"El secretario general ha indicado que está pendiente de este asunto y ha pedido a ambos presidentes que asistan a la Asamblea General de la ONU en septiembre", afirmó el vicepresidente y canciller guyanés, Carl Greenidge.
El funcionario agregó que "ese foro podría ofrecer la oportunidad de una reunión" entre los mandatarios guyanés David Granger y venezolano Nicolás Maduro, y subrayó que "Guyana ha aceptado ese acercamiento".
Greenidge dijo también que Ban prevé enviar una misión a Caracas y Georgetown para facilitar el diálogo, y señaló que Granger está dispuesto a conversar con Maduro sobre varios asuntos de interés bilateral, además de la disputa territorial, aunque advirtió que no cambió su opinión sobre esto último.
Desde 1811, Venezuela reclama como propio el territorio del Esequibo o Guayana Esequiba, una superficie de 159.542 kilómetros cuadrados equivalente a 74,2 por ciento de los 214.970 kilómetros cuadrados en poder de Guayana y que nunca estuvo bajo soberanía venezolana.
La cuestión está desde 1982 bajo la órbita de la Secretaría General de la ONU, pero su gestión de "buenos oficios" está paralizada desde el año pasado por el fallecimiento de su último encargado, Norman Girman.
El conflicto se reavivó en marzo, cuando Venezuela protestó sin éxito por la autorización que Guyana dio a la petrolera estadounidense Exxon Mobil para explorar dentro de la zona disputada, y se agravó a fines de mayo, cuando Caracas creó por decreto cuatro "zonas de defensa integral marítima e insular", una de las cuales abarca el área "en reclamación".
Georgetown replicó que dicho decreto es "agresivo e ilegal" y advirtió que "cualquier intento" de aplicarlo "será vigorosamente resistido".
El mes pasado, Venezuela anunció que pediría a la ONU la reactivación del proceso de buenos oficios, pero Guyana respondió que no estaba interesado en ello y que "la única opción" para resolver el diferendo es la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
"El secretario general ha indicado que está pendiente de este asunto y ha pedido a ambos presidentes que asistan a la Asamblea General de la ONU en septiembre", afirmó el vicepresidente y canciller guyanés, Carl Greenidge.
El funcionario agregó que "ese foro podría ofrecer la oportunidad de una reunión" entre los mandatarios guyanés David Granger y venezolano Nicolás Maduro, y subrayó que "Guyana ha aceptado ese acercamiento".
Greenidge dijo también que Ban prevé enviar una misión a Caracas y Georgetown para facilitar el diálogo, y señaló que Granger está dispuesto a conversar con Maduro sobre varios asuntos de interés bilateral, además de la disputa territorial, aunque advirtió que no cambió su opinión sobre esto último.
Desde 1811, Venezuela reclama como propio el territorio del Esequibo o Guayana Esequiba, una superficie de 159.542 kilómetros cuadrados equivalente a 74,2 por ciento de los 214.970 kilómetros cuadrados en poder de Guayana y que nunca estuvo bajo soberanía venezolana.
La cuestión está desde 1982 bajo la órbita de la Secretaría General de la ONU, pero su gestión de "buenos oficios" está paralizada desde el año pasado por el fallecimiento de su último encargado, Norman Girman.
El conflicto se reavivó en marzo, cuando Venezuela protestó sin éxito por la autorización que Guyana dio a la petrolera estadounidense Exxon Mobil para explorar dentro de la zona disputada, y se agravó a fines de mayo, cuando Caracas creó por decreto cuatro "zonas de defensa integral marítima e insular", una de las cuales abarca el área "en reclamación".
Georgetown replicó que dicho decreto es "agresivo e ilegal" y advirtió que "cualquier intento" de aplicarlo "será vigorosamente resistido".
El mes pasado, Venezuela anunció que pediría a la ONU la reactivación del proceso de buenos oficios, pero Guyana respondió que no estaba interesado en ello y que "la única opción" para resolver el diferendo es la Corte Internacional de Justicia (CIJ).