Polémica por una exhibición de pingüinos de Punta Tombo en un acuario japonés
Está ubicado en Joetsu y a la inauguración asistió el Embajador Argentino en Japón y el subsecretario de Conservación y Áreas Protegidas de Chubut, Néstor García. En el lugar se muestran más de un centenar de Pingüinos de Magallanes y se recrea la pingüinera de Punta Tombo.
Las imágenes del Embajador Argentino en Japón junto a funcionarios de Chubut en la apertura de un acuario japonés generaron polémica en las redes sociales, al tiempo que ambientalistas piden que se hagan públicos los términos del convenio suscripto entre el Gobierno provincial con autoridades del país asiático a principios de este año.
La imagen fue difundida a través de la cuenta que la Embajada Argentina en Japón tiene en la red social Instagram, donde se informa que “El Embajador Alan Beraud y el subsecretario de Conservación y Áreas Protegidas de Chubut, Néstor García, participaron el 26 de junio junto al intendente de Joetsu, Hideyuki Murayama, de la inauguración del Acuario Municipal “Umigatari”.
En el mismo posteo, donde se ven fotos de los funcionarios argentinos, se explica que “el acuario tiene un área destacada donde se recrea el ecosistema de Punta Tombo, en Chubut, con 120 pingüinos magallánicos” y si bien ninguna de las imágenes difundidas por la embajada muestra a esos ejemplares, en el sitio web del acuario y también en medios de ese país se observa la parte del acuario donde se exhiben una importante cantidad de aves marinas y a la gente interactuando con las mismas.
La página web del acuario “Umigatari” de Joetsu indica que en el segundo piso de sus instalaciones se puede apreciar “El Museo del Pingüino de Magallanes” y la define como una “zona de exposición que reproduce la Punta Tombo de Argentina”.
Malestar en las redes
La publicación de la Embajada Argentina en Japón cuenta con no pocos comentarios de reprobación a la presencia de funcionarios nacionales y provinciales en un espacio donde los animales se exhiben en cautiverio, ya que además de los mencionados pingüinos, hay delfines, belugas y distintos tipos de peces.
Gabriela Bellazzi, de la Fundación Tierra Salvaje (WEF) planteó en una de las publicaciones cuál era el origen de los pingüinos que se encuentran en el acuario de Joetsu y en diálogo con FM Tiempo Trelew (91.5) explicó que a partir de conocerse esta información “estuvimos tratando de indagar en el tema, nos pusimos en contacto con CITES de Argentina, que es el organismo que firma los permisos de exportación de animales y no se han llevado últimamente pingüinos de Chubut, pero es probable que en algún momento se deben haber llevado pingüinos sin que nos enteremos”.
En cuanto a los animales que son exhibidos en Japón, opinó que “esos pueden haber salido en algún momento, pueden ser pingüinos que estaban en rehabilitación y fueron parte de un intercambio. Pingüinos de Magallanes hay en todo el mundo, en Estados Unidos, en Alemania y es probable que en algún momento los originales salieron de Chubut o Santa Cruz, o Chile”.
“En Japón por lo que pudimos averiguar se hace reproducción en cautiverio desde 1993 de esta especie y ahora con inseminación artificial, aparentemente con bastante éxito y estos pueden ser parte de esa colonia que está reproduciéndose en Japón y de ahí salen para otros acuarios de ese país”, dijo la referente de la fundación WEF.
En ese marco aseguró que “previo a 1993 es probable que en algún momento hayan salido pingüinos de la provincia, no había legislación que lo impidiera, la reglamentación que prohíbe su captura es más reciente. Piensen que en esa época no estaba prohibida siquiera la captura de orcas; un acuario podía pedir una captura de orca, no había ley que prohibiera capturarla”.
Un caso paradigmático de aquellos años, fue un intento de capturar toninas overas en Santa Cruz con el fin de llevarlas a acuarios en el exterior y esa acción fue impedida por un amparo que se presentó en la justicia en nombre de los propios animales.
Pingüinos patagónicos
La información sobre el ingreso y salida de animales del país, como así también sobre partes de estos –por ejemplos muestras para análisis científicos- quedan registrados en el CITES, “así que todo queda ahí y se puede averiguar; esto puede haber ocurrido antes del año 1993, y después haber logrado una reproducción en cautiverio con ejemplares que hayan sido llevados en los años 80 o antes” indicó Bellazzi.
“No han salido animales en los últimos años, desde los 90 por lo menos. Eso está estrictamente vigilado, no se robaron ahora los pingüinos de Magallanes, pero previamente a eso evidentemente sí, han salido animales desde Patagonia hacia zoológicos en Estados Unidos, Europa y Asia que formaron poblaciones en cautiverio” mencionó.
Convenio polémico
El malestar en las redes por la foto de funcionarios nacionales y de Chubut en un acuario japonés se ve potenciado por la noticia hace algunos meses de la firma de un convenio entre el país del sol naciente y nuestra provincia sobre aspectos ligados a la conservación.
“Lo que se pregunta la gente y me consulta a partir de nuestra lucha en contra del tráfico de cetáceos, tiene que ver con esto de que un acuario se ponga a financiar un programa de conservación en la provincia de Chubut”, dijo Bellazi, en referencia al acuerdo suscripto a principios de este año entre el gobernador Mariano Arcioni y el vicealcalde de Joetsu (Japón) con el fin de colaborar en la investigación, el desarrollo de actividades, intercambio de información y tecnología para la conservación de los pingüinos de Magallanes (Spheniscus magellanicus).
Ese convenio fue suscripto en febrero de este año en la sala de situación de Casa de Gobierno, y según indicó en ese momento Arcioni no solo propiciará “un intercambio de conocimiento, de tecnología, sino que también se van a profundizar las relaciones binacionales”, al tiempo que informaba que el acuerdo permitirá “dotar de tecnología de avanzada al área natural protegida” chubutense, “pero fundamentalmente que en un lugar tan lejano como Japón haya una muestra en un acuario sobre Punta Tombo”.
En aquel momento fue Kazuhiro Noguchi, el vicealcalde de Joetsu, quien explicó que seguían con la reproducción de la especie. “En 1993 empezamos con 50 y en la actualidad tenemos 120, es un esfuerzo de 24 años continuos con los mismos pingüinos”, precisó el funcionario nipón en su visita a Chubut.
Sobre este tipo de convenios, la ambientalista Gabriela Bellazi aseguró que a nivel internacional “todo lo que tiene que ver con zoológicos y acuarios está muy cuestionado y en algún punto la asociación que nuclea a estos centros puso como requisito o cláusula que estos lugares debían aportar para la conservación de las especies exhibidas; es decir no lo hacen de buenos, es decir que están obligados a aportar a la conservación del Pingüino de Magallanes en este caso”.
Cuestionamiento ético
Con todo, para Bellazzi, como para la mayor parte de las personas que se han expresado en las redes sociales, “el tema de base es ético, que vengan desde un acuario que exhibe pingüinos en cautiverio a aportar dinero para la conservación” y dijo que es un tema para que expliquen las autoridades provinciales y para trazar un paralelismo, sostuvo que “es como si para investigar las orcas tenemos que ir a pedirle dinero a Sea World, entonces como si fuera dinero sangriento”.
También planteó que con la presencia del subsecretario de Conservación en el acuario japonés se muestra un mensaje contradictorio a lo que la provincia promociona, “es un mensaje en contra de los principios de conservación de la provincia, que somos un lugar que te muestra las especies en su medio natural”.
“Yo imagino que se necesita dinero para la conservación, y quizás desde la provincia habrán pensado que era importante; pero lo que la mayoría piensa es que va en contra de los principios que tenemos”, dijo la ambientalista y agregó que el tema se agrava si se piensa en que los animales se exhiben en Japón, “que sabemos con respecto impulsan la cacería de ballena porque piensan que comen mucho pescado, hay matanza de delfines; no digo que rompamos relaciones con ese país, pero tampoco es para ir a festejar con una muestra de pingüinos”.
“Los acuarios se centran en mostrar pingüinos, y otros animales, pero están obligados por una cláusula de la Asociación Internacional de Zoológicos y Acuarios a colaborar en la conservación de las especies que muestran en cautiverio, es decir que parte del dinero que les ingresa deben invertirlo en la conservación”.
“La gente está muy descontenta porque fueron a hacer resto; por lo general cuando se hace este tipo de cosas se hermana con ciudades que tienen objetivos afines; por ejemplo en el tema ballenas con ciudades que hacen avistaje de ballenas. En este caso es contradictorio con el espíritu que tiene la provincia; entonces un convenio con un acuario parece, por lo menos, contradictorio”, sostuvo.
Silencio oficial
Durante el viernes periodistas de FM Tiempo y Jornada intentaron conocer la versión oficial del tema a través de las autoridades del área de Turismo de Chubut pero no se logró aún una explicación sobre el tema.
El ministro Herman Müller, al ser consultado sobre el tema, explicó que se aguardaría al arribo del subsecretario de Áreas Protegidas al país para brindar un informe sobre su presencia en Japón y los alcances de la actividad oficial que tuvo su participación en la inauguración del acuario de Joetsu, como así también del convenio firmado en su momento con Japón.
Las imágenes del Embajador Argentino en Japón junto a funcionarios de Chubut en la apertura de un acuario japonés generaron polémica en las redes sociales, al tiempo que ambientalistas piden que se hagan públicos los términos del convenio suscripto entre el Gobierno provincial con autoridades del país asiático a principios de este año.
La imagen fue difundida a través de la cuenta que la Embajada Argentina en Japón tiene en la red social Instagram, donde se informa que “El Embajador Alan Beraud y el subsecretario de Conservación y Áreas Protegidas de Chubut, Néstor García, participaron el 26 de junio junto al intendente de Joetsu, Hideyuki Murayama, de la inauguración del Acuario Municipal “Umigatari”.
En el mismo posteo, donde se ven fotos de los funcionarios argentinos, se explica que “el acuario tiene un área destacada donde se recrea el ecosistema de Punta Tombo, en Chubut, con 120 pingüinos magallánicos” y si bien ninguna de las imágenes difundidas por la embajada muestra a esos ejemplares, en el sitio web del acuario y también en medios de ese país se observa la parte del acuario donde se exhiben una importante cantidad de aves marinas y a la gente interactuando con las mismas.
La página web del acuario “Umigatari” de Joetsu indica que en el segundo piso de sus instalaciones se puede apreciar “El Museo del Pingüino de Magallanes” y la define como una “zona de exposición que reproduce la Punta Tombo de Argentina”.
Malestar en las redes
La publicación de la Embajada Argentina en Japón cuenta con no pocos comentarios de reprobación a la presencia de funcionarios nacionales y provinciales en un espacio donde los animales se exhiben en cautiverio, ya que además de los mencionados pingüinos, hay delfines, belugas y distintos tipos de peces.
Gabriela Bellazzi, de la Fundación Tierra Salvaje (WEF) planteó en una de las publicaciones cuál era el origen de los pingüinos que se encuentran en el acuario de Joetsu y en diálogo con FM Tiempo Trelew (91.5) explicó que a partir de conocerse esta información “estuvimos tratando de indagar en el tema, nos pusimos en contacto con CITES de Argentina, que es el organismo que firma los permisos de exportación de animales y no se han llevado últimamente pingüinos de Chubut, pero es probable que en algún momento se deben haber llevado pingüinos sin que nos enteremos”.
En cuanto a los animales que son exhibidos en Japón, opinó que “esos pueden haber salido en algún momento, pueden ser pingüinos que estaban en rehabilitación y fueron parte de un intercambio. Pingüinos de Magallanes hay en todo el mundo, en Estados Unidos, en Alemania y es probable que en algún momento los originales salieron de Chubut o Santa Cruz, o Chile”.
“En Japón por lo que pudimos averiguar se hace reproducción en cautiverio desde 1993 de esta especie y ahora con inseminación artificial, aparentemente con bastante éxito y estos pueden ser parte de esa colonia que está reproduciéndose en Japón y de ahí salen para otros acuarios de ese país”, dijo la referente de la fundación WEF.
En ese marco aseguró que “previo a 1993 es probable que en algún momento hayan salido pingüinos de la provincia, no había legislación que lo impidiera, la reglamentación que prohíbe su captura es más reciente. Piensen que en esa época no estaba prohibida siquiera la captura de orcas; un acuario podía pedir una captura de orca, no había ley que prohibiera capturarla”.
Un caso paradigmático de aquellos años, fue un intento de capturar toninas overas en Santa Cruz con el fin de llevarlas a acuarios en el exterior y esa acción fue impedida por un amparo que se presentó en la justicia en nombre de los propios animales.
Pingüinos patagónicos
La información sobre el ingreso y salida de animales del país, como así también sobre partes de estos –por ejemplos muestras para análisis científicos- quedan registrados en el CITES, “así que todo queda ahí y se puede averiguar; esto puede haber ocurrido antes del año 1993, y después haber logrado una reproducción en cautiverio con ejemplares que hayan sido llevados en los años 80 o antes” indicó Bellazzi.
“No han salido animales en los últimos años, desde los 90 por lo menos. Eso está estrictamente vigilado, no se robaron ahora los pingüinos de Magallanes, pero previamente a eso evidentemente sí, han salido animales desde Patagonia hacia zoológicos en Estados Unidos, Europa y Asia que formaron poblaciones en cautiverio” mencionó.
Convenio polémico
El malestar en las redes por la foto de funcionarios nacionales y de Chubut en un acuario japonés se ve potenciado por la noticia hace algunos meses de la firma de un convenio entre el país del sol naciente y nuestra provincia sobre aspectos ligados a la conservación.
“Lo que se pregunta la gente y me consulta a partir de nuestra lucha en contra del tráfico de cetáceos, tiene que ver con esto de que un acuario se ponga a financiar un programa de conservación en la provincia de Chubut”, dijo Bellazi, en referencia al acuerdo suscripto a principios de este año entre el gobernador Mariano Arcioni y el vicealcalde de Joetsu (Japón) con el fin de colaborar en la investigación, el desarrollo de actividades, intercambio de información y tecnología para la conservación de los pingüinos de Magallanes (Spheniscus magellanicus).
Ese convenio fue suscripto en febrero de este año en la sala de situación de Casa de Gobierno, y según indicó en ese momento Arcioni no solo propiciará “un intercambio de conocimiento, de tecnología, sino que también se van a profundizar las relaciones binacionales”, al tiempo que informaba que el acuerdo permitirá “dotar de tecnología de avanzada al área natural protegida” chubutense, “pero fundamentalmente que en un lugar tan lejano como Japón haya una muestra en un acuario sobre Punta Tombo”.
En aquel momento fue Kazuhiro Noguchi, el vicealcalde de Joetsu, quien explicó que seguían con la reproducción de la especie. “En 1993 empezamos con 50 y en la actualidad tenemos 120, es un esfuerzo de 24 años continuos con los mismos pingüinos”, precisó el funcionario nipón en su visita a Chubut.
Sobre este tipo de convenios, la ambientalista Gabriela Bellazi aseguró que a nivel internacional “todo lo que tiene que ver con zoológicos y acuarios está muy cuestionado y en algún punto la asociación que nuclea a estos centros puso como requisito o cláusula que estos lugares debían aportar para la conservación de las especies exhibidas; es decir no lo hacen de buenos, es decir que están obligados a aportar a la conservación del Pingüino de Magallanes en este caso”.
Cuestionamiento ético
Con todo, para Bellazzi, como para la mayor parte de las personas que se han expresado en las redes sociales, “el tema de base es ético, que vengan desde un acuario que exhibe pingüinos en cautiverio a aportar dinero para la conservación” y dijo que es un tema para que expliquen las autoridades provinciales y para trazar un paralelismo, sostuvo que “es como si para investigar las orcas tenemos que ir a pedirle dinero a Sea World, entonces como si fuera dinero sangriento”.
También planteó que con la presencia del subsecretario de Conservación en el acuario japonés se muestra un mensaje contradictorio a lo que la provincia promociona, “es un mensaje en contra de los principios de conservación de la provincia, que somos un lugar que te muestra las especies en su medio natural”.
“Yo imagino que se necesita dinero para la conservación, y quizás desde la provincia habrán pensado que era importante; pero lo que la mayoría piensa es que va en contra de los principios que tenemos”, dijo la ambientalista y agregó que el tema se agrava si se piensa en que los animales se exhiben en Japón, “que sabemos con respecto impulsan la cacería de ballena porque piensan que comen mucho pescado, hay matanza de delfines; no digo que rompamos relaciones con ese país, pero tampoco es para ir a festejar con una muestra de pingüinos”.
“Los acuarios se centran en mostrar pingüinos, y otros animales, pero están obligados por una cláusula de la Asociación Internacional de Zoológicos y Acuarios a colaborar en la conservación de las especies que muestran en cautiverio, es decir que parte del dinero que les ingresa deben invertirlo en la conservación”.
“La gente está muy descontenta porque fueron a hacer resto; por lo general cuando se hace este tipo de cosas se hermana con ciudades que tienen objetivos afines; por ejemplo en el tema ballenas con ciudades que hacen avistaje de ballenas. En este caso es contradictorio con el espíritu que tiene la provincia; entonces un convenio con un acuario parece, por lo menos, contradictorio”, sostuvo.
Silencio oficial
Durante el viernes periodistas de FM Tiempo y Jornada intentaron conocer la versión oficial del tema a través de las autoridades del área de Turismo de Chubut pero no se logró aún una explicación sobre el tema.
El ministro Herman Müller, al ser consultado sobre el tema, explicó que se aguardaría al arribo del subsecretario de Áreas Protegidas al país para brindar un informe sobre su presencia en Japón y los alcances de la actividad oficial que tuvo su participación en la inauguración del acuario de Joetsu, como así también del convenio firmado en su momento con Japón.