias. A pesar de ser nuestro primer campeonato estamos demostrando en la cancha que hay garra y ganas sobre todo. Faltan pulir algunas cosas porque nunca habíamos jugado todas juntas. Pero vamos bien”, expresó.
“Y mi DT, como te dije, es un grande. Además de mi fanatismo por el club, que esté Raúl Vega en Madryn es otro motivo para que esté. Como no ayudarlo a él, que tantas veces me ayudo y ha ayudado a otras pibas”, expresó.
Una curiosidad: comparte plantel con su hermana Melina Quiñelaf, su primera Karen Córdoba y sus tías Daiana Otero y Vanesa Rivero.
De izquierda a derecha Karen Córdoba (prima), Daiana Otero (tía), Vanesa Rivero (tía), Melina Quiñelaf (hermana) y Brenda Mena.?
Ascenso rechazado
Su pasión por el fútbol le permite superar diversas complicaciones. Por su trabajo en la rotisería, no puede entrenar con sus compañeras.
“Hago de todo. Amaso pizzas y pan, hago hamburguesas, sándwiches y de lomo y mila, rellenos de empanadas. También me toca estar en la plancha y en los hornos sacando pizzas”, enumeró.
“Los lunes, estoy de 8 a 17. Los martes, de 6 AM a 15, los miércoles de 15 hasta la medianoche, los jueves y viernes de 17 a 2 de la mañana y los domingos de 18 a 3 de la madrugada. Y los fines de semana largo, trabajo los domingos”, describió.
“Rechacé un ascenso porque implicaba que no podía jugar al fútbol en el Madryn (sic), por el horario. Por suerte, Germán, mi jefe, entendió. Es un genio. Y cobro como si hubiera aceptado el ascenso”, consideró.
Su familia
El respaldo de la familia es total. “Siempre nos acompaña la familia. Juego con algunas de mis parientes. El resto acompaña. Eso incluye al padre de mi hijo Mateo, que se llama Omar Pichún”, narró. “Él jugó en Madryn, tremendo jugador (sic). No pudo seguir jugando a nivel oficial por una lesión y porque necesitaba trabajar. Juega en la Liga del Golfo (NdR: Fútbol barrial de Madryn”, comentó.
“Sin su apoyo ni el del resto de mi familia, sería imposible jugar al fútbol. Mi primo chicho como le decimos está siempre al igual que mí hermano Eric que me llevan a jugar porque por ahí no tengo franco o llego sobre la hora y ellos se re mueven por mí”, narró.
“Y también les doy gracias a mis compas (sic) de Lizard que me hace la resegunda (sic) siempre también cubriéndome para que pueda jugar. Les agradezco a todos los que me ayudan a que pueda jugar al fútbol”, concluyó.
Brenda Mena, otra de las gladiadoras del fútbol femenino de la Liga del Valle.
Con su prima Sheila Otero en Alumni, después de sufrir un accidente yendo a trabajar que le impidió jugar las semifinales en 2018.?
Agradecimientos
+Su hijo Mateo
+Omar, el padre de Mateo
+Sus padres Mónica y Nelson
+Sus hermanos Eric, Melina, Jesús y Matías
+Sus abuelos Adolfo y Elsa
+Sus primos/as y tíos/as
+Compañeras y cuerpo técnico de Deportivo Madryn
+Compañeros y jefes en su lugar de trabajo
+ “Tití” Ortiz y “Sofi” Guzmán, amigas de Germinal
Mateo, el hijo de Brenda, no quiere perderse ningún partido de su mamá.
Por Francisco Caputo
Al entretiempo, el marcador indicaba que Deportivo Madryn goleaba 6-0 a CEC en Trelew, en el torneo femenino de la Liga del Valle. La figura excluyente del encuentro, jugado el domingo pasado, era Brenda Mena, autora de cinco de los goles.
Pero no pudo seguir jugando. Eran las 17 horas y Brenda debía volver a Puerto Madryn para retornar a las 19:30 a su puesto de trabajo en la rotisería. El domingo, como dato agregado, había terminado su turno del sábado a la 3 de la mañana. Tras regresar de la cancha, trabajó hasta la 1 de la madrugada del lunes. Y a las 8 AM de aquel día, comenzó su nueva semana laboral.
Brenda rechazó un ascenso para jugar en Deportivo Madryn.
“Tuve que salir a las corridas ese día. Soy franquera en la rotisería Lizard, trabajo ahí hace cinco años. Es dura la gastronomía. Puedo llegar a terminar muy cansada. Pero el fútbol es mí pasión”, le comentó Brenda a Jornada, de 28 años, una de las capitanas del equipo, que ganó el partido finalmente por 12-1.
“Trabajo de lunes a sábado e incluso los domingos en los fines de semana largos. Pero no voy a dejar de lado a mis compañeras ni al DT”, expresó. Además, cría a un hijo que tuvo a los 18 años, con quien vive.
Su historia
Hablar de Brenda Mena implica hacer mención a una futbolista de vasta trayectoria en el ámbito local. Empezó a los siete años en un club llamado Audio Visión.
“No pude jugar mucho porque era petisa. Me fui entonces a Cachorras, equipo dirigido por el actual DT deMadryn”, relató. Ese fue su primer contacto con Vega, DT con el cual se formó.
Desarrolló su carrera bajo la tutela de Vega, que además de ser DT del equipo femenino del “Aurinegro”, comanda el equipo Puerto Futbol.
Es una de las canteras principales del fútbol femenino de Puerto Madryn, asiduo protagonista en los Juegos Evita, que Mena ha jugado.
Una "perlita": jugó con su prima Sheila Otero, actual jugadora de Moreno que debutó con goles en Alumni de Puerto Madryn a los 12 años.
“Fue mi primer DT. Es un maestro Raúl, lo admiro mucho. Cuando no me dejaban jugar porque era chica, él me dio la oportunidad”, recalcó.
Brenda en los Juegos Evita, representando a Chubut con Germinal.
Sueño cumplido
El puesto natural de Brenda es volante central, pero juega de arquera inclusive. Hoy, se desempeña como delantera. Integró el plantel multicampeón de Barraca/Alumni, que obtuvo seis títulos oficiales en la Liga del Valle entre 2015 y 2018, al mando de Roberto Monserrat. Posteriormente, jugo en Germinal y en Guillermo Brown. También ha jugado diversos torneos de fútbol de salón, con gran suceso.
Brenda, con la camiseta que ama.
Pero su sueño era jugar el torneo femenino con los colores del club que ama: Deportivo Madryn. “Soy hincha del Madryn, fanática. Nos está yendo muy bien en la Primera Nacional, disfruté mucho el ascenso. Pero nosotras también estamos jugando bien”, dice con orgullo. Razón no le falta. “Las Aurinegras”, en su primer torneo tras varios años de ausencia, integran el pelotón principal del torneo.
“Tenemos un buen equipo, aspiramos a llegar lo más alto que se pueda. Mis compañeras son unas genias. A pesar de ser nuestro primer campeonato estamos demostrando en la cancha que hay garra y ganas sobre todo. Faltan pulir algunas cosas porque nunca habíamos jugado todas juntas. Pero vamos bien”, expresó.
“Y mi DT, como te dije, es un grande. Además de mi fanatismo por el club, que esté Raúl Vega en Madryn es otro motivo para que esté. Como no ayudarlo a él, que tantas veces me ayudo y ha ayudado a otras pibas”, expresó.
Una curiosidad: comparte plantel con su hermana Melina Quiñelaf, su primera Karen Córdoba y sus tías Daiana Otero y Vanesa Rivero.
De izquierda a derecha Karen Córdoba (prima), Daiana Otero (tía), Vanesa Rivero (tía), Melina Quiñelaf (hermana) y Brenda Mena.?
Ascenso rechazado
Su pasión por el fútbol le permite superar diversas complicaciones. Por su trabajo en la rotisería, no puede entrenar con sus compañeras.
“Hago de todo. Amaso pizzas y pan, hago hamburguesas, sándwiches y de lomo y mila, rellenos de empanadas. También me toca estar en la plancha y en los hornos sacando pizzas”, enumeró.
“Los lunes, estoy de 8 a 17. Los martes, de 6 AM a 15, los miércoles de 15 hasta la medianoche, los jueves y viernes de 17 a 2 de la mañana y los domingos de 18 a 3 de la madrugada. Y los fines de semana largo, trabajo los domingos”, describió.
“Rechacé un ascenso porque implicaba que no podía jugar al fútbol en el Madryn (sic), por el horario. Por suerte, Germán, mi jefe, entendió. Es un genio. Y cobro como si hubiera aceptado el ascenso”, consideró.
Su familia
El respaldo de la familia es total. “Siempre nos acompaña la familia. Juego con algunas de mis parientes. El resto acompaña. Eso incluye al padre de mi hijo Mateo, que se llama Omar Pichún”, narró. “Él jugó en Madryn, tremendo jugador (sic). No pudo seguir jugando a nivel oficial por una lesión y porque necesitaba trabajar. Juega en la Liga del Golfo (NdR: Fútbol barrial de Madryn”, comentó.
“Sin su apoyo ni el del resto de mi familia, sería imposible jugar al fútbol. Mi primo chicho como le decimos está siempre al igual que mí hermano Eric que me llevan a jugar porque por ahí no tengo franco o llego sobre la hora y ellos se re mueven por mí”, narró.
“Y también les doy gracias a mis compas (sic) de Lizard que me hace la resegunda (sic) siempre también cubriéndome para que pueda jugar. Les agradezco a todos los que me ayudan a que pueda jugar al fútbol”, concluyó.
Brenda Mena, otra de las gladiadoras del fútbol femenino de la Liga del Valle.
Con su prima Sheila Otero en Alumni, después de sufrir un accidente yendo a trabajar que le impidió jugar las semifinales en 2018.?
Agradecimientos
+Su hijo Mateo
+Omar, el padre de Mateo
+Sus padres Mónica y Nelson
+Sus hermanos Eric, Melina, Jesús y Matías
+Sus abuelos Adolfo y Elsa
+Sus primos/as y tíos/as
+Compañeras y cuerpo técnico de Deportivo Madryn
+Compañeros y jefes en su lugar de trabajo
+ “Tití” Ortiz y “Sofi” Guzmán, amigas de Germinal
Mateo, el hijo de Brenda, no quiere perderse ningún partido de su mamá.