Realizaron exitosa triple cirugía cardíaca en Trelew

Se trata de un tipo especial de intervención conocida como “Bentall - De Bono”. Tuvo lugar en abril en el Instituto de Cardiología Pueblo de Luis. El paciente fue un hombre de 33 años. El procedimiento incorporó además moderno instrumental para sus secciones de Hemodinamia y Electrofisiología.

25 JUN 2015 - 21:47 | Actualizado

Una intervención inédita en la zona tuvo lugar en abril con la realización de una triple cirugía cardíaca, conocida como “Bentall - De Bono”. A cargo del especialista Marcelo Nahín, la exitosa operación se desarrolló el 9 de abril en el Instituto de Cardiología Pueblo de Luis de Trelew a un hombre de 33 años.

Se trata de una de las intervenciones más complejas de realizar ya que los tiempos de circulación extracorpórea –es decir, los momentos en que la circulación del paciente debe ser mantenida por medios artificiales mientras su corazón está siendo reparado– son más prolongados que en las cardiocirugías convencionales.

Técnica quirúrgica

El paciente padecía una cardiopatía congénita conocida como aorta bisúspide. Con los años esa malformación de nacimiento le produjo un cuadro de insuficiencia aguda. Mientras su familia planificaba el urgente traslado a un centro de alta complejidad en Buenos Aires, la obra social decidió que existía a nivel local la capacidad de realizar la compleja operación requerida: el reemplazo de la válvula de entrada a la arteria aorta más la reparación del primer tramo de esta misma arteria, que sale del corazón y es la más importante del organismo.

El cirujano cardiovascular Marcelo Nahín explicó que la cirugía Bentall - De Bono “es en realidad una triple cirugía cardíaca”. Además el paciente tenía una dilatación importante de la raíz aórtica -la primera porción de la arteria-, lo que motivó la triple intervención: primero, en el reemplazo de la válvula, luego en el reemplazo del tramo ascendente de la arteria y, por último, el reemplazo del ostium coronario, donde la aorta se conecta con la arteria coronaria, que irriga al músculo cardíaco.

“Esta cirugía se realiza con un tubo valvulado, que es como una manguera en la que en uno de sus extremos tiene implantada desde fábrica una válvula aórtica”, indicó el profesional, que ya aplicó la técnica en el Hospital El Cruce, centro público de alta complejidad ubicado en la localidad bonaerense de Florencio Varela. “Una vez colocado el tubo hay que fabricar dos orificios con un quemador protésico especial, donde se reimplantan las dos arterias coronarias, ya que estas nacen en el sector que el paciente tenía afectado”.

La cirugía demandó cinco horas. El paciente evolucionó satisfactoriamente y regresó a su casa luego de siete días.

Además de Nahín participaron el cirujano José Orozco como primer ayudante, el anestesiólogo Julio Alvarado, la técnica perfusionista Natalia Carro y la instrumentadora Natalia Cardozo.

Complejidad

El procedimiento representa un desafío ya que el margen de error es mínimo: “Es una cirugía de muy alta complejidad que pudo realizar nuestro equipo a cargo del doctor Nahín”, remarcó Roberto Ingaramo, médico cardiólogo director del Instituto de Cardiología Pueblo de Luis.

“Luego de eso fue necesario un seguimiento, control y cuidados en la Unidad Coronaria para que se recuperase completamente y pudiera volver a su casa y esa tarea, que también es compleja, está a cargo de nuestro equipo médico especialmente capacitado”, dijo el profesional al referirse a los médicos encargados de Recuperación Cardiovascular Carolina Ingaramo y Martín Latorre.

Tecnología

Ingaramo destacó que “además de la idoneidad y la preparación del plantel profesional, el instituto cuenta con la más sofisticada estructura a nivel regional, que incluye quirófanos con mesas especiales para cirugía cardíaca y anestesia para este tipo de intervenciones, además de los de cirugía general. Pero también brinda un servicio de primer nivel en las áreas de Electrofisiología y Hemodinamia, para el diagnóstico y el tratamiento por vía endovascular, que este mismo mes incorporó nuevo equipamiento”.

“Es un equipo de rayos X con una sofisticación adicional, que permite trabajar en vasos que tienen entre 2 y 3 milímetros de diámetro, que es, por ejemplo, la medida de los stents que se colocan en las arterias coronarias”, explicó Javier Woscoboinik, cardiólogo intervencionista que está a cargo del servicio y es pionero en el uso de sistemas angiográficos en la región patagónica donde, desde hace 15 años ya se han realizado unos 10 mil procedimientos de este tipo.

“La mayor parte de los estudios que se realizan con estas tecnologías –que permiten “seguir” el trayecto del catéter a través de la arteria, ingresando generalmente por un mínimo orificio a nivel del abdomen– son angiografías de carótidas o de los miembros interiores, en los que las arterias pueden estar ocluidas y el paciente siente dolor y no puede caminar ni siquiera una cuadra”, explicó el especialista.

En este sentido, cada vez son más las patologías en las que un paciente ingresa en hemodinamia para ser estudiado y, en la misma intervención, se resuelve el problema. Incluso la colocación de un stent puede ser resuelta en el momento si el médico intervencionista lo decide conveniente.

“En otros casos –aseguró Woscoboinik– es mejor solicitar el material adecuado y realizar una nueva intervención en forma programada. Sólo se recurre a la cirugía cuando hay muchas arterias afectadas o por alguna otra razón se hace difícil hacer la intervención por vía endovascular, como cuando es necesaria una cirugía de bypass”.

Los aneurismas de aorta abdominal o incluso la reparación de válvulas cardíacas son hoy típicos casos de patologías vasculares que pueden ser letales si no se los advierte a tiempo, y que hoy se resuelven por esta vía y que requieren apenas unas horas o, como mucho, un día de internación.

El profesional aconsejó consultar inmediatamente al médico cuando se siente dolor en el pecho o dificultad para respirar, acompañadas muchas veces de sudoración o náuseas. También cuando el dolor o la pesadez en las piernas impide caminar siquiera 50 o 100 metros.

Si bien todos deben estar atentos a este tipo de síntomas, quienes más riesgo tienen son las personas que fuman, las que tienen diabetes, colesterol LDL alto o hipertensión. El sobrepeso, el estrés y el sedentarismo son otros factores del estilo de vida que conviene cambiar ya que, aún con la mayor tecnología disponible y los avances médicos, no hay mejor cura para las enfermedades cardiovasculares que la prevención.

En el renovado servicio de Electrofisiología se atiende en consultorio a todos los pacientes con marcapasos y cardiodesfibriladores para su control, mientras que en el área de alta complejidad se realiza el implante de este tipo de dispositivos, y se realiza estimulación electrofisiológica y ablaciones de arritmias cardíacas por sistema de radiofrecuencia.

Por su parte el cardiólogo especialista en electrofisiología Fernando De Valais destacó: “Es muy importante que la gente de Trelew y de toda el área de influencia sepa que no es necesario trasladarse a Buenos Aires para recibir tratamientos de alta complejidad”.

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25 JUN 2015 - 21:47

Una intervención inédita en la zona tuvo lugar en abril con la realización de una triple cirugía cardíaca, conocida como “Bentall - De Bono”. A cargo del especialista Marcelo Nahín, la exitosa operación se desarrolló el 9 de abril en el Instituto de Cardiología Pueblo de Luis de Trelew a un hombre de 33 años.

Se trata de una de las intervenciones más complejas de realizar ya que los tiempos de circulación extracorpórea –es decir, los momentos en que la circulación del paciente debe ser mantenida por medios artificiales mientras su corazón está siendo reparado– son más prolongados que en las cardiocirugías convencionales.

Técnica quirúrgica

El paciente padecía una cardiopatía congénita conocida como aorta bisúspide. Con los años esa malformación de nacimiento le produjo un cuadro de insuficiencia aguda. Mientras su familia planificaba el urgente traslado a un centro de alta complejidad en Buenos Aires, la obra social decidió que existía a nivel local la capacidad de realizar la compleja operación requerida: el reemplazo de la válvula de entrada a la arteria aorta más la reparación del primer tramo de esta misma arteria, que sale del corazón y es la más importante del organismo.

El cirujano cardiovascular Marcelo Nahín explicó que la cirugía Bentall - De Bono “es en realidad una triple cirugía cardíaca”. Además el paciente tenía una dilatación importante de la raíz aórtica -la primera porción de la arteria-, lo que motivó la triple intervención: primero, en el reemplazo de la válvula, luego en el reemplazo del tramo ascendente de la arteria y, por último, el reemplazo del ostium coronario, donde la aorta se conecta con la arteria coronaria, que irriga al músculo cardíaco.

“Esta cirugía se realiza con un tubo valvulado, que es como una manguera en la que en uno de sus extremos tiene implantada desde fábrica una válvula aórtica”, indicó el profesional, que ya aplicó la técnica en el Hospital El Cruce, centro público de alta complejidad ubicado en la localidad bonaerense de Florencio Varela. “Una vez colocado el tubo hay que fabricar dos orificios con un quemador protésico especial, donde se reimplantan las dos arterias coronarias, ya que estas nacen en el sector que el paciente tenía afectado”.

La cirugía demandó cinco horas. El paciente evolucionó satisfactoriamente y regresó a su casa luego de siete días.

Además de Nahín participaron el cirujano José Orozco como primer ayudante, el anestesiólogo Julio Alvarado, la técnica perfusionista Natalia Carro y la instrumentadora Natalia Cardozo.

Complejidad

El procedimiento representa un desafío ya que el margen de error es mínimo: “Es una cirugía de muy alta complejidad que pudo realizar nuestro equipo a cargo del doctor Nahín”, remarcó Roberto Ingaramo, médico cardiólogo director del Instituto de Cardiología Pueblo de Luis.

“Luego de eso fue necesario un seguimiento, control y cuidados en la Unidad Coronaria para que se recuperase completamente y pudiera volver a su casa y esa tarea, que también es compleja, está a cargo de nuestro equipo médico especialmente capacitado”, dijo el profesional al referirse a los médicos encargados de Recuperación Cardiovascular Carolina Ingaramo y Martín Latorre.

Tecnología

Ingaramo destacó que “además de la idoneidad y la preparación del plantel profesional, el instituto cuenta con la más sofisticada estructura a nivel regional, que incluye quirófanos con mesas especiales para cirugía cardíaca y anestesia para este tipo de intervenciones, además de los de cirugía general. Pero también brinda un servicio de primer nivel en las áreas de Electrofisiología y Hemodinamia, para el diagnóstico y el tratamiento por vía endovascular, que este mismo mes incorporó nuevo equipamiento”.

“Es un equipo de rayos X con una sofisticación adicional, que permite trabajar en vasos que tienen entre 2 y 3 milímetros de diámetro, que es, por ejemplo, la medida de los stents que se colocan en las arterias coronarias”, explicó Javier Woscoboinik, cardiólogo intervencionista que está a cargo del servicio y es pionero en el uso de sistemas angiográficos en la región patagónica donde, desde hace 15 años ya se han realizado unos 10 mil procedimientos de este tipo.

“La mayor parte de los estudios que se realizan con estas tecnologías –que permiten “seguir” el trayecto del catéter a través de la arteria, ingresando generalmente por un mínimo orificio a nivel del abdomen– son angiografías de carótidas o de los miembros interiores, en los que las arterias pueden estar ocluidas y el paciente siente dolor y no puede caminar ni siquiera una cuadra”, explicó el especialista.

En este sentido, cada vez son más las patologías en las que un paciente ingresa en hemodinamia para ser estudiado y, en la misma intervención, se resuelve el problema. Incluso la colocación de un stent puede ser resuelta en el momento si el médico intervencionista lo decide conveniente.

“En otros casos –aseguró Woscoboinik– es mejor solicitar el material adecuado y realizar una nueva intervención en forma programada. Sólo se recurre a la cirugía cuando hay muchas arterias afectadas o por alguna otra razón se hace difícil hacer la intervención por vía endovascular, como cuando es necesaria una cirugía de bypass”.

Los aneurismas de aorta abdominal o incluso la reparación de válvulas cardíacas son hoy típicos casos de patologías vasculares que pueden ser letales si no se los advierte a tiempo, y que hoy se resuelven por esta vía y que requieren apenas unas horas o, como mucho, un día de internación.

El profesional aconsejó consultar inmediatamente al médico cuando se siente dolor en el pecho o dificultad para respirar, acompañadas muchas veces de sudoración o náuseas. También cuando el dolor o la pesadez en las piernas impide caminar siquiera 50 o 100 metros.

Si bien todos deben estar atentos a este tipo de síntomas, quienes más riesgo tienen son las personas que fuman, las que tienen diabetes, colesterol LDL alto o hipertensión. El sobrepeso, el estrés y el sedentarismo son otros factores del estilo de vida que conviene cambiar ya que, aún con la mayor tecnología disponible y los avances médicos, no hay mejor cura para las enfermedades cardiovasculares que la prevención.

En el renovado servicio de Electrofisiología se atiende en consultorio a todos los pacientes con marcapasos y cardiodesfibriladores para su control, mientras que en el área de alta complejidad se realiza el implante de este tipo de dispositivos, y se realiza estimulación electrofisiológica y ablaciones de arritmias cardíacas por sistema de radiofrecuencia.

Por su parte el cardiólogo especialista en electrofisiología Fernando De Valais destacó: “Es muy importante que la gente de Trelew y de toda el área de influencia sepa que no es necesario trasladarse a Buenos Aires para recibir tratamientos de alta complejidad”.


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