Indignación en Madryn: delincuentes desvalijaron la Escuela provincial 7707

Una vez más una institución escolar de Puerto Madryn fue víctima de un robo en el cual la comunidad educativa perdió todos los elementos que habían adquirido fruto del esfuerzo y de la colaboración.

23 ABR 2016 - 20:13 | Actualizado

En este caso las instalaciones de la Escuela provincial 7707, ubicadas en el barrio Pujol, fueron desvalijadas por desconocidos que, valiéndose de las malas condiciones edilicias, pudieron ingresar y llevarse todos los elementos que allí estaban. No solo padecieron el robo sino que revolvieron todos los armarios e instalaciones en pos de encontrar elementos que pudieran vender en el mercado negro.

Fernanda Jindra, directora de la escuela, planteó su bronca, malestar e indignación por lo sucedido entre la noche del viernes y la madrugada del sábado.

En su catarsis solicitó a las autoridades del ministerio de Educación que tomen medidas urgentes para mejorar las condiciones del edificio y el cerco perimetral.

“Estamos a la buena de Dios”, fue la frase lanzada por la docente y que refleja a la perfección el estado de abandono que el edificio tiene. Justamente, la falta del mantenimiento fue usufructuada por los delincuentes que ingresaron por los techos donde hay chapas deterioradas y que iban a cambiarse el año pasado.

Esto nunca sucedió y solo se montó un obrador que nunca tuvo continuidad. Por las chapas rotas los cacos ingresaron al edificio donde comenzaron a reventar los armarios, las puertas, además de robarse una PC´s, los parlantes, además de las netbook que estaban en la sala pertenecientes al programa Conectar Igualdad.

Lo sucedido solo se describe en la desazón y amargura de todo el personal docente y no docente por todo lo sucedido y por la falta de respuesta que las autoridades han tenido para poder solucionar los temas que el edificio plantea.

La directora reconoció que “la escuela tiene un alto porcentaje de vulnerabilidad que nos impide trabajar en perfectas condiciones”, además de plantear que “no hay cerco perimetral que es una de las formas que existen para frenar los ingresos, robos y roturas continuas que sufrimos”.

Jindra aseguró que en la actualidad “tenemos una escuela abandonada desde lo edilicio” donde “estamos a la buena de Dios. Esperamos que esto pueda corregirse para lograr solucionar estos inconvenientes” fue la súplica de la directora tras padecer un nuevo robo en la escuela.

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23 ABR 2016 - 20:13

En este caso las instalaciones de la Escuela provincial 7707, ubicadas en el barrio Pujol, fueron desvalijadas por desconocidos que, valiéndose de las malas condiciones edilicias, pudieron ingresar y llevarse todos los elementos que allí estaban. No solo padecieron el robo sino que revolvieron todos los armarios e instalaciones en pos de encontrar elementos que pudieran vender en el mercado negro.

Fernanda Jindra, directora de la escuela, planteó su bronca, malestar e indignación por lo sucedido entre la noche del viernes y la madrugada del sábado.

En su catarsis solicitó a las autoridades del ministerio de Educación que tomen medidas urgentes para mejorar las condiciones del edificio y el cerco perimetral.

“Estamos a la buena de Dios”, fue la frase lanzada por la docente y que refleja a la perfección el estado de abandono que el edificio tiene. Justamente, la falta del mantenimiento fue usufructuada por los delincuentes que ingresaron por los techos donde hay chapas deterioradas y que iban a cambiarse el año pasado.

Esto nunca sucedió y solo se montó un obrador que nunca tuvo continuidad. Por las chapas rotas los cacos ingresaron al edificio donde comenzaron a reventar los armarios, las puertas, además de robarse una PC´s, los parlantes, además de las netbook que estaban en la sala pertenecientes al programa Conectar Igualdad.

Lo sucedido solo se describe en la desazón y amargura de todo el personal docente y no docente por todo lo sucedido y por la falta de respuesta que las autoridades han tenido para poder solucionar los temas que el edificio plantea.

La directora reconoció que “la escuela tiene un alto porcentaje de vulnerabilidad que nos impide trabajar en perfectas condiciones”, además de plantear que “no hay cerco perimetral que es una de las formas que existen para frenar los ingresos, robos y roturas continuas que sufrimos”.

Jindra aseguró que en la actualidad “tenemos una escuela abandonada desde lo edilicio” donde “estamos a la buena de Dios. Esperamos que esto pueda corregirse para lograr solucionar estos inconvenientes” fue la súplica de la directora tras padecer un nuevo robo en la escuela.


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