El Directorio del Banco del Chubut SA redobló su ofensiva contra Jornada: por la publicación relacionada con la falla en los controles internos de la entidad, originada a través de una lapidario informe del Banco Central de la República Argentina, presentó una denuncia penal en la Procuración General contra este diario. En la misma pide a la Justicia “se proceda a la apertura de una investigación criminal en miras de lograr una condena de los expositores y divulgadores de la información”. En la presentación, según pudo averiguar este diario, el directorio del banco que encabeza Carlos García Lorea y que tiene a Silvia Giusti como a una de sus adláteres dentro de la conducción, acusa a la Asociación Bancaria haber sido responsable de la filtración de dicha información. <br /><br />De acuerdo a los datos recogidos, la denuncia penal fue presentada por el doctor Flavio Ernesto De Piera, apoderado de la entidad crediticia. Por lo que se comenta dentro del ámbito judicial, el letrado no estaba muy convencido de lo que le habían ordenado hacer: aclara en el escrito “haber sido instruido por la superioridad para realizar la presente denuncia penal”.<br /><br />La actitud de García Lorea es grave. Y pone en peligro lo que el Gobierno provincial supo construir en estos siete años de gestión. La noticia respecto al corte de la publicidad oficial al Grupo Jornada por supuestas “razones presupuestarias” ya ha tenido una impresionante repercusión. Sobre todo en los foros defensores de la libertad de expresión, pilar insoslayable del sistema democrático. <br /><br />El directorio del Banco del Chubut decidió cortar todo vínculo publicitario con el Grupo Jornada después que este diario publicara duras críticas de la Asociación Bancaria respecto a denuncias contra García Lorea por maltrato al personal. Y tras la revelación respecto de un drástico informe del Banco Central relacionada con una falla en los controles internos.<br /><br />En la denuncia presentada hace algunos días ante la fiscalía en Rawson, el apoderado del banco expresa que el diario “revela facsímil de un documento reservado, remitido por el Banco Central en relación a una calificación que el ente rector da a la entidad en cuanto a normas mínimas sobre controles internos para entidades financieras”. Y agrega: “Esta publicación fotográfica acompañada a las versiones periodísticas que sobre el tema realizó la Asociación Bancaria, ocasiona y produce un grave perjuicio a la entidad en cuanto a la vulneración de su seguridad por la extracción de información y documentación interna bancaria, de forma irregular, las cuales califico de secretos y reservados de la propia entidad, desconociendo cómo y de qué manera los responsables de esta maniobra lograron apoderarse de una copia de un informe reservado. No se trata de un documento público, sino que se trata de un documento propio, reservado, secreto e inviolable de la propia entidad crediticia”.<br /><br />Esto es una autocrítica importante: revela que tanto García Lorea como Silvia Giusti pueden atacar a los medios que no le son afines pero sin embargo no están en condiciones de cuidar ni documentos secretos ni patrimonio del banco. Evidentemente demuestran una alarmante negligencia en el desarrollo de sus funciones. Esto resulta al menos un llamado de atención en cuanto a la responsabilidad de los funcionarios bancarios que deben velar para que algunas cuestiones internas de la entidad no salgan a la luz.<br /><br />En la última parte de la denuncia, hay una directa acusación a la Asociación Bancaria. “Esta campaña de malversación de la información que realiza una facción de los integrantes de la Asociación Bancaria, en la sola determinación de injuriar y causar daños, transgrede el ámbito legal de posiciones contradictorias por el sólo hecho de la publicación fotográfica para convertirse en una acción delictual que merece ser investigada y sancionada penalmente”. El directorio del Banco del Chubut no sólo acusa a la dirigencia gremial de haber sido la fuente de información sino también que trata a sus integrantes de delincuentes.<br /><br />El doctor De Piera finaliza su denuncia de la manera más artera hacia lo que significa el derecho a informar y sobre todo, a preservar las fuentes. Dice: “En atención a que la exposición pública y divulgación (por medios periodísticos) de documentación privada, reservada y exclusiva de la entidad crediticia puede constituir como ilícito dicho acto es que solicito expresamente se proceda a la apertura de una investigación criminal con miras a lograr una condena de los expositores y divulgadores de la información que permitió esta transgresión legal generadora de daños a la entidad”. Ahora habrá que ver qué es lo que sucede con esta denuncia en la Justicia de la provincia, algo que rastreando en la memoria, no tiene antecedente alguno.#
El Directorio del Banco del Chubut SA redobló su ofensiva contra Jornada: por la publicación relacionada con la falla en los controles internos de la entidad, originada a través de una lapidario informe del Banco Central de la República Argentina, presentó una denuncia penal en la Procuración General contra este diario. En la misma pide a la Justicia “se proceda a la apertura de una investigación criminal en miras de lograr una condena de los expositores y divulgadores de la información”. En la presentación, según pudo averiguar este diario, el directorio del banco que encabeza Carlos García Lorea y que tiene a Silvia Giusti como a una de sus adláteres dentro de la conducción, acusa a la Asociación Bancaria haber sido responsable de la filtración de dicha información. <br /><br />De acuerdo a los datos recogidos, la denuncia penal fue presentada por el doctor Flavio Ernesto De Piera, apoderado de la entidad crediticia. Por lo que se comenta dentro del ámbito judicial, el letrado no estaba muy convencido de lo que le habían ordenado hacer: aclara en el escrito “haber sido instruido por la superioridad para realizar la presente denuncia penal”.<br /><br />La actitud de García Lorea es grave. Y pone en peligro lo que el Gobierno provincial supo construir en estos siete años de gestión. La noticia respecto al corte de la publicidad oficial al Grupo Jornada por supuestas “razones presupuestarias” ya ha tenido una impresionante repercusión. Sobre todo en los foros defensores de la libertad de expresión, pilar insoslayable del sistema democrático. <br /><br />El directorio del Banco del Chubut decidió cortar todo vínculo publicitario con el Grupo Jornada después que este diario publicara duras críticas de la Asociación Bancaria respecto a denuncias contra García Lorea por maltrato al personal. Y tras la revelación respecto de un drástico informe del Banco Central relacionada con una falla en los controles internos.<br /><br />En la denuncia presentada hace algunos días ante la fiscalía en Rawson, el apoderado del banco expresa que el diario “revela facsímil de un documento reservado, remitido por el Banco Central en relación a una calificación que el ente rector da a la entidad en cuanto a normas mínimas sobre controles internos para entidades financieras”. Y agrega: “Esta publicación fotográfica acompañada a las versiones periodísticas que sobre el tema realizó la Asociación Bancaria, ocasiona y produce un grave perjuicio a la entidad en cuanto a la vulneración de su seguridad por la extracción de información y documentación interna bancaria, de forma irregular, las cuales califico de secretos y reservados de la propia entidad, desconociendo cómo y de qué manera los responsables de esta maniobra lograron apoderarse de una copia de un informe reservado. No se trata de un documento público, sino que se trata de un documento propio, reservado, secreto e inviolable de la propia entidad crediticia”.<br /><br />Esto es una autocrítica importante: revela que tanto García Lorea como Silvia Giusti pueden atacar a los medios que no le son afines pero sin embargo no están en condiciones de cuidar ni documentos secretos ni patrimonio del banco. Evidentemente demuestran una alarmante negligencia en el desarrollo de sus funciones. Esto resulta al menos un llamado de atención en cuanto a la responsabilidad de los funcionarios bancarios que deben velar para que algunas cuestiones internas de la entidad no salgan a la luz.<br /><br />En la última parte de la denuncia, hay una directa acusación a la Asociación Bancaria. “Esta campaña de malversación de la información que realiza una facción de los integrantes de la Asociación Bancaria, en la sola determinación de injuriar y causar daños, transgrede el ámbito legal de posiciones contradictorias por el sólo hecho de la publicación fotográfica para convertirse en una acción delictual que merece ser investigada y sancionada penalmente”. El directorio del Banco del Chubut no sólo acusa a la dirigencia gremial de haber sido la fuente de información sino también que trata a sus integrantes de delincuentes.<br /><br />El doctor De Piera finaliza su denuncia de la manera más artera hacia lo que significa el derecho a informar y sobre todo, a preservar las fuentes. Dice: “En atención a que la exposición pública y divulgación (por medios periodísticos) de documentación privada, reservada y exclusiva de la entidad crediticia puede constituir como ilícito dicho acto es que solicito expresamente se proceda a la apertura de una investigación criminal con miras a lograr una condena de los expositores y divulgadores de la información que permitió esta transgresión legal generadora de daños a la entidad”. Ahora habrá que ver qué es lo que sucede con esta denuncia en la Justicia de la provincia, algo que rastreando en la memoria, no tiene antecedente alguno.#