Micheli y Polino convocan a rechazar la suba en combustibles
Los titulares de la Central de los Trabajadores de la Argentina Autónoma (Ctaa), Pablo Micheli, y de Consumidores Libres, Héctor Polino, rechazaron hoy el último aumento de los combustibles; aseguraron que la decisión representó "un nuevo y duro golpe al bolsillo de los argentinos" y convocaron a conformar una multisectorial que procure "frenar el incremento".
Un comunicado conjunto de las organizaciones indicó que el aumento del ocho por ciento del precio de las naftas y el gasoil fue "significativo" y se produjo luego de "un acuerdo entre el gobierno y las petroleras", al que "se sumarán sucesivos incrementos en 2017, según el Ministerio de Energía de la Nación".
"La quinta suba de los combustibles líquidos desde diciembre de 2015 representó un acumulado del 38 por ciento, que generó gran preocupación en las familias, trabajadores, consumidores, cuentapropistas y pequeñas y medianas empresas (Pymes)", afirmaron Micheli y Polino, quienes rechazaron el aumento de precios.
También subrayaron que teniendo en cuenta la estructura energética y de transporte, los aumentos provocarán "un alza de los precios de los productos y servicios en general, lo que generará mayor inflación, mientras el gobierno sostiene de forma contradictoria que este año será del 17 por ciento, por lo que sobre esa base procura imponer un techo del 20 por ciento a las paritarias".
"El aumento también fue injustificado porque el precio del petróleo está bajando a nivel global, pero la Argentina lo sube y hace pagar a usuarios y consumidores un valor muy por encima de la media internacional. Se trató de un nuevo y duro golpe", dijeron.
Micheli y Polino convocaron a "la unidad de todos los sectores" en rechazo de "la medida, que solo beneficia a las petroleras".
También llamaron a entidades de defensa del consumidor, a los variados espacios sindicales, políticos, sociales y económicos para conformar una multisectorial que "frene los aumentos".
Un comunicado conjunto de las organizaciones indicó que el aumento del ocho por ciento del precio de las naftas y el gasoil fue "significativo" y se produjo luego de "un acuerdo entre el gobierno y las petroleras", al que "se sumarán sucesivos incrementos en 2017, según el Ministerio de Energía de la Nación".
"La quinta suba de los combustibles líquidos desde diciembre de 2015 representó un acumulado del 38 por ciento, que generó gran preocupación en las familias, trabajadores, consumidores, cuentapropistas y pequeñas y medianas empresas (Pymes)", afirmaron Micheli y Polino, quienes rechazaron el aumento de precios.
También subrayaron que teniendo en cuenta la estructura energética y de transporte, los aumentos provocarán "un alza de los precios de los productos y servicios en general, lo que generará mayor inflación, mientras el gobierno sostiene de forma contradictoria que este año será del 17 por ciento, por lo que sobre esa base procura imponer un techo del 20 por ciento a las paritarias".
"El aumento también fue injustificado porque el precio del petróleo está bajando a nivel global, pero la Argentina lo sube y hace pagar a usuarios y consumidores un valor muy por encima de la media internacional. Se trató de un nuevo y duro golpe", dijeron.
Micheli y Polino convocaron a "la unidad de todos los sectores" en rechazo de "la medida, que solo beneficia a las petroleras".
También llamaron a entidades de defensa del consumidor, a los variados espacios sindicales, políticos, sociales y económicos para conformar una multisectorial que "frene los aumentos".