Bayern Munich ganó la Supercopa de Europa por penales en Praga

El equipo alemán encontró el empate 2-2 ante Chelsea, en el último segundo del tiempo extra, por intermedio del español Javi Martínez. Luego, se impuso en la definición 5-4 cuando Neuer le atajó el último penal al belga Lukaku. Primer título oficial de Pep Guardiola con los teutones.

30 AGO 2013 - 18:34 | Actualizado

Agónico. Bayern Munich perdía y lo igualó para ir a la prórroga. Y en los 30 minutos finales volvió a quedar debajo en el marcador, pero increíblemente lo empató en la última jugada del partido. En los penales, lo definió 5 a 4 y se quedó con la gloria europea y el primer título para Pep Guardiola.

Pese a que el encuentro comenzó con un claro dominio de los alemanes, a los 8 minutos de juego apareció Fernando Torres tras una gran jugada colectiva y marcó el 1 a 0 en favor del conjunto inglés. Los de Mourinho se pararon de contra y abrieron el marcador en Praga,

Desde ese momento, el equipo de Pep Guardio intentó ser aún más agresivo, pero comenzaron a aparecer muchos problemas cuando superaba la línea de tres cuartos.

Sólo se veían hombres de azul y muy pocos espacios. Sin embargo pudo abrir el marcador gracias a Frank Ribery que con un gran gesto técnico se llevó la pelota, se sacó de encima a Ramires y remató cruzado, pero el disparo se fue por poco.

Los primeros 45 culminaron con Chelsea arriba en el marcador, pero en el segundo tiempo rápidamente llegaría la respuesta del Bayern Munich. A los dos minutos de juegos volvió a aparecer el mejor jugador de Europa y metió un fuerte disparo que terminó en el fondo de la red.

Tras el 1 a 1, los de Guardiola intentaron pero las chances más claras fueron para los ingleses que con menos ideas, pero con más contundencia, tuvieron varias oportunidades de ponerse arriba. Así, el encuentro fue decayendo y se fueron al tiempo suplementario.

En los 30 de prórroga, los de Mourinho llegaron al 2 a 1 parcial gracias a la aparición de Hazzard. Pero cuando todo se acababa y el portugués se coronaba una vez más, Javi Martínez marcó un gol agónico que decretó el empate final y los penales.

Desde los once pasos, Bayern Munich le ganó 5 a 4 a Chelsea y se convirtió en el campeón de la Supercopa de Europa.

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30 AGO 2013 - 18:34

Agónico. Bayern Munich perdía y lo igualó para ir a la prórroga. Y en los 30 minutos finales volvió a quedar debajo en el marcador, pero increíblemente lo empató en la última jugada del partido. En los penales, lo definió 5 a 4 y se quedó con la gloria europea y el primer título para Pep Guardiola.

Pese a que el encuentro comenzó con un claro dominio de los alemanes, a los 8 minutos de juego apareció Fernando Torres tras una gran jugada colectiva y marcó el 1 a 0 en favor del conjunto inglés. Los de Mourinho se pararon de contra y abrieron el marcador en Praga,

Desde ese momento, el equipo de Pep Guardio intentó ser aún más agresivo, pero comenzaron a aparecer muchos problemas cuando superaba la línea de tres cuartos.

Sólo se veían hombres de azul y muy pocos espacios. Sin embargo pudo abrir el marcador gracias a Frank Ribery que con un gran gesto técnico se llevó la pelota, se sacó de encima a Ramires y remató cruzado, pero el disparo se fue por poco.

Los primeros 45 culminaron con Chelsea arriba en el marcador, pero en el segundo tiempo rápidamente llegaría la respuesta del Bayern Munich. A los dos minutos de juegos volvió a aparecer el mejor jugador de Europa y metió un fuerte disparo que terminó en el fondo de la red.

Tras el 1 a 1, los de Guardiola intentaron pero las chances más claras fueron para los ingleses que con menos ideas, pero con más contundencia, tuvieron varias oportunidades de ponerse arriba. Así, el encuentro fue decayendo y se fueron al tiempo suplementario.

En los 30 de prórroga, los de Mourinho llegaron al 2 a 1 parcial gracias a la aparición de Hazzard. Pero cuando todo se acababa y el portugués se coronaba una vez más, Javi Martínez marcó un gol agónico que decretó el empate final y los penales.

Desde los once pasos, Bayern Munich le ganó 5 a 4 a Chelsea y se convirtió en el campeón de la Supercopa de Europa.


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