La aparición de los restos de una ballena causó asombro a los pescadores y bañistas que se encontraban este viernes por la mañana en la costa de la Isla Escondida, la playa ubicada 60 kilómetros al Sur de la ciudad de Trelew.
El director de Fauna y Flora Silvestre de Chubut, Fernando Bersano confirmó que se trataba de un mamífero luego que, por su estado de descomposición, los testigos lo confundieran con una inusual criatura marina.
“Esto es de hoy en Isla Escondida, Chubut ¿Alguien sabe que animal es?”, publicó Juan Agustín, quien compartió las fotos en el grupo de Facebook “Soy Patagónico”. Era la primera vez que el joven visitaba la Isla Escondida. Según narró, se topó con los restos del animal marino luego de desviarse varios kilómetros hacia el sector Sur de la costa. “Había solo tres autos en toda la playa y para el lado donde yo estaba no había nadie. Esto se veía de lejos. Era algo medio amarillo y anaranjado”.
La piel del cetáceo medía más de dos metros de largo y fue arrastrada hacia la orilla por la corriente marítima.
En comunicación con Cadena Tiempo, Bersano manifestó: “Todas estas descomposiciones tienen una alta carga de patógenos”. Recomendó a los visitantes no acercarse. “No hay que tocarlo”.
La aparición de los restos de una ballena causó asombro a los pescadores y bañistas que se encontraban este viernes por la mañana en la costa de la Isla Escondida, la playa ubicada 60 kilómetros al Sur de la ciudad de Trelew.
El director de Fauna y Flora Silvestre de Chubut, Fernando Bersano confirmó que se trataba de un mamífero luego que, por su estado de descomposición, los testigos lo confundieran con una inusual criatura marina.
“Esto es de hoy en Isla Escondida, Chubut ¿Alguien sabe que animal es?”, publicó Juan Agustín, quien compartió las fotos en el grupo de Facebook “Soy Patagónico”. Era la primera vez que el joven visitaba la Isla Escondida. Según narró, se topó con los restos del animal marino luego de desviarse varios kilómetros hacia el sector Sur de la costa. “Había solo tres autos en toda la playa y para el lado donde yo estaba no había nadie. Esto se veía de lejos. Era algo medio amarillo y anaranjado”.
La piel del cetáceo medía más de dos metros de largo y fue arrastrada hacia la orilla por la corriente marítima.
En comunicación con Cadena Tiempo, Bersano manifestó: “Todas estas descomposiciones tienen una alta carga de patógenos”. Recomendó a los visitantes no acercarse. “No hay que tocarlo”.