De acuerdo a la información judicial, los médicos acusado son Cristian Fabián Ferres, Melisa Andrea Méndez, Carla Malvina Beltramo, Eduardo Hugo Bufadossi y Natalia del Valle Godoy, quienes desde el próximo lunes 22 de agosto serán enjuiciados por el tribunal de la Cámara del Crimen de Villa María.
Lucrecia Ñáñez tenía 15 años cuando el 31 de mayo de 2017 ingresó al Hospital Pasteur de la ciudad de Villa María por un fuerte malestar y constantes vómitos, según la causa judicial.
La adolescente fue atendida en la guardia pero sin brindarle medicación ni realizar estudios más exhaustivos, fue enviada a su casa, y como su estado empeoraba horas después se dirigió a otro centro asistencial donde fue sometida a una ecografía.
Finalmente, regresó al Hospital Pasteur donde le diagnosticaron un aborto espontáneo de un embarazo de tres meses y al día siguiente, el 1 de junio, le fue practicado un legrado para limpiar los restos, pero los estudios habían detectado una gran infección y necrofilia en la zona del útero,
La adolescente fue internada en ese centro de salud donde falleció el 5 de junio tras agravarse su estado de salud.
Los familiares denunciaron el caso al entender que hubo "negligencia, mala atención, mala praxis y abandono de persona", entre otras conductas reprochables encuadradas con la "violencia obstétrica".
De acuerdo a la información judicial, los médicos acusado son Cristian Fabián Ferres, Melisa Andrea Méndez, Carla Malvina Beltramo, Eduardo Hugo Bufadossi y Natalia del Valle Godoy, quienes desde el próximo lunes 22 de agosto serán enjuiciados por el tribunal de la Cámara del Crimen de Villa María.
Lucrecia Ñáñez tenía 15 años cuando el 31 de mayo de 2017 ingresó al Hospital Pasteur de la ciudad de Villa María por un fuerte malestar y constantes vómitos, según la causa judicial.
La adolescente fue atendida en la guardia pero sin brindarle medicación ni realizar estudios más exhaustivos, fue enviada a su casa, y como su estado empeoraba horas después se dirigió a otro centro asistencial donde fue sometida a una ecografía.
Finalmente, regresó al Hospital Pasteur donde le diagnosticaron un aborto espontáneo de un embarazo de tres meses y al día siguiente, el 1 de junio, le fue practicado un legrado para limpiar los restos, pero los estudios habían detectado una gran infección y necrofilia en la zona del útero,
La adolescente fue internada en ese centro de salud donde falleció el 5 de junio tras agravarse su estado de salud.
Los familiares denunciaron el caso al entender que hubo "negligencia, mala atención, mala praxis y abandono de persona", entre otras conductas reprochables encuadradas con la "violencia obstétrica".