Pirata del Atlántico: llegaron los tripulantes chinos del buque hundido

Las autoridades abrieron dos causas: por atentado y resistencia a la autoridad y por infracción a la Ley de Pesca. El más comprometido es el capitán del barco infractor.

El capitán del pesquero chino ayer era llevado a declarar ante el juez Hugo Sastre tras su llegada a Madryn.
16 MAR 2016 - 21:33 | Actualizado

A las 9.15 de ayer el Guardacostas GC 28 Pedro Derbes amarró en el sitio norte del muelle Comandante Luis Piedra Buena de Puerto Madryn, trayendo a bordo a cuatro de los tripulantes del buque potero chino Lu Yan Yuan, hundido mientras pescaba ilegalmente en la Zona Económica Exclusiva Argentina.

Dos horas más tarde, el capitán del potero bajó esposado y fue trasladado al hospital Isola para revisar su estado de salud. A su regreso, traductor mediante, declaró ante el juez federal de Rawson, Hugo Sastre.

El prefecto mayor Rodolfo González, jefe de la delegación Madryn, indicó que se iniciaron dos causas. “La primera por atentado y resistencia a la autoridad, que corresponde al juez federal. Además se inició un sumario administrativo por infracción a la Ley de Pesca”. Por lo pronto, el capitán quedó detenido y le puede caber una pena de hasta 8 años de prisión.

“Fue llevado al hospital para hacer un mejor control y luego se lo alojó en Prefectura”, dijo González. “De comprobarse y habida cuenta la documentación que contamos indican que el capitán sería el responsable absoluto de haber generado las maniobras evasivas y de estar pescando en la zona prohibida”.

Los cuatro tripulantes del potero chino quedarán alojados en la zona que la justicia federal disponga mientras siguen las actuaciones administrativas para cada uno. “Desde el primer momento intervino la Embajada China, el Consulado y Cancillería”.

Los cuatro detenidos están en buen estado de salud tras ser rescatados del mar. “Fueron asistidos con ropa seca para que puedan estar en buenas condiciones”, dijo el prefecto mayor. “Se dieron al agua con chalecos salvavidas y ropa antiexposición dirigiéndose a nado al otro buque que oficiaba de escolta del potero infractor. Acorde a los registros del Guardacostas y consultado el capitán, toda la tripulación estaba en buenas condiciones”.

Este segundo potero no fue registrado como infractor porque el Guardacostas Derbes hacía su tarea respecto al barco dado como infractor en aguas argentinas. El jefe de Prefectura detalló que “el procedimiento se inició dentro de la Zona Exclusiva con el buque pesquero en clara infracción; estaba a 5 kilómetros dentro de la zona. Se inició el protocolo preventivo y disuasivo con comunicaciones radioeléctricas y sonoras. Al no encontrar respuestas favorables se inicia la persecución, que duró varias horas”. Durante la persecución “se observa la intención del buque pesquero en evasión y en clara situación agresiva hacia la autoridad marítima. Ahí se inician los disparos disuasivos en proa y popa”.

A media mañana llegaron al muelle Piedra Buena las autoridades de la Oficina de Migraciones con –hasta ese momento- su responsable Gastón Morales. El delegado explicó que “la tripulación será reconducida a su país de origen” pero no el capitán “debido a las infracciones por las que le podrían caber hasta ocho años de prisión”.

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El capitán del pesquero chino ayer era llevado a declarar ante el juez Hugo Sastre tras su llegada a Madryn.
16 MAR 2016 - 21:33

A las 9.15 de ayer el Guardacostas GC 28 Pedro Derbes amarró en el sitio norte del muelle Comandante Luis Piedra Buena de Puerto Madryn, trayendo a bordo a cuatro de los tripulantes del buque potero chino Lu Yan Yuan, hundido mientras pescaba ilegalmente en la Zona Económica Exclusiva Argentina.

Dos horas más tarde, el capitán del potero bajó esposado y fue trasladado al hospital Isola para revisar su estado de salud. A su regreso, traductor mediante, declaró ante el juez federal de Rawson, Hugo Sastre.

El prefecto mayor Rodolfo González, jefe de la delegación Madryn, indicó que se iniciaron dos causas. “La primera por atentado y resistencia a la autoridad, que corresponde al juez federal. Además se inició un sumario administrativo por infracción a la Ley de Pesca”. Por lo pronto, el capitán quedó detenido y le puede caber una pena de hasta 8 años de prisión.

“Fue llevado al hospital para hacer un mejor control y luego se lo alojó en Prefectura”, dijo González. “De comprobarse y habida cuenta la documentación que contamos indican que el capitán sería el responsable absoluto de haber generado las maniobras evasivas y de estar pescando en la zona prohibida”.

Los cuatro tripulantes del potero chino quedarán alojados en la zona que la justicia federal disponga mientras siguen las actuaciones administrativas para cada uno. “Desde el primer momento intervino la Embajada China, el Consulado y Cancillería”.

Los cuatro detenidos están en buen estado de salud tras ser rescatados del mar. “Fueron asistidos con ropa seca para que puedan estar en buenas condiciones”, dijo el prefecto mayor. “Se dieron al agua con chalecos salvavidas y ropa antiexposición dirigiéndose a nado al otro buque que oficiaba de escolta del potero infractor. Acorde a los registros del Guardacostas y consultado el capitán, toda la tripulación estaba en buenas condiciones”.

Este segundo potero no fue registrado como infractor porque el Guardacostas Derbes hacía su tarea respecto al barco dado como infractor en aguas argentinas. El jefe de Prefectura detalló que “el procedimiento se inició dentro de la Zona Exclusiva con el buque pesquero en clara infracción; estaba a 5 kilómetros dentro de la zona. Se inició el protocolo preventivo y disuasivo con comunicaciones radioeléctricas y sonoras. Al no encontrar respuestas favorables se inicia la persecución, que duró varias horas”. Durante la persecución “se observa la intención del buque pesquero en evasión y en clara situación agresiva hacia la autoridad marítima. Ahí se inician los disparos disuasivos en proa y popa”.

A media mañana llegaron al muelle Piedra Buena las autoridades de la Oficina de Migraciones con –hasta ese momento- su responsable Gastón Morales. El delegado explicó que “la tripulación será reconducida a su país de origen” pero no el capitán “debido a las infracciones por las que le podrían caber hasta ocho años de prisión”.


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