Los presidentes de Venezuela y China, Nicolás Maduro y Xi Jinping suscribieron hoy en Caracas 38 acuerdos de cooperación que permitirán al país sudamericano disponer de créditos por 5.691 millones de dólares y fabricar su tercer satélite.
En virtud de uno de los acuerdos, China aportará 4.000 millones -y Venezuela otros 2.000 millones- al Fondo Conjunto Chino-Venezolano, usualmente llamado Fondo Chino, con el que se financian proyectos venezolanos de desarrollo.
Otro de los entendimientos compromete al Eximbank (banco de comercio exterior) de China a entregar a la petrolera estatal venezolana Pdvsa 1.000 millones para "la compra de bienes y servicios para la industria" y "nuevos proyectos".
Asimismo, China aportará otros 691 millones para la certificación y la exploración de reservas minerales, así como para "el desarrollo de una mina de oro y cobre" en Venezuela, informaron las agencias de noticias AVN y EFE.
Desde 2007 y hasta principios de este año, Pekín aportó más de 40.000 millones al Fondo Chino y Caracas paga con la exportación de 524.000 barriles diarios de petróleo crudo y derivados, volumen que se estima será elevado a un millón de barriles en 2016.
Por otra parte, Maduro y Xi acordaron el intercambio de conocimientos para la fabricación de un nuevo satélite "de percepción remota, que servirá para el fortalecimiento de las capacidades cartográficas" de Venezuela, según AVN.
Venezuela ya tiene en órbita dos satélites, también construidos en el contexto de la cooperación con China: desde 2008 el Simón Bolívar, destinado a soporte de telecomunicaciones, y desde 2012 el Francisco de Miranda, para observación remota y cartografía.
Asimismo, los mandatarios firmaron un acuerdo de "cooperación financiera" por un monto no precisado, con el objeto de "agilizar los procesos de emisión de pólizas de seguros" para "créditos de exportación suscriptos por Pdvsa" con "empresas de China".
Además, se acordó la compra por parte de Venezuela de 10.000 vehículos para uso particular y transporte escolar, y 1.500 ómnibus, operación que incluye capacitación para la "instalación de sistemas automatizados de cobro de pasajes".
Igualmente, se acordó crear empresas binacionales para la producción de fertilizantes, agroquímicos y materiales para la construcción, entre ellas una planta de cemento en el estado Lara, que permitirá incrementar en alrededor de 10 por ciento la producción venezolana, actualmente de unos 10 millones de toneladas anuales.
Maduro afirmó que la de Xi "es una visita histórica que inicia una nueva era en las relaciones entre China y Venezuela", y sostuvo que los pueblos de ambos países son "verdaderos hermanos para las grandes tareas del siglo XXI".
"Hoy, ese camino de 15 años labrado por el (fallecido ex) presidente Hugo Chávez, labrado por las dos patrias, hemos decidido elevarlo a un nivel superior y declarar una asociación estratégica de carácter integral entre China y Venezuela", agregó Maduro.
El mandatario venezolano resaltó que el aporte financiero al que se comprometió China "no le pone" a Venezuela "una deuda pesada" pues "es un financiamiento que es respaldado por una fórmula de producción y suministro de barriles de petróleo".
"Quiere decir que es una fórmula virtuosa que permite financiamiento y desarrollo, y no crea deudas pesadas como los viejos sistemas", insistió Maduro al clausurar junto a Xi la XIII Comisión Mixta de Alto Nivel bilateral, en la sede del Círculo Militar.
"Constatamos con satisfacción que el presidente Maduro heredó la voluntad de Chávez de promover con firmeza esta gran causa del socialismo del siglo XXI con importantes éxitos", respondió Xi, y explicó que China apoya a Venezuela "por adoptar un camino de desarrollo acorde a sus realidades".
Los presidentes de Venezuela y China, Nicolás Maduro y Xi Jinping suscribieron hoy en Caracas 38 acuerdos de cooperación que permitirán al país sudamericano disponer de créditos por 5.691 millones de dólares y fabricar su tercer satélite.
En virtud de uno de los acuerdos, China aportará 4.000 millones -y Venezuela otros 2.000 millones- al Fondo Conjunto Chino-Venezolano, usualmente llamado Fondo Chino, con el que se financian proyectos venezolanos de desarrollo.
Otro de los entendimientos compromete al Eximbank (banco de comercio exterior) de China a entregar a la petrolera estatal venezolana Pdvsa 1.000 millones para "la compra de bienes y servicios para la industria" y "nuevos proyectos".
Asimismo, China aportará otros 691 millones para la certificación y la exploración de reservas minerales, así como para "el desarrollo de una mina de oro y cobre" en Venezuela, informaron las agencias de noticias AVN y EFE.
Desde 2007 y hasta principios de este año, Pekín aportó más de 40.000 millones al Fondo Chino y Caracas paga con la exportación de 524.000 barriles diarios de petróleo crudo y derivados, volumen que se estima será elevado a un millón de barriles en 2016.
Por otra parte, Maduro y Xi acordaron el intercambio de conocimientos para la fabricación de un nuevo satélite "de percepción remota, que servirá para el fortalecimiento de las capacidades cartográficas" de Venezuela, según AVN.
Venezuela ya tiene en órbita dos satélites, también construidos en el contexto de la cooperación con China: desde 2008 el Simón Bolívar, destinado a soporte de telecomunicaciones, y desde 2012 el Francisco de Miranda, para observación remota y cartografía.
Asimismo, los mandatarios firmaron un acuerdo de "cooperación financiera" por un monto no precisado, con el objeto de "agilizar los procesos de emisión de pólizas de seguros" para "créditos de exportación suscriptos por Pdvsa" con "empresas de China".
Además, se acordó la compra por parte de Venezuela de 10.000 vehículos para uso particular y transporte escolar, y 1.500 ómnibus, operación que incluye capacitación para la "instalación de sistemas automatizados de cobro de pasajes".
Igualmente, se acordó crear empresas binacionales para la producción de fertilizantes, agroquímicos y materiales para la construcción, entre ellas una planta de cemento en el estado Lara, que permitirá incrementar en alrededor de 10 por ciento la producción venezolana, actualmente de unos 10 millones de toneladas anuales.
Maduro afirmó que la de Xi "es una visita histórica que inicia una nueva era en las relaciones entre China y Venezuela", y sostuvo que los pueblos de ambos países son "verdaderos hermanos para las grandes tareas del siglo XXI".
"Hoy, ese camino de 15 años labrado por el (fallecido ex) presidente Hugo Chávez, labrado por las dos patrias, hemos decidido elevarlo a un nivel superior y declarar una asociación estratégica de carácter integral entre China y Venezuela", agregó Maduro.
El mandatario venezolano resaltó que el aporte financiero al que se comprometió China "no le pone" a Venezuela "una deuda pesada" pues "es un financiamiento que es respaldado por una fórmula de producción y suministro de barriles de petróleo".
"Quiere decir que es una fórmula virtuosa que permite financiamiento y desarrollo, y no crea deudas pesadas como los viejos sistemas", insistió Maduro al clausurar junto a Xi la XIII Comisión Mixta de Alto Nivel bilateral, en la sede del Círculo Militar.
"Constatamos con satisfacción que el presidente Maduro heredó la voluntad de Chávez de promover con firmeza esta gran causa del socialismo del siglo XXI con importantes éxitos", respondió Xi, y explicó que China apoya a Venezuela "por adoptar un camino de desarrollo acorde a sus realidades".