Víctima de secuelas gravísimas de un serio problema de salud que lo aquejaba ya de desde hace bastante tiempo, falleció ayer en Buenos Aires, en un renombrado establecimiento asistencial, el reconocido periodista Pablo Dratman, radicado en la ciudad de Trelew desde los inicios de la década del ochenta.
Dratman encontró la muerte en el Instituto Fleni y la noticia de su desaparición despertó la congoja de familiares, amistades y los numerosos allegados que tenía el comunicador.
Dratman llegó al Chubut en épocas de la dictadura militar y ejerció su profesión inicialmente en el diario El Chubut, posteriormente en Jornada y antes de ser aquejado por la enfermedad que lo llevó a la muerte se desempeñaba profesionalmente en Puerto Madryn.
Editorialista, Dratman se caracterizaba por su aguda visión de la realidad y era realmente un verdadero profesional cuando preparaba sus escritos, muchas veces polémicos.
Era un buceador de la actualidad política de la provincia y su pluma se movía al ritmo de los principales acontecimientos reflejando un pensamiento que podría tener sus críticos, pero era respetado por todos.
Vaya desde estas páginas las condolencias para su familia.
Víctima de secuelas gravísimas de un serio problema de salud que lo aquejaba ya de desde hace bastante tiempo, falleció ayer en Buenos Aires, en un renombrado establecimiento asistencial, el reconocido periodista Pablo Dratman, radicado en la ciudad de Trelew desde los inicios de la década del ochenta.
Dratman encontró la muerte en el Instituto Fleni y la noticia de su desaparición despertó la congoja de familiares, amistades y los numerosos allegados que tenía el comunicador.
Dratman llegó al Chubut en épocas de la dictadura militar y ejerció su profesión inicialmente en el diario El Chubut, posteriormente en Jornada y antes de ser aquejado por la enfermedad que lo llevó a la muerte se desempeñaba profesionalmente en Puerto Madryn.
Editorialista, Dratman se caracterizaba por su aguda visión de la realidad y era realmente un verdadero profesional cuando preparaba sus escritos, muchas veces polémicos.
Era un buceador de la actualidad política de la provincia y su pluma se movía al ritmo de los principales acontecimientos reflejando un pensamiento que podría tener sus críticos, pero era respetado por todos.
Vaya desde estas páginas las condolencias para su familia.