La agencia ANSA informó que los cuerpos de otras 36 víctimas mortales fueron hallados entre los escombros del edificio que se derrumbó el 24 de abril, mientras que fueron rescatadas 2.437 personas, sostuvo la oficina de prensa de las fuerzas armadas.
Aún no está claro cuánto tiempo necesitarán los equipos de rescate para recuperar todos los cuerpos tras el accidente más grave de este tipo en la historia del país.
En tanto, más de 500 trabajadores sobrevivientes del accidente se manifestaron hoy en el lugar del colapso para exigir el pago de sus nóminas pendientes y los pagos adicionales que les prometieron por hacer horas extras, según señaló la agencia DPA.
El edificio de ocho plantas que albergaba varias fábricas textiles, un banco y varias tiendas se vino abajo el pasado 24 de abril en Savar, a 25 kilómetros de la capital de Bangladesh, dejando, además, más de 2.400 heridos.
La policía ya ha arrestado a los dueños del edificio y a los de las fábricas que albergaba, a quienes acusa de negligencia. El edificio había sido evacuado por daños estructurales, pero según denunciaron, los jefes obligaron a los empleados a volver al trabajo el día del colapso.
En la jornada de hoy los responsables de la investigación del siniestro interrogarán a los detenidos, entre ellos al dueño del edificio -vinculado al partido gobernante en Bangladesh-, a varios propietarios de talleres textiles y a ingenieros municipales.
Las autoridades apuntan como causas del derrumbe a cuatro generadores situados en el techo del inmueble, a la maquinaria industrial usada en su interior y la baja calidad de los materiales del edificio.
La agencia ANSA informó que los cuerpos de otras 36 víctimas mortales fueron hallados entre los escombros del edificio que se derrumbó el 24 de abril, mientras que fueron rescatadas 2.437 personas, sostuvo la oficina de prensa de las fuerzas armadas.
Aún no está claro cuánto tiempo necesitarán los equipos de rescate para recuperar todos los cuerpos tras el accidente más grave de este tipo en la historia del país.
En tanto, más de 500 trabajadores sobrevivientes del accidente se manifestaron hoy en el lugar del colapso para exigir el pago de sus nóminas pendientes y los pagos adicionales que les prometieron por hacer horas extras, según señaló la agencia DPA.
El edificio de ocho plantas que albergaba varias fábricas textiles, un banco y varias tiendas se vino abajo el pasado 24 de abril en Savar, a 25 kilómetros de la capital de Bangladesh, dejando, además, más de 2.400 heridos.
La policía ya ha arrestado a los dueños del edificio y a los de las fábricas que albergaba, a quienes acusa de negligencia. El edificio había sido evacuado por daños estructurales, pero según denunciaron, los jefes obligaron a los empleados a volver al trabajo el día del colapso.
En la jornada de hoy los responsables de la investigación del siniestro interrogarán a los detenidos, entre ellos al dueño del edificio -vinculado al partido gobernante en Bangladesh-, a varios propietarios de talleres textiles y a ingenieros municipales.
Las autoridades apuntan como causas del derrumbe a cuatro generadores situados en el techo del inmueble, a la maquinaria industrial usada en su interior y la baja calidad de los materiales del edificio.