La tercera sesión ordinaria del Concejo Deliberante de Esquel que se realizaba ayer debió ser suspendida porque vecinos de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos tiraron al salón de reuniones una ofrenda floral que había sido colocada el 24 dee marzo, Día de la Memoria por la Verdad y la Justicia, en la Plazoleta de la Democracia.
El enojo fue porque el presidente del cuerpo deliberativo, Jorge Junyent (Cambiemos), no se retractó de lo expresado en su discurso en el acto, al pedir que también se homenajee "a las víctimas de la subversión". Los organismos de Derechos Humanos y los familiares de las víctimas de la dictadura lo tomaron como una provocación y le recordaron a Junyent y al intendente Sergio Ongarato que no se puede poner en un mismo plano a los miles de víctimas del terrorismo de Estado.