La retención de servicios de los empleados municipales de Esquel seguía luego de que el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales de Esquel entregara la contrapropuesta al Ejecutivo. Ambas partes siguen firmes en sus posturas. Los municipales nuevamente marcharon por la ciudad y en asamblea decidieron continuar con la medida pese al pedido del intendente Sergio Ongarato de negociar sin la retención.
El secretario adjunto del SOEME, Jorge Antipan, confirmó que los afiliados por unanimidad votaron a favor de la contrapropuesta: 1.150 pesos en vez de los 800 que ofreció el municipio. “No es mucho más pero ese monto queremos que sea remunerativo y bonificable”, dijo Antipan. Recordó que la oferta de Ongarato era en “negro” y agregó que “es factible esa suma poniendo cada uno su parte, ese dinero está”, dijo el gremialista.
Los 1.150 pesos incluyen planta permanente y transitoria. Los contratados recibirán un aumento escalonado de entre 1.700 a 500 pesos de acuerdo al contrato de cada uno y aclaró que cuanto más caro el contrato, menor el aumento. “La solidaridad es lo primordial y la necesidad es lograr que los que menos cobran más aumento perciban”, indicó.
Manifestó que por ley el municipio podría descontar los días no laborados. “Sería injusto que por reclamar por un incremento salarial nos descuenten los días no trabajados”, dijo. No se levantará la medida de fuerza hasta que no haya una negociación acordada.
La Cámara de Comercio se reunió con el secretario de Gobierno de Esquel, Omar Mohanna. El titular de la entidad, Jorge Castillo, le advirtió la necesidad de un acuerdo en el conflicto municipal, porque luego de varios días ya impacta en la comunidad. La Cámara les transmitió la situación complicada del sector comercial, y según prestadores, no llega el turismo esperado. Castillo sostuvo que la situación es similar en otros puntos de la provincia, y adelantó que la Federación Empresaria Chubutense pedirá a los diputados del Frente para la Victoria que den quórum en la Legislatura y se trate la ley de emergencia económica. “Si no, los proveedores del Estado no pueden cobrar y se complica la economía de todos más aún. Dimos crédito al Gobierno en los incendios el año pasado, y nunca nos pagó”.
Sobre el conflicto municipal, el dirigente señaló que si bien es una cuestión entre el SOEME y el Ejecutivo, al sector comercial y empresarial le interesa que haya una solución porque son más de 1.100 empleados y pago de impuestos y tasas. “La situación económica no está bien para nadie y los sueldos son bajos. Pero se debe buscar una salida porque con paros no se logra nada. Tenemos que ajustarnos todos; los empleadores hacemos el esfuerzo para mantener el personal, que se vayan de vacaciones, pero de continuar esto así, hasta podrían comenzar los despidos. Por ahora no están en riesgo los puestos y si ponemos todos el esfuerzo aguantaremos”, afirmó Castillo. En su corralón de materiales tiene 25 empleados.
La Cámara planteó que todos tienen que pagar los impuestos e Ingresos Brutos. “Si todos pagamos la carga no será tan pesada. Hay muchos que no pagan, y los que vienen de afuera a vender no tributan lo mismo que nosotros y se crea una competencia desleal”.
La retención de servicios de los empleados municipales de Esquel seguía luego de que el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales de Esquel entregara la contrapropuesta al Ejecutivo. Ambas partes siguen firmes en sus posturas. Los municipales nuevamente marcharon por la ciudad y en asamblea decidieron continuar con la medida pese al pedido del intendente Sergio Ongarato de negociar sin la retención.
El secretario adjunto del SOEME, Jorge Antipan, confirmó que los afiliados por unanimidad votaron a favor de la contrapropuesta: 1.150 pesos en vez de los 800 que ofreció el municipio. “No es mucho más pero ese monto queremos que sea remunerativo y bonificable”, dijo Antipan. Recordó que la oferta de Ongarato era en “negro” y agregó que “es factible esa suma poniendo cada uno su parte, ese dinero está”, dijo el gremialista.
Los 1.150 pesos incluyen planta permanente y transitoria. Los contratados recibirán un aumento escalonado de entre 1.700 a 500 pesos de acuerdo al contrato de cada uno y aclaró que cuanto más caro el contrato, menor el aumento. “La solidaridad es lo primordial y la necesidad es lograr que los que menos cobran más aumento perciban”, indicó.
Manifestó que por ley el municipio podría descontar los días no laborados. “Sería injusto que por reclamar por un incremento salarial nos descuenten los días no trabajados”, dijo. No se levantará la medida de fuerza hasta que no haya una negociación acordada.
La Cámara de Comercio se reunió con el secretario de Gobierno de Esquel, Omar Mohanna. El titular de la entidad, Jorge Castillo, le advirtió la necesidad de un acuerdo en el conflicto municipal, porque luego de varios días ya impacta en la comunidad. La Cámara les transmitió la situación complicada del sector comercial, y según prestadores, no llega el turismo esperado. Castillo sostuvo que la situación es similar en otros puntos de la provincia, y adelantó que la Federación Empresaria Chubutense pedirá a los diputados del Frente para la Victoria que den quórum en la Legislatura y se trate la ley de emergencia económica. “Si no, los proveedores del Estado no pueden cobrar y se complica la economía de todos más aún. Dimos crédito al Gobierno en los incendios el año pasado, y nunca nos pagó”.
Sobre el conflicto municipal, el dirigente señaló que si bien es una cuestión entre el SOEME y el Ejecutivo, al sector comercial y empresarial le interesa que haya una solución porque son más de 1.100 empleados y pago de impuestos y tasas. “La situación económica no está bien para nadie y los sueldos son bajos. Pero se debe buscar una salida porque con paros no se logra nada. Tenemos que ajustarnos todos; los empleadores hacemos el esfuerzo para mantener el personal, que se vayan de vacaciones, pero de continuar esto así, hasta podrían comenzar los despidos. Por ahora no están en riesgo los puestos y si ponemos todos el esfuerzo aguantaremos”, afirmó Castillo. En su corralón de materiales tiene 25 empleados.
La Cámara planteó que todos tienen que pagar los impuestos e Ingresos Brutos. “Si todos pagamos la carga no será tan pesada. Hay muchos que no pagan, y los que vienen de afuera a vender no tributan lo mismo que nosotros y se crea una competencia desleal”.