“Durante el año 2016 y los meses transcurridos de 2017, la ciencia y la educación, en todos sus niveles, están siendo atacadas de manera sistemática por políticas de ajuste que promueve el actual gobierno nacional”, explicaron investigadores del Centro Nacional Patagónico (Cenpat-Conicet).
Y enumeraron algunas cuestiones como el “cese autoritario de los procesos de negociación paritarios a nivel nacional; la baja de proyectos educativos especiales en todos los niveles; la reducción del presupuesto destinado al desarrollo y mantenimiento de infraestructuras edilicias y de equipamiento; la flexibilización laboral; el traspaso a los ministerios provinciales de todos los programas nacionales de inclusión educativa y la desaparición progresiva de otros programas de inclusión; la reducción de becas para los investigadores jóvenes y la reducción de los pases a planta permanente de los investigadores avanzados, entre otras medidas que atentan contra la calidad educativa y científica de las instituciones públicas”.
De la actividad, que se realizó durante el fin de semana pasado, participaron, además de científicos y universitarios, organizaciones sociales, centros de estudiantes secundarios y otros “sectores amplios y diversos de la sociedad”, lo cual fue destacado por los organizadores, porque –enfatizaron– la idea es “involucrar en el debate y la defensa de la educación integral a toda la comunidad”.
Algunas de las consignas que levantaron en la actividad fueron: “No al ajuste de presupuestos y salarios. No al agravio sistemático de la labor docente y científica. No a la mercantilización de la educación y la ciencia; y no a la represión policial”.
Fuente: Página 12.
“Durante el año 2016 y los meses transcurridos de 2017, la ciencia y la educación, en todos sus niveles, están siendo atacadas de manera sistemática por políticas de ajuste que promueve el actual gobierno nacional”, explicaron investigadores del Centro Nacional Patagónico (Cenpat-Conicet).
Y enumeraron algunas cuestiones como el “cese autoritario de los procesos de negociación paritarios a nivel nacional; la baja de proyectos educativos especiales en todos los niveles; la reducción del presupuesto destinado al desarrollo y mantenimiento de infraestructuras edilicias y de equipamiento; la flexibilización laboral; el traspaso a los ministerios provinciales de todos los programas nacionales de inclusión educativa y la desaparición progresiva de otros programas de inclusión; la reducción de becas para los investigadores jóvenes y la reducción de los pases a planta permanente de los investigadores avanzados, entre otras medidas que atentan contra la calidad educativa y científica de las instituciones públicas”.
De la actividad, que se realizó durante el fin de semana pasado, participaron, además de científicos y universitarios, organizaciones sociales, centros de estudiantes secundarios y otros “sectores amplios y diversos de la sociedad”, lo cual fue destacado por los organizadores, porque –enfatizaron– la idea es “involucrar en el debate y la defensa de la educación integral a toda la comunidad”.
Algunas de las consignas que levantaron en la actividad fueron: “No al ajuste de presupuestos y salarios. No al agravio sistemático de la labor docente y científica. No a la mercantilización de la educación y la ciencia; y no a la represión policial”.
Fuente: Página 12.