Cuando el corazón domina la mente
Se trata de un proyecto de Matías Acosta y Ian Mazzaglia, que egresaron este año de la ENET y cuyo resultado es la interface que desde el jueves usa Romina. Una interface es la interacción de una persona con una computadora que realiza un trabajo por medio de ese dispositivo.
Romina pasa su mano sobre un aparato que rectangular rojo. Un sensor detecta su mano y en la pantalla de una computadora frente a ella van pasando las fotos de su fiesta de cumpleaños Nº 15. Romina deja de pasar la mano porque acaba de elegir una foto entre muchas que vio. Se queda mirando la foto porque es la que más le gusta.
La escena no es diferente de miles de millones de escenas similares que se pueden dar en distintos hogares del planeta, sino fuera por dos motivos. Romina, es una chica especial sentada en su silla de ruedas por una deficiencia motriz y el aparato sobre el que pasa la mano es una interface electrónica de comunicación para personas especiales construida especialmente para ella por Matías Acosta y Ian Mazzaglia, alumnos de 6to 1ª T de la Escuela Nº 748, Ex ENET Nº1 de Trelew.
Guiados por la indispensable mano del profesor Daniel Aguilar, Matías y Ian trabajaron en la primera de las maquetas, luego pasaron a una segunda etap y una segunda maqueta más definida y completa que la primera, hasta que finalmente llegaron a la tercer y definitivo modelo de la interface.
Daniel Aguilar comentó a Jornada que antes de comenzar a trabajar en el proyecto, escucharon a profesionales especializados. “Se consultó a una especialista en motricidad, el proyecto se basó en la palabra de la especialista. La especialista les dijo que ella (Romina) decidiría si puede o no puede (usar el aparato para comunicarse). Y ella pudo.
La interface, se trata de varias secuencias que se preparan, hay muchos software educativos para chicos con capacidades diferentes. En este caso usamos uno muy sencillo, es una secuencia de power point, donde ella trabaja en matemáticas y aparecen la división, el dividendo y ella va avanzando paso a paso como si fuera viendo una película. De la misma manera con la multiplicación, etc. Y la evaluación es de la misma manera con tres opciones (verdadero o falso) y ella espera hasta que aparezca la que piensa que es correcta y entonces pasa la mano sobre el detector y da la respuesta. Es como si nosotros agarráramos un libro y fuéramos pasando hoja por hoja. Y es ella la que dispone de la acción y no depende de que otra persona realice la acción por ella. Aspiramos a que aprenda escribir. Parece algo muy sencillo para nosotros, pero para ella es muy exigente”, completó el docente.
Pilar, la mamá de Romina, muy emocionada dijo: “Yo no tengo palabras para nombrar o decir la emoción que siento, de uqe venga otra persona y te ayude a llevar este momento. Yo agradezco a este colegio 784, a la directora Olga Bianco y estos chicos que han hecho algo tan único para Romina. Ella lo expresa: ¡Es lo más grande!. Dios me dio fuerzas para seguir, golpee puertas y se abrió esta puerta. Estoy agradecida de todo corazón con estas personas. En la situación que vivimos en este tiempo, no hay muchas personas que hagan estas acciones y que lo hagan con tanto afecto”.
Romina pasa su mano sobre un aparato que rectangular rojo. Un sensor detecta su mano y en la pantalla de una computadora frente a ella van pasando las fotos de su fiesta de cumpleaños Nº 15. Romina deja de pasar la mano porque acaba de elegir una foto entre muchas que vio. Se queda mirando la foto porque es la que más le gusta.
La escena no es diferente de miles de millones de escenas similares que se pueden dar en distintos hogares del planeta, sino fuera por dos motivos. Romina, es una chica especial sentada en su silla de ruedas por una deficiencia motriz y el aparato sobre el que pasa la mano es una interface electrónica de comunicación para personas especiales construida especialmente para ella por Matías Acosta y Ian Mazzaglia, alumnos de 6to 1ª T de la Escuela Nº 748, Ex ENET Nº1 de Trelew.
Guiados por la indispensable mano del profesor Daniel Aguilar, Matías y Ian trabajaron en la primera de las maquetas, luego pasaron a una segunda etap y una segunda maqueta más definida y completa que la primera, hasta que finalmente llegaron a la tercer y definitivo modelo de la interface.
Daniel Aguilar comentó a Jornada que antes de comenzar a trabajar en el proyecto, escucharon a profesionales especializados. “Se consultó a una especialista en motricidad, el proyecto se basó en la palabra de la especialista. La especialista les dijo que ella (Romina) decidiría si puede o no puede (usar el aparato para comunicarse). Y ella pudo.
La interface, se trata de varias secuencias que se preparan, hay muchos software educativos para chicos con capacidades diferentes. En este caso usamos uno muy sencillo, es una secuencia de power point, donde ella trabaja en matemáticas y aparecen la división, el dividendo y ella va avanzando paso a paso como si fuera viendo una película. De la misma manera con la multiplicación, etc. Y la evaluación es de la misma manera con tres opciones (verdadero o falso) y ella espera hasta que aparezca la que piensa que es correcta y entonces pasa la mano sobre el detector y da la respuesta. Es como si nosotros agarráramos un libro y fuéramos pasando hoja por hoja. Y es ella la que dispone de la acción y no depende de que otra persona realice la acción por ella. Aspiramos a que aprenda escribir. Parece algo muy sencillo para nosotros, pero para ella es muy exigente”, completó el docente.
Pilar, la mamá de Romina, muy emocionada dijo: “Yo no tengo palabras para nombrar o decir la emoción que siento, de uqe venga otra persona y te ayude a llevar este momento. Yo agradezco a este colegio 784, a la directora Olga Bianco y estos chicos que han hecho algo tan único para Romina. Ella lo expresa: ¡Es lo más grande!. Dios me dio fuerzas para seguir, golpee puertas y se abrió esta puerta. Estoy agradecida de todo corazón con estas personas. En la situación que vivimos en este tiempo, no hay muchas personas que hagan estas acciones y que lo hagan con tanto afecto”.