Rousseff embarcó ayer, junto con su familia, en la Base Naval Aratú, cerca de la ciudad de Salvador (Capital del estado de Bahia), donde pasará la noche de Fin de Año.
De acuerdo con el ministro de Integración Nacional, Francisco José Teixeira, durante la visita, la presidenta ofrecerá ayuda al gobernador de Minas Gerais, Antonio Anastasia (PSDB).
"Queremos agilizar la ayuda, estamos haciendo esfuerzos para ayudar a los municipios más afectados", dijo ayer el ministro.
Teixeira señaló que el gobierno ya se reunió con la bancada de diputados nacionales de ese estado y con cuatro alcaldes de las principales ciudades para definir la ayuda.
Además, remarcó que las nuevas medidas apuntan a acelerar la transferencia de fondos para la ejecución de las acciones de respuesta y la recuperación de las zonas afectadas por el desastre.
El ministro manifestó que "ahora podemos liberar de forma más inmediata, menos burocrática los recursos para la reconstrucción de puentes, rutas y viviendas para las personas que tienen que salir del área de riesgo".
"Lo que se necesita para reconstruir y para prevenir nuevos desastres se realizará a una velocidad muy superior a la que se está haciendo hoy", explicó Teixeira, según despacho de la Agencia Brasil.
La Medida Provisional (MP), publicada ayer en el Boletín Oficial, modifica la Ley Nº 12.340, de 1 de diciembre de 2010, prevé la transferencia de fondos federales a las agencias y entidades de los estados, el Distrito Federal (DF) y municipios.
De acuerdo con el ministro las MP se aplican a todos los casos de desastres naturales en el país, tanto con respecto a las precipitaciones, la deforestación y la sequía.
"El gobierno federal va a liberar los fondos y sólo entonces podemos evaluar el proyecto y la rendición de cuentas de esos fondos. Los valores se darán a conocer como los costos presentados en el plan de trabajo de acuerdo a la necesidad y en función del nivel de desastre" agregó el ministro.
Al menos 45 personas murieron en Brasil y más de 60.000 fueron evacuadas como consecuencia de las tormentas que desde hace diez días afectan a los estados de Minas Gerais y Espíritu Santo, en el sudeste de ese país.
Rousseff embarcó ayer, junto con su familia, en la Base Naval Aratú, cerca de la ciudad de Salvador (Capital del estado de Bahia), donde pasará la noche de Fin de Año.
De acuerdo con el ministro de Integración Nacional, Francisco José Teixeira, durante la visita, la presidenta ofrecerá ayuda al gobernador de Minas Gerais, Antonio Anastasia (PSDB).
"Queremos agilizar la ayuda, estamos haciendo esfuerzos para ayudar a los municipios más afectados", dijo ayer el ministro.
Teixeira señaló que el gobierno ya se reunió con la bancada de diputados nacionales de ese estado y con cuatro alcaldes de las principales ciudades para definir la ayuda.
Además, remarcó que las nuevas medidas apuntan a acelerar la transferencia de fondos para la ejecución de las acciones de respuesta y la recuperación de las zonas afectadas por el desastre.
El ministro manifestó que "ahora podemos liberar de forma más inmediata, menos burocrática los recursos para la reconstrucción de puentes, rutas y viviendas para las personas que tienen que salir del área de riesgo".
"Lo que se necesita para reconstruir y para prevenir nuevos desastres se realizará a una velocidad muy superior a la que se está haciendo hoy", explicó Teixeira, según despacho de la Agencia Brasil.
La Medida Provisional (MP), publicada ayer en el Boletín Oficial, modifica la Ley Nº 12.340, de 1 de diciembre de 2010, prevé la transferencia de fondos federales a las agencias y entidades de los estados, el Distrito Federal (DF) y municipios.
De acuerdo con el ministro las MP se aplican a todos los casos de desastres naturales en el país, tanto con respecto a las precipitaciones, la deforestación y la sequía.
"El gobierno federal va a liberar los fondos y sólo entonces podemos evaluar el proyecto y la rendición de cuentas de esos fondos. Los valores se darán a conocer como los costos presentados en el plan de trabajo de acuerdo a la necesidad y en función del nivel de desastre" agregó el ministro.
Al menos 45 personas murieron en Brasil y más de 60.000 fueron evacuadas como consecuencia de las tormentas que desde hace diez días afectan a los estados de Minas Gerais y Espíritu Santo, en el sudeste de ese país.