Petrolera neuquina configura UTE para explotar siete áreas
La empresa provincial de Energía, Gas y Petróleo del Neuquén S.A. (GyP) formalizó con Oilstone S.A. un contrato de Unión Transitoria de Empresas (UTE) para la inversión en explotación de siete áreas maduras que la compañía recibió, en diciembre pasado, en la operación de intercambio con YPF por el 10% de las áreas Amarga Chica y Bajada de Añelo.
Las áreas involucradas: Loma Negra, Puesto Cortadera, Collón Curá I, Neuquén del Medio, Bajo Baguales, Cutral-Co Sur y Portezuelo Minas, fueron concesionadas a GyP mediante el decreto 1826/15.
"Esta modalidad de operación le permite a la compañía seguir creciendo en producción sin tomar riesgos de inversión a su cargo ni comprometer las ganancias que pertenecen al único accionista, que es el Estado neuquino, y se traducirán en dividendo para acompañar el desarrollo provincial”, señaló el presidente de GyP, Alberto Saggese.
Actualmente, el conjunto de estas áreas produce 435.000 metros cúbicos diarios (m3/d) de gas y 30 m3/d de crudo, por lo que con el fin de mantener y aún incrementar este nivel de producción, GyP determinó que se requieren inversiones de capital del orden de 15.000.000 de dólares para realizar cuatro perforaciones y 17 reparaciones, que la compañía no está en condiciones económicas de afrontar.
Según un comunicado oficial, en el acuerdo se estableció que las inversiones serán desembolsadas por Oilstone, que como contrapartida y de manera progresiva irá recibiendo un porcentaje de participación en las áreas hasta llegar a un máximo de 40 por ciento.
La elección de Oilstone, una empresa de capital 100% nacional especializada en la operación de campos maduros, fue decidida por GyP después de analizar diversas alternativas de empresas de similar tamaño, capacitadas para realizar los trabajos e inversiones requeridas.
Entre las ventajas comparativas ofrecidas por Oilstone se incluye su condición de Operadora del área vecina, Cerro Bandera, de YPF, donde desde mayo de 2011 desarrolla trabajos similares, lo cual concurrirá a reducir los costos de explotación en las siete áreas involucradas en el acuerdo.
Cuando Oilstone asumió la operación, Cerro Bandera producía 120 m3/d de crudo y 104 Mm3/d de gas, y la gestión de esta compañía posibilitó incrementar esos volúmenes a 250 m3/d de crudo y 150 Mm3/d de gas, tras una inversión de US$ 30 millones.
GyP es una sociedad anónima de capital del Estado neuquino que fue constituida para poner en valor los bloques ociosos localizados en la provincia, y revertir la curva descendente de la producción hidrocarburífera. En ese proceso en los últimos años GyP realizó cuatro rondas licitatorias mediante las cuales llegó a conformar 55 UTES, la mayoría de ellas para realizar operaciones exploratorias.
Las áreas involucradas: Loma Negra, Puesto Cortadera, Collón Curá I, Neuquén del Medio, Bajo Baguales, Cutral-Co Sur y Portezuelo Minas, fueron concesionadas a GyP mediante el decreto 1826/15.
"Esta modalidad de operación le permite a la compañía seguir creciendo en producción sin tomar riesgos de inversión a su cargo ni comprometer las ganancias que pertenecen al único accionista, que es el Estado neuquino, y se traducirán en dividendo para acompañar el desarrollo provincial”, señaló el presidente de GyP, Alberto Saggese.
Actualmente, el conjunto de estas áreas produce 435.000 metros cúbicos diarios (m3/d) de gas y 30 m3/d de crudo, por lo que con el fin de mantener y aún incrementar este nivel de producción, GyP determinó que se requieren inversiones de capital del orden de 15.000.000 de dólares para realizar cuatro perforaciones y 17 reparaciones, que la compañía no está en condiciones económicas de afrontar.
Según un comunicado oficial, en el acuerdo se estableció que las inversiones serán desembolsadas por Oilstone, que como contrapartida y de manera progresiva irá recibiendo un porcentaje de participación en las áreas hasta llegar a un máximo de 40 por ciento.
La elección de Oilstone, una empresa de capital 100% nacional especializada en la operación de campos maduros, fue decidida por GyP después de analizar diversas alternativas de empresas de similar tamaño, capacitadas para realizar los trabajos e inversiones requeridas.
Entre las ventajas comparativas ofrecidas por Oilstone se incluye su condición de Operadora del área vecina, Cerro Bandera, de YPF, donde desde mayo de 2011 desarrolla trabajos similares, lo cual concurrirá a reducir los costos de explotación en las siete áreas involucradas en el acuerdo.
Cuando Oilstone asumió la operación, Cerro Bandera producía 120 m3/d de crudo y 104 Mm3/d de gas, y la gestión de esta compañía posibilitó incrementar esos volúmenes a 250 m3/d de crudo y 150 Mm3/d de gas, tras una inversión de US$ 30 millones.
GyP es una sociedad anónima de capital del Estado neuquino que fue constituida para poner en valor los bloques ociosos localizados en la provincia, y revertir la curva descendente de la producción hidrocarburífera. En ese proceso en los últimos años GyP realizó cuatro rondas licitatorias mediante las cuales llegó a conformar 55 UTES, la mayoría de ellas para realizar operaciones exploratorias.