En su informe de noviembre, el Ministerio de Economía alemán apunta que la mayor economía europea seguirá por "la senda del crecimiento" en lo que resta de 2016, pero avanza que "en la segunda mitad del año el crecimiento podría ser algo más moderado que en la primera mitad", "menos dinámico".
La economía en el tercer trimestre podría "haber crecido ligeramente", dice el documento, que subraya además que "desde la perspectiva de hoy no se pueden esperar significativos deterioros de la economía" alemana, según EFE.
La Oficina Federal de Estadística (Destatis) anunciará el próximo martes la tasa de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) alemán, tras los avances de 0,7 y 0,4% registrados en el primer y segundo trimestre, respectivamente.
El Ministerio de Economía alemán cuenta además con que la economía vuelva a cobrar ímpetu en unos meses, ya en el próximo ejercicio, ya que a las "importantes fuerzas de la economía interna" se sumará una mejora del comercio exterior.
"El entorno económico internacional prosigue siendo difícil, aunque parece que está mejorando en términos generales, lo que está mejorando las perspectivas exportadoras", indica el texto.
El PIB de la mayor economía europea crecerá este año 1,8%, según la última estimación de Berlín, una décima más de lo previsto en su anterior pronóstico, por el efecto combinado de los esfuerzos para superar la crisis de los refugiados, el bajo precio del crudo y el tipo de cambio.
En su informe de noviembre, el Ministerio de Economía alemán apunta que la mayor economía europea seguirá por "la senda del crecimiento" en lo que resta de 2016, pero avanza que "en la segunda mitad del año el crecimiento podría ser algo más moderado que en la primera mitad", "menos dinámico".
La economía en el tercer trimestre podría "haber crecido ligeramente", dice el documento, que subraya además que "desde la perspectiva de hoy no se pueden esperar significativos deterioros de la economía" alemana, según EFE.
La Oficina Federal de Estadística (Destatis) anunciará el próximo martes la tasa de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) alemán, tras los avances de 0,7 y 0,4% registrados en el primer y segundo trimestre, respectivamente.
El Ministerio de Economía alemán cuenta además con que la economía vuelva a cobrar ímpetu en unos meses, ya en el próximo ejercicio, ya que a las "importantes fuerzas de la economía interna" se sumará una mejora del comercio exterior.
"El entorno económico internacional prosigue siendo difícil, aunque parece que está mejorando en términos generales, lo que está mejorando las perspectivas exportadoras", indica el texto.
El PIB de la mayor economía europea crecerá este año 1,8%, según la última estimación de Berlín, una décima más de lo previsto en su anterior pronóstico, por el efecto combinado de los esfuerzos para superar la crisis de los refugiados, el bajo precio del crudo y el tipo de cambio.