Entre los fundamentos, se refleja que el escenario actual (a partir de la pandemia) traerá aparejado mayor morosidad impositiva y las deudas en general. Por otro lado, en base a los datos estadísticos, se expone que la preocupación por los niveles de desocupación, con un casi 11% de desempleo para el aglomerado, incluso antes que se desatara la contigencia sanitaria por el coronavirus.
Según los primeros números, este complejo escenario de los últimos meses multiplicó por cinco la demanda social alimentaria. Para ello, la Emergencia busca cubrir las necesesidades de más de 9.000 familias que quedaron fuera del mercado laboral. Muchos monotributistas, emprendedores o cuentapropistas que tuvieron que dejar de funcionar obligadamente y dejaron de percibir su sustento.
En otro de los puntos se aclara que “en modo alguno puede desconocerse que en la situación padecida por nuestra comunidad se requiere el aporte que cada uno pueda brindar como miembro del cuerpo social, ya que la emergencia pública que aquí tratamos encuentra a la Municipalidad de Trelew en severo riesgo de incumplir las obligaciones dinerarias y la prestación de los servicios esenciales”.
La emergencia se propone hasta el 31 de diciembre de 2020, con la posibilidad de prorrogarla por única vez hasta por seis meses más. Desde el municipio se traza mediante la emergencia un plan para postergar obligaciones, readecuar partidas presupuestarias y garantizar el pago de sueldos, las prestaciones básicas y la atención a los sectores más vulnerables.
Se habilitará al Ejecutivo Municipal a “ contratar en forma directa la provisión de bienes, servicios, locaciones, obras, concesiones, permisos y la celebración de todo contrato que fuere necesario para superar la actual situación de emergencia, sea para disminuir el gasto público, mejorar prestaciones o aumentar la eficiencia en la administración municipal”.
En cuanto a los contratos, se expresa que aquellos que “no fueran confirmados podrán ser rescindidos de pleno derecho”.
Al mismo tiempo, se llevará adelante una verificación del monto de las acreencias y deudas de particulares con el Estado Municipal para proponer planes de pago para la cancelación correspondiente e incluso regímenes de condonación de deudas.
“El Departamento Ejecutivo Municipal llevará adelante un proceso de verificación y confirmación de todas las contrataciones vigentes, sean de obras, de servicios, de suministros, de consultoría, de concesión o cualquier otro tipo que genere obligaciones a cargo del sector público municipal”, que se hayan celebrado con anterioridad a la vigencia de la ordenanza.
Además, en el marco de la Emergencia se blinda al Municipio de eventuales demandas y de la ejecución de sentencias en su contra.
Entre los fundamentos, se refleja que el escenario actual (a partir de la pandemia) traerá aparejado mayor morosidad impositiva y las deudas en general. Por otro lado, en base a los datos estadísticos, se expone que la preocupación por los niveles de desocupación, con un casi 11% de desempleo para el aglomerado, incluso antes que se desatara la contigencia sanitaria por el coronavirus.
Según los primeros números, este complejo escenario de los últimos meses multiplicó por cinco la demanda social alimentaria. Para ello, la Emergencia busca cubrir las necesesidades de más de 9.000 familias que quedaron fuera del mercado laboral. Muchos monotributistas, emprendedores o cuentapropistas que tuvieron que dejar de funcionar obligadamente y dejaron de percibir su sustento.
En otro de los puntos se aclara que “en modo alguno puede desconocerse que en la situación padecida por nuestra comunidad se requiere el aporte que cada uno pueda brindar como miembro del cuerpo social, ya que la emergencia pública que aquí tratamos encuentra a la Municipalidad de Trelew en severo riesgo de incumplir las obligaciones dinerarias y la prestación de los servicios esenciales”.
La emergencia se propone hasta el 31 de diciembre de 2020, con la posibilidad de prorrogarla por única vez hasta por seis meses más. Desde el municipio se traza mediante la emergencia un plan para postergar obligaciones, readecuar partidas presupuestarias y garantizar el pago de sueldos, las prestaciones básicas y la atención a los sectores más vulnerables.
Se habilitará al Ejecutivo Municipal a “ contratar en forma directa la provisión de bienes, servicios, locaciones, obras, concesiones, permisos y la celebración de todo contrato que fuere necesario para superar la actual situación de emergencia, sea para disminuir el gasto público, mejorar prestaciones o aumentar la eficiencia en la administración municipal”.
En cuanto a los contratos, se expresa que aquellos que “no fueran confirmados podrán ser rescindidos de pleno derecho”.
Al mismo tiempo, se llevará adelante una verificación del monto de las acreencias y deudas de particulares con el Estado Municipal para proponer planes de pago para la cancelación correspondiente e incluso regímenes de condonación de deudas.
“El Departamento Ejecutivo Municipal llevará adelante un proceso de verificación y confirmación de todas las contrataciones vigentes, sean de obras, de servicios, de suministros, de consultoría, de concesión o cualquier otro tipo que genere obligaciones a cargo del sector público municipal”, que se hayan celebrado con anterioridad a la vigencia de la ordenanza.
Además, en el marco de la Emergencia se blinda al Municipio de eventuales demandas y de la ejecución de sentencias en su contra.