Costa usurpada: ya hay cerca de 150 ocupaciones ilegales en la zona de Playa Galesa

Es en la zona de Magagna, en Rawson. El problema se inició en 2014, con unas 20 familias. Se hizo la denuncia pero la Justicia no resolvió a tiempo. Hay orden de demoler pero no se ejecuta por burocracia.

Las usurpaciones se iniciaron hace tres años
20 MAR 2017 - 22:12 | Actualizado

La justicia penal, civil y de Faltas mantiene sin resolución las causas iniciadas hace dos años por una usurpación de tierras privadas en la zona de Playa Galesa, mientras las construcciones se multiplican ocupando ya zonas cercanas al puerto de Rawson. Los lotes son propiedad de los herederos de Marcial Galina, y a fines de 2014, cuando se inició la usurpación entre la ruta a Playa Magagna y la costa, se radicó una denuncia.

En ese entonces no había más que una veintena de personas delimitando parcelas. Pero a más de dos años del episodio inicial ya serían más de 150 los usurpadores que construyen. Avanzaron hacia la ribera del río Chubut, en una zona de potencial industrial pesquero.

El abogado Gonzalo Torrejón, que representa a los denunciantes en las causas ante la Justicia, dijo: “No tuvimos ningún tipo de resolución eficaz, lo que seguimos tramitando como fue desde marzo de 2015 es un pedido de demolición de las obras clandestinas e ilegales”.

El pedido “tuvo un periplo frustrante desde marzo de 2015, porque una vez que se pidió que vayan máquinas a demoler, el juez que lo había ordenado lo rechaza por decir que era adelantar sentencia; no era así porque no restituían el inmueble, era demoler lo que se había construido sin autorización del propietario y contra una orden judicial que decía que había que demoler las obras”. Esto en alusión a la medida del juez Carlos Tesi.

“Iniciamos esto cuando no había obras, era ocupación de tierra y no había un ladrillo y la gente siempre supo que era ilegal”, dice el abogado que representa a los sucesores de Marcial Galina. A partir del rechazo del juez Tesi, “fuimos a la Cámara, tardó 8 meses hasta que finalmente se resuelve en 2016, se autoriza la demolición, pero debiendo el juez de primera instancia  articular las medidas que crea correspondientes para llevar a cabo esta resolución”.

Según Torrejón, el magistrado viene “pidiendo requisitos desde octubre del año pasado, aún no podemos verificarlo por cuestiones burocráticas, son requisitos difíciles de cumplir pero tenemos la firme convicción, la dirección y las instrucciones de nuestro clientes de demoler”.

La Cámara para agilizar el expediente “hizo un reordenamiento y ordena que se tramite la demolición por un expediente separado”. Además de ese expediente se tramita otro penal. “Está en la acusación, con correcciones, excesivamente lento; pedimos medidas cautelares de restitución y fueron denegadas, pese a que había antecedentes de Comodoro Rivadavia que se habían otorgado”. También hay actuaciones administrativas en el Juzgado de Faltas. Ese trámite está paralizado desde marzo de 2016 “por orden no sé de quién, pero no se continuó más”.

“Las usurpaciones avanzaron. En febrero de 2015 habrán sido 20 o 25 usurpadores, unos 15 se quedaron, pero ahora superaron toda la longitud de playa La Galesa, abarca gran parte del puerto, y serán más de 150”, dijo Torrejón. “Hay resistencia física, uno va con máquina y ellos protegen lo que no es suyo; no fue posible hacerlo de una manera aún siendo legal”.

“Desde lo jurídico estamos en el mismo lugar, porque ejercemos un derecho que nace de la propiedad; si no vamos a tener resultado, si lo que resuena más fuerte es el eco de la sociedad que dice eso ya no se puede resolver, la normativa es una hoja escrita por los hechos por sobre el Derecho, quien usurpa escribe el Derecho”

“Será lamentablemente tener más horas de máquina y sacrificar más patrimonio de los usurpadores, a quienes les comunicamos que no sigan construyendo y gastando plata en algo sobre lo que hay una orden de demolición”, aseguró el abogado.

Aclaró que el pedido de demolición no es un gesto de insensibilidad. “Mis clientes vendieron a precio vil, regalado, los que son hoy los 3 mil lotes para todos y todas, dando auxilio y subsidiando un loteo social”.

“Esto es perjudicial para un privado, para el Estado y para la ciudadanía”, dijo Torrejón. “Después de la apertura del puente entre Playa Unión y Magagna, el potencial de esa zona es muy grande, el desarrollo va a ir allí y la usurpación ocupa toda una costa muy similar a Playa Unión pero del otro lado del río en la zona llamada Playa Galesa o Barrancas Blancas, puntapié del desarrollo y planificación estratégica urbana de ese sector, lo cual valoriza al lugar”.

En ese lugar “el Estado no está planificando, es una usurpación espontánea y grande, no hay calles diagramadas ni desniveles proyectados para la evacuación de aguas, no hay servicios y se colgaron de las líneas eléctricas; pincharon los caños de la Cooperativa; tampoco hay reservas fiscales para lugares públicos, y no hay protección para el tercero que quiera adquirir un inmueble construido, porque son obras clandestinas y sin proyectos aprobados”.

La usurpación ocupa ya “un sector estratégico de desarrollo económico y de generación de trabajo que es la zona industrial pesquera, el puerto, y el acceso al río. Está imposibilitado de uso y las usurpaciones cambiaron el destino” que tenían esas tierras, que pudieron tener un desarrollo económico a través de inversiones de la industria pesquera.#

Las usurpaciones se iniciaron hace tres años
20 MAR 2017 - 22:12

La justicia penal, civil y de Faltas mantiene sin resolución las causas iniciadas hace dos años por una usurpación de tierras privadas en la zona de Playa Galesa, mientras las construcciones se multiplican ocupando ya zonas cercanas al puerto de Rawson. Los lotes son propiedad de los herederos de Marcial Galina, y a fines de 2014, cuando se inició la usurpación entre la ruta a Playa Magagna y la costa, se radicó una denuncia.

En ese entonces no había más que una veintena de personas delimitando parcelas. Pero a más de dos años del episodio inicial ya serían más de 150 los usurpadores que construyen. Avanzaron hacia la ribera del río Chubut, en una zona de potencial industrial pesquero.

El abogado Gonzalo Torrejón, que representa a los denunciantes en las causas ante la Justicia, dijo: “No tuvimos ningún tipo de resolución eficaz, lo que seguimos tramitando como fue desde marzo de 2015 es un pedido de demolición de las obras clandestinas e ilegales”.

El pedido “tuvo un periplo frustrante desde marzo de 2015, porque una vez que se pidió que vayan máquinas a demoler, el juez que lo había ordenado lo rechaza por decir que era adelantar sentencia; no era así porque no restituían el inmueble, era demoler lo que se había construido sin autorización del propietario y contra una orden judicial que decía que había que demoler las obras”. Esto en alusión a la medida del juez Carlos Tesi.

“Iniciamos esto cuando no había obras, era ocupación de tierra y no había un ladrillo y la gente siempre supo que era ilegal”, dice el abogado que representa a los sucesores de Marcial Galina. A partir del rechazo del juez Tesi, “fuimos a la Cámara, tardó 8 meses hasta que finalmente se resuelve en 2016, se autoriza la demolición, pero debiendo el juez de primera instancia  articular las medidas que crea correspondientes para llevar a cabo esta resolución”.

Según Torrejón, el magistrado viene “pidiendo requisitos desde octubre del año pasado, aún no podemos verificarlo por cuestiones burocráticas, son requisitos difíciles de cumplir pero tenemos la firme convicción, la dirección y las instrucciones de nuestro clientes de demoler”.

La Cámara para agilizar el expediente “hizo un reordenamiento y ordena que se tramite la demolición por un expediente separado”. Además de ese expediente se tramita otro penal. “Está en la acusación, con correcciones, excesivamente lento; pedimos medidas cautelares de restitución y fueron denegadas, pese a que había antecedentes de Comodoro Rivadavia que se habían otorgado”. También hay actuaciones administrativas en el Juzgado de Faltas. Ese trámite está paralizado desde marzo de 2016 “por orden no sé de quién, pero no se continuó más”.

“Las usurpaciones avanzaron. En febrero de 2015 habrán sido 20 o 25 usurpadores, unos 15 se quedaron, pero ahora superaron toda la longitud de playa La Galesa, abarca gran parte del puerto, y serán más de 150”, dijo Torrejón. “Hay resistencia física, uno va con máquina y ellos protegen lo que no es suyo; no fue posible hacerlo de una manera aún siendo legal”.

“Desde lo jurídico estamos en el mismo lugar, porque ejercemos un derecho que nace de la propiedad; si no vamos a tener resultado, si lo que resuena más fuerte es el eco de la sociedad que dice eso ya no se puede resolver, la normativa es una hoja escrita por los hechos por sobre el Derecho, quien usurpa escribe el Derecho”

“Será lamentablemente tener más horas de máquina y sacrificar más patrimonio de los usurpadores, a quienes les comunicamos que no sigan construyendo y gastando plata en algo sobre lo que hay una orden de demolición”, aseguró el abogado.

Aclaró que el pedido de demolición no es un gesto de insensibilidad. “Mis clientes vendieron a precio vil, regalado, los que son hoy los 3 mil lotes para todos y todas, dando auxilio y subsidiando un loteo social”.

“Esto es perjudicial para un privado, para el Estado y para la ciudadanía”, dijo Torrejón. “Después de la apertura del puente entre Playa Unión y Magagna, el potencial de esa zona es muy grande, el desarrollo va a ir allí y la usurpación ocupa toda una costa muy similar a Playa Unión pero del otro lado del río en la zona llamada Playa Galesa o Barrancas Blancas, puntapié del desarrollo y planificación estratégica urbana de ese sector, lo cual valoriza al lugar”.

En ese lugar “el Estado no está planificando, es una usurpación espontánea y grande, no hay calles diagramadas ni desniveles proyectados para la evacuación de aguas, no hay servicios y se colgaron de las líneas eléctricas; pincharon los caños de la Cooperativa; tampoco hay reservas fiscales para lugares públicos, y no hay protección para el tercero que quiera adquirir un inmueble construido, porque son obras clandestinas y sin proyectos aprobados”.

La usurpación ocupa ya “un sector estratégico de desarrollo económico y de generación de trabajo que es la zona industrial pesquera, el puerto, y el acceso al río. Está imposibilitado de uso y las usurpaciones cambiaron el destino” que tenían esas tierras, que pudieron tener un desarrollo económico a través de inversiones de la industria pesquera.#


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