"Los independentistas solo han recibido el apoyo de cuatro de cada diez catalanes. No tienen el apoyo de la mayoría de la sociedad catalana", remarcó el Jefe del Ejecutivo español en una conferencia de prensa desde el Palacio de La Moncloa, en Madrid.
"Ayer se constató que Cataluña es muy plural", añadió Rajoy al valorar los comicios parlamentarios celebrados ayer en la norte región, en los que venció la lista unitaria Junts pel Sí (Juntos por el Sí), que impulsa la secesión.
El bloque soberanista que conforma esta lista unitaria más los independentistas anticapitalistas de las CUP obtuvieron 72 diputados y superaron juntos la mayoría absoluta de los escaños -68- del Parlamento catalán, pero no alcanzaron el 50% de los votos, umbral que validaría un referéndum.
Las elecciones fueron planteadas como un plebiscito sobre la secesión y los vencedores aseguran que igualmente con estos resultados tienen legitimidad para avanzar en su "hoja de ruta" para romper con España.
Sin embargo, Rajoy insistió en que no es así y que más de la mitad de los electores no respaldaron a los independentistas.
Ante este escenario, en el que los secesionista insisten en que seguirán con su plan, Rajoy llamó "al gobierno (catalán) a gobernar
para todos los catalanes, a superar la fractura y a sustituir el monólogo y la imposición por el diálogo constructivo".
En ese sentido, el presidente del gobierno volvió a ofrecer "diálogo y lealtad dentro de la ley". Y en línea con su posición de los últimos años remarcó que el límite es "la unidad de España y la soberanía nacional".
Según el dirigente conservador, el Ejecutivo catalán tiene que "volver a la senda de la convivencia normalizada".
Ante la incertidumbre que se avecina, Rajoy afirmó que "ningún español, viva donde viva puede quedar fuera de la atención del Gobierno de España".
Durante su intervención, el Jefe del Ejecutivo insistió en que seguirá "velando para que se cumpla el Estado de derecho" ante el riesgo de la secesión.
"Es insano y antidemocrático pretender liquidar la ley", dijo.
"Si el planteamiento es saltarse la ley, el gobierno, entre otras obligaciones, tiene la de hacer cumplirla", subrayó Rajoy, quien dijo haber hablado con la "oposición" (socialista) y que "coinciden en lo sustancial".
"Los independentistas solo han recibido el apoyo de cuatro de cada diez catalanes. No tienen el apoyo de la mayoría de la sociedad catalana", remarcó el Jefe del Ejecutivo español en una conferencia de prensa desde el Palacio de La Moncloa, en Madrid.
"Ayer se constató que Cataluña es muy plural", añadió Rajoy al valorar los comicios parlamentarios celebrados ayer en la norte región, en los que venció la lista unitaria Junts pel Sí (Juntos por el Sí), que impulsa la secesión.
El bloque soberanista que conforma esta lista unitaria más los independentistas anticapitalistas de las CUP obtuvieron 72 diputados y superaron juntos la mayoría absoluta de los escaños -68- del Parlamento catalán, pero no alcanzaron el 50% de los votos, umbral que validaría un referéndum.
Las elecciones fueron planteadas como un plebiscito sobre la secesión y los vencedores aseguran que igualmente con estos resultados tienen legitimidad para avanzar en su "hoja de ruta" para romper con España.
Sin embargo, Rajoy insistió en que no es así y que más de la mitad de los electores no respaldaron a los independentistas.
Ante este escenario, en el que los secesionista insisten en que seguirán con su plan, Rajoy llamó "al gobierno (catalán) a gobernar
para todos los catalanes, a superar la fractura y a sustituir el monólogo y la imposición por el diálogo constructivo".
En ese sentido, el presidente del gobierno volvió a ofrecer "diálogo y lealtad dentro de la ley". Y en línea con su posición de los últimos años remarcó que el límite es "la unidad de España y la soberanía nacional".
Según el dirigente conservador, el Ejecutivo catalán tiene que "volver a la senda de la convivencia normalizada".
Ante la incertidumbre que se avecina, Rajoy afirmó que "ningún español, viva donde viva puede quedar fuera de la atención del Gobierno de España".
Durante su intervención, el Jefe del Ejecutivo insistió en que seguirá "velando para que se cumpla el Estado de derecho" ante el riesgo de la secesión.
"Es insano y antidemocrático pretender liquidar la ley", dijo.
"Si el planteamiento es saltarse la ley, el gobierno, entre otras obligaciones, tiene la de hacer cumplirla", subrayó Rajoy, quien dijo haber hablado con la "oposición" (socialista) y que "coinciden en lo sustancial".