Entre los testimonios destacados en la fecha estuvo el de la imputada y el de una hija de ella, entre otros testigos. Mañana, martes, a las 9, se producirán los alegatos finales de las partes.
“Yo lo conocí siendo taxista hace como 5 años, habíamos arreglado que nos íbamos a separar porque la relación ya se había desgastado. Él salía con los amigos llegaba borracho y rompía sus cosas. Vuelve a las casas del papá de sus hijos, luego él me llamaba y me pedía plata. También me entero que tenía problemas con las drogas. Más tarde, decidimos volver a juntarnos, porque él decía que si estaba conmigo no se drogaba tanto. Después fue peor y se ponía violento. Yo le decía que se vaya y aparecía a los dos o tres días como que no había pasado nada. Me celaba y pegaba porque yo no quería estar con él”, sostuvo la imputada.
La hija de la imputada conoce a la víctima, pareja de su madre en una fiesta. “Con mis hermanos la íbamos a ver y pocas veces él estaba ahí. No tenía mucha relación con él. Mi mamá me contaba que él era celoso porque no le contestaba, como un grado de inmadurez de parte de él. Después se separaron, porque él no trabajaba. Dormía todo el día y no aportaba nada a la casa. Él siempre quería controlarla y siempre quería estar ahí vigilándola, no se integraba a la familia ni a las amigas de ella”. Recordó que ella le aconsejaba que tenía que dejarlo, pero su mamá tenía miedo de estar sola. “No hay problema de estar sola, pero mi madre tiene una historia de vida muy triste”, rememoró, señaló un comunicado de la Fiscalía.
El ilícito juzgado aconteció el 1° de diciembre de 2018, cuando siendo aproximadamente las 06:00 hs, la víctima se encontraba acostado junto a una testigo en el interior de su domicilio sito en calle Los Aromos, del barrio Las Flores. En tales circunstancias, se hizo presente su expareja Ana Elizabeth Lepio, quién luego de una disputa verbal lo atacó con el vidrio de una botella en el cuello, causándole graves heridas.
Entre los testimonios destacados en la fecha estuvo el de la imputada y el de una hija de ella, entre otros testigos. Mañana, martes, a las 9, se producirán los alegatos finales de las partes.
“Yo lo conocí siendo taxista hace como 5 años, habíamos arreglado que nos íbamos a separar porque la relación ya se había desgastado. Él salía con los amigos llegaba borracho y rompía sus cosas. Vuelve a las casas del papá de sus hijos, luego él me llamaba y me pedía plata. También me entero que tenía problemas con las drogas. Más tarde, decidimos volver a juntarnos, porque él decía que si estaba conmigo no se drogaba tanto. Después fue peor y se ponía violento. Yo le decía que se vaya y aparecía a los dos o tres días como que no había pasado nada. Me celaba y pegaba porque yo no quería estar con él”, sostuvo la imputada.
La hija de la imputada conoce a la víctima, pareja de su madre en una fiesta. “Con mis hermanos la íbamos a ver y pocas veces él estaba ahí. No tenía mucha relación con él. Mi mamá me contaba que él era celoso porque no le contestaba, como un grado de inmadurez de parte de él. Después se separaron, porque él no trabajaba. Dormía todo el día y no aportaba nada a la casa. Él siempre quería controlarla y siempre quería estar ahí vigilándola, no se integraba a la familia ni a las amigas de ella”. Recordó que ella le aconsejaba que tenía que dejarlo, pero su mamá tenía miedo de estar sola. “No hay problema de estar sola, pero mi madre tiene una historia de vida muy triste”, rememoró, señaló un comunicado de la Fiscalía.
El ilícito juzgado aconteció el 1° de diciembre de 2018, cuando siendo aproximadamente las 06:00 hs, la víctima se encontraba acostado junto a una testigo en el interior de su domicilio sito en calle Los Aromos, del barrio Las Flores. En tales circunstancias, se hizo presente su expareja Ana Elizabeth Lepio, quién luego de una disputa verbal lo atacó con el vidrio de una botella en el cuello, causándole graves heridas.