Recompensa: 500 mil por Espiasse

Es el precio que le puso el Ministerio de Justicia de Nación al reconocido delincuente chubutense.

05 MAY 2014 - 21:52 | Actualizado

Martín Espiasse sigue sin aparecer y el Estado Nacional puso precio a su cabeza: medio millón de pesos. Así se pudo saber ayer en el programa emitido por América TV del conductor Oscar González Oro que gira bajo el nombre de “Los unos y los otros”.

En la edición de este lunes, González Oro entrevistó en el piso y vía teléfonica a familiares del suboficial Pablo Rearte, uno de los policías asesinados por el propio Espiasse en el asalto al cajero del Banco del Chubut en junio de 2007. Espiasse es uno de los 13 presos que se fugaron del penal de Ezeiza el 19 de agosto. Siete ya fueron recapturados. Entre los seis que siguen prófugos se encuentra el delincuente de Trelew, condenado a perpetua por haber asesinado a los policías Rearte y Cruzado.

Pero hay un dato que convierte a Espiasse en un delincuente de temer: la Policía bonaerense tuvo datos sobre su paradero en dos oportunidades. Pero cuando llegó a los lugares señalados, Espiasse había desaparecido. Al parecer, el delincuente tiene muy bien aceitada su vida de prófugo: le avisan cuando van a buscarlo.

Espiasse fue el cabecilla de la banda que asaltó un cajero automático ubicado en el ministerio de Economía, en Rawson. Fue en junio de 2007. En el robo mataron a los policías Oscar Cruzado y Pablo Rearte. Todos los integrantes de la banda fueron detenidos y juzgados.

Fue fue llevado a Chubut en 2010, cuando la Policía de Mendoza lo reconoció por una foto. Fue condenado a perpetua y enviado a la Unidad 6 de Rawson, donde no estuvo mucho tiempo. Según pudo confirmar Jornada era intratable por su conducta y su relación con otros internos. Por eso lo mandaron a Ezeiza, un penal que se supone también es de máxima seguridad.

En nuestra provincia también tuvo condenas en 2001 y 2003. Pero los antecedentes de uno de los delincuentes más temidos de nuestra provincia tienen otros hechos sangrientos. En 1998 había asesinado al sargento Gabriel Jara cuando quiso hacer fugar a un hermano preso. Y se lo acusa de matar a su segunda esposa, en Córdoba.

Tras el robo al cajero fue el único integrante de la banda que desapareció. Y estuvo prófugo tres años hasta que se lo detectó preso en Mendoza. Allí también intentó fugarse del Hospital Central donde había sido llevado por una insuficiencia renal. Fue en marzo de 2010. Salió corriendo del nosocomio con las esposas puestas y el suero que le colgaba de uno de los brazos.

Como se vio acorralado por la custodia, se tiró al canal Guaymallén. Se fracturó, fue detenido y lo sacaron en camilla y atado para devolverlo al Penal de Almafuerte.

Antes, en Bahía Blanca, había puesto tres bombas caseras junto al muro del penal mientras los otros presos jugaban al fútbol. Sólo una explotó y no pudo abrir el boquete deseado.

En Mendoza cumplía una condena por robo agravado, se hacía llamar Matías Nicolás Lago González.

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05 MAY 2014 - 21:52

Martín Espiasse sigue sin aparecer y el Estado Nacional puso precio a su cabeza: medio millón de pesos. Así se pudo saber ayer en el programa emitido por América TV del conductor Oscar González Oro que gira bajo el nombre de “Los unos y los otros”.

En la edición de este lunes, González Oro entrevistó en el piso y vía teléfonica a familiares del suboficial Pablo Rearte, uno de los policías asesinados por el propio Espiasse en el asalto al cajero del Banco del Chubut en junio de 2007. Espiasse es uno de los 13 presos que se fugaron del penal de Ezeiza el 19 de agosto. Siete ya fueron recapturados. Entre los seis que siguen prófugos se encuentra el delincuente de Trelew, condenado a perpetua por haber asesinado a los policías Rearte y Cruzado.

Pero hay un dato que convierte a Espiasse en un delincuente de temer: la Policía bonaerense tuvo datos sobre su paradero en dos oportunidades. Pero cuando llegó a los lugares señalados, Espiasse había desaparecido. Al parecer, el delincuente tiene muy bien aceitada su vida de prófugo: le avisan cuando van a buscarlo.

Espiasse fue el cabecilla de la banda que asaltó un cajero automático ubicado en el ministerio de Economía, en Rawson. Fue en junio de 2007. En el robo mataron a los policías Oscar Cruzado y Pablo Rearte. Todos los integrantes de la banda fueron detenidos y juzgados.

Fue fue llevado a Chubut en 2010, cuando la Policía de Mendoza lo reconoció por una foto. Fue condenado a perpetua y enviado a la Unidad 6 de Rawson, donde no estuvo mucho tiempo. Según pudo confirmar Jornada era intratable por su conducta y su relación con otros internos. Por eso lo mandaron a Ezeiza, un penal que se supone también es de máxima seguridad.

En nuestra provincia también tuvo condenas en 2001 y 2003. Pero los antecedentes de uno de los delincuentes más temidos de nuestra provincia tienen otros hechos sangrientos. En 1998 había asesinado al sargento Gabriel Jara cuando quiso hacer fugar a un hermano preso. Y se lo acusa de matar a su segunda esposa, en Córdoba.

Tras el robo al cajero fue el único integrante de la banda que desapareció. Y estuvo prófugo tres años hasta que se lo detectó preso en Mendoza. Allí también intentó fugarse del Hospital Central donde había sido llevado por una insuficiencia renal. Fue en marzo de 2010. Salió corriendo del nosocomio con las esposas puestas y el suero que le colgaba de uno de los brazos.

Como se vio acorralado por la custodia, se tiró al canal Guaymallén. Se fracturó, fue detenido y lo sacaron en camilla y atado para devolverlo al Penal de Almafuerte.

Antes, en Bahía Blanca, había puesto tres bombas caseras junto al muro del penal mientras los otros presos jugaban al fútbol. Sólo una explotó y no pudo abrir el boquete deseado.

En Mendoza cumplía una condena por robo agravado, se hacía llamar Matías Nicolás Lago González.


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