"China se opone firmemente a las torturas", dijo hoy Hong Lei, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, quien agregó que de seguir sus recomendaciones, Estados Unidos "honrará y obedecerá las regulaciones nacionales relevantes", informó la agencia de noticias EFE.
El Comité de Inteligencia del Senado de EEUU divulgó ayer, tras cinco años de investigación, un documento que analiza el uso de torturas en procesos de interrogatorio a sospechosos y miembros de la red Al Qaeda retenidos en instalaciones secretas en Europa y Asia en los ocho años posteriores a los atentados del 11 se septiembre de 2001.
Según el estudio, los detenidos tras esos atentados en Nueva York y Washington sufrieron prácticas como la privación de sueño durante más de una semana, la amenaza de que no saldrían vivos del periodo de custodia y prácticas de asfixia definidas como "series de ahogamientos".
"China se opone firmemente a las torturas", dijo hoy Hong Lei, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, quien agregó que de seguir sus recomendaciones, Estados Unidos "honrará y obedecerá las regulaciones nacionales relevantes", informó la agencia de noticias EFE.
El Comité de Inteligencia del Senado de EEUU divulgó ayer, tras cinco años de investigación, un documento que analiza el uso de torturas en procesos de interrogatorio a sospechosos y miembros de la red Al Qaeda retenidos en instalaciones secretas en Europa y Asia en los ocho años posteriores a los atentados del 11 se septiembre de 2001.
Según el estudio, los detenidos tras esos atentados en Nueva York y Washington sufrieron prácticas como la privación de sueño durante más de una semana, la amenaza de que no saldrían vivos del periodo de custodia y prácticas de asfixia definidas como "series de ahogamientos".