La ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos con base en Londres y una amplia red de activistas sobre el terreno, documentó las víctimas de las operaciones de la fuerza multinacional, liderada por Estados Unidos, desde el pasado 23 de septiembre y hasta anoche.
La mayor parte de los muertos son miembros del EI que perdió a 464 de sus combatientes, casi todos extranjeros, desde el comienzo de los bombardeos.
La aviación internacional atacó a grupos de combatientes, cuarteles y plantas petroleras en varias provincias del centro, norte y este de Siria: Homs, Hama, Alepo, Al Hasaka, Deir el Zur y Al Raqqa.
Los ataques aéreos también causaron bajas en las filas del Frente al Nusra -filial de Al Qaeda en Siria-, que perdió a 57 de sus hombres en las provincias septentrionales de Alepo y de Idleb.
La coalición internacional tuvo como blanco, además de bases de los yihadistas, refinerías y yacimientos petroleros en las provincias de Al Hasaka y Deir al Zur, algunas en manos del EI pero otros administradas por civiles.
Los bombardeos también afectaron una fábrica en Al Raqqa, el feudo del EI, y a molinos situados en Alepo y en Idleb.
La fuerza multinacional encabezada por Estados Unidos, que cuenta con el respaldo de la aviación de varios países árabes como Arabia Saudí y Jordania, bombardea desde hace un mes posiciones de los yihadistas en Siria e Irak, según despacho de EFE.
El EI proclamó a fines de junio pasado un califato en el territorio bajo su control de estos dos países, después de lograr importantes avances en Siria y haber conquistado amplias zonas de Irak.
La ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos con base en Londres y una amplia red de activistas sobre el terreno, documentó las víctimas de las operaciones de la fuerza multinacional, liderada por Estados Unidos, desde el pasado 23 de septiembre y hasta anoche.
La mayor parte de los muertos son miembros del EI que perdió a 464 de sus combatientes, casi todos extranjeros, desde el comienzo de los bombardeos.
La aviación internacional atacó a grupos de combatientes, cuarteles y plantas petroleras en varias provincias del centro, norte y este de Siria: Homs, Hama, Alepo, Al Hasaka, Deir el Zur y Al Raqqa.
Los ataques aéreos también causaron bajas en las filas del Frente al Nusra -filial de Al Qaeda en Siria-, que perdió a 57 de sus hombres en las provincias septentrionales de Alepo y de Idleb.
La coalición internacional tuvo como blanco, además de bases de los yihadistas, refinerías y yacimientos petroleros en las provincias de Al Hasaka y Deir al Zur, algunas en manos del EI pero otros administradas por civiles.
Los bombardeos también afectaron una fábrica en Al Raqqa, el feudo del EI, y a molinos situados en Alepo y en Idleb.
La fuerza multinacional encabezada por Estados Unidos, que cuenta con el respaldo de la aviación de varios países árabes como Arabia Saudí y Jordania, bombardea desde hace un mes posiciones de los yihadistas en Siria e Irak, según despacho de EFE.
El EI proclamó a fines de junio pasado un califato en el territorio bajo su control de estos dos países, después de lograr importantes avances en Siria y haber conquistado amplias zonas de Irak.