“La nueva cárcel es un edificio bien preparado pero le hace falta más educación y oficios”

¿Planea algún cambio?
-Una idea para implementar de a poco es el apoyo en juicio a nuestros operadores. Buscar profesionales en Psicología o Criminalística. Vemos que Fiscalía tiene un apoyo lógico en la investigación y necesitamos incorporar profesionales para que colaboren con defensores penales. La cuestión psicológica nos sirve para las áreas penales y civiles en discapacidad y salud mental, temas que trabajamos mucho. Son cuestiones que hay que incorporar y tenemos que ayudar a nuestros defensores para que tengan una actuación más cómoda y profesional. Los defensores nos dicen que para una efectiva defensa necesitan el argumento técnico para contrarrestar el de la Fiscalía. Es nuestra idea apoyar eso.
-¿Cómo están de plata?
-El tema presupuesto es recurrente. Por suerte después de 4 años la Defensoría tuvo este año, igual que el resto del Poder Judicial, un presupuesto aprobado. Con los requerimientos hubo respuestas. Todo depende de la existencia de fondos y no somos extraños a la realidad de la provincia. A medida que se puede los gastos se van haciendo pero no escapamos al resto del Poder Judicial.
-¿Tienen deuda?
-Ahora ya no. Había una deuda de proveedores, la venimos manejando mes a mes y siempre queda un poco pero se trata de ir cubriendo. El año pasado llegamos a tener deuda de un millón de pesos y se cubrió toda.
-¿Cómo están en cantidad de defensores?
-Bien, siempre el reclamo de cada circunscripción es un poco más porque la demanda es cada vez mayor. Todo el mundo ve Defensoría más desde lo penal pero el gran cúmulo de requirentes del servicio es Civil y Familia. Se trata siempre de renovar el plantel sumando especialidades. El año pasado en Trelew sumamos contencioso administrativo. Había muchas consultas de la gente. Atendemos a los sectores más necesitados y vulnerables, que no pueden acceder a un abogado particular. Las Defensorías nos reclaman mucha capacitación. Siempre se trata de sumar más abogados para que cada defensor tenga menos casos y pueda atenderlos mejor. El compromiso es cien por cien y si tienen que atender después de horario, en todas las oficinas siempre hay gente trabajando.
-¿En qué área necesitan más?
-En las áreas civiles necesitamos más para poder atender mejor la demanda de la gente. El año pasado largamos el programa de difusión de derechos en cada ciudad. Los defensores se contactan con vecinales y escuelas para ir a dar charlas y explicar los derechos que tiene la gente. La idea es que la gente no deba trasladarse tanto a las Defensorías y descomprimir el trabajo en cada una, porque tenemos gente que sólo necesita una consulta y se pierde una mañana tomando colectivos. Este programa sigue todo este año.
-¿Cómo es el panorama en la nueva cárcel de Trelew?
-Era una obra muy reclamada y ediliciamente está muy bien preparada, pero necesitamos que se le dé más contenido, más actividades, más educación y capacitación en oficios. Es un lugar para aprovechar porque hay espacio, tenemos rutas de acceso fácil y llenándolo con más actividades rendirá sus frutos. Tenemos que pensar que la resocialización que marca la ley es fundamental para la seguridad. Si no la logramos y la gente no sale de ahí con educación, con trabajo, con un oficio, es posible que reincida. Poner fichas ahí es colaborar en el futuro de la seguridad, lo que la gente tanto reclama con razón. Es una muy buena idea pero hay que incorporar más cosas. Mucha cantidad de internos no tiene escuela secundaria. Ahora empiezan oficios de parquización y módulos de electricidad. Todo es importantísimo para que la gente no cumpla su condena ociosamente. Todo el día en una celda no le sirve a nadie, ni a ellos, ni al sistema ni al mismo Instituto. Hay gestiones con Vialidad Nacional para instalar garitas porque los familiares necesitan un lugar a resguardo porque pasan horas en la ruta esperando el micro y vienen de Esquel y de Comodoro Rivadavia.
-¿Son cuestiones de mucho presupuesto?
-No, es más gestión y coordinar. Tenemos el COSE al lado y se puede hacer un circuito para que el profesor que va a dar clase al COSE también lo pueda hacer en el Instituto. Tratamos de gestionar para ayudar, la idea no es ir con un habeas corpus para que no funcione. Al contrario, todos estamos interesados en que funcione porque redunda en beneficio de todos y es un puntapié fundamental para la seguridad. Estamos en un momento en que está arrancando. Lo bueno es poner todos ahora el esfuerzo que tengamos que poner. Habrá ajustes pero la cosa es ponerlo en funcionamiento.
Alcaidía

-¿Cómo está la Alcaidía?
-En educación está un poco más aceitado pero es un edificio viejo. La idea del Instituto es que la Alcaidía quede sin funcionamiento. Siempre sería bueno más oficios para mantener ocupada a la gente pero es un obstáculo lo edilicio. Hay gente detenida en comisarías y es imposible darle una actividad porque no hay lugares ni aulas para clases. Por eso hay que apuntar mucho al Instituto para que sea el lugar de detención y ahí sí esté todo preparado para darles actividades que necesitan.
-¿Qué opina del juicio por jurados?
-Es algo necesario, las provincias que lo tienen avanzaron muchísimo y es una forma de dar participación a la sociedad, que se sienta parte de cuestiones que generan conmoción. Llevará mucho tiempo implementarlo y que la gente lo socialice, se sienta parte, porque somos una sociedad chica y puede haber miedo por ser gente conocida, pero es práctica. Nuestra idea es estar a disposición y si se aprueba trabajar en la implementación. Requerirá mucha práctica de operadores, jueces, fiscales y defensores. Es una oportunidad única. Tenemos un Código Procesal de avanzada y sería un paso más para poder seguir posicionando a nuestro sistema judicial a nivel nacional.
-¿Cómo analiza el tema de los menores y el delito?
-Es complejo y tenemos mucho trabajo con las Asesorías constantemente. Es uno de los lugares donde tenemos más demanda de trabajo. Algo importantísimo y que siempre reclamamos es el Servicio de Protección de Derechos.
-¿Por qué?
-Hay que definir bien de una vez por todas si son de Provincia o de municipios, o trabajar coordinadamente. En los lugares que trabajan bien los servicios se solucionan muchísimos casos. En todos los lugares veo compromiso de la gente pero lo presupuestario hace que esos operadores no estén bien pagos o no haya los profesionales necesarios. Son muy capacitados y comprometidos pero en lo salarial les sale una opción mejor y se van. Hay gente preparada que trabaja hace muchos años y ante una oferta laboral mejor se van. Un puntal importantísimo es fortalecer los servicios. Lo plantean los asesores y los Juzgados de Familia. Se necesita y siempre, la presencia del Servicio ayudó a solucionar cuestiones. Es la primera barrera de contención y es un sistema muy bien ideado. Tenemos que darle contenido y presupuesto. La primera función que deberíamos cumplir es que esos servicios funcionen y estén en el día a día con más capacidad de gestión. Si los presupuestos dan sería conveniente que sean municipales porque cada intendente conoce la realidad de su ciudad y es al primero que le explota el problema.#