Quien siempre es castigado por aparecer en jornadas agradables (el viento), terminó siendo responsable directo de un partido por demás entretenido. El primer tiempo fue favorable para el último campeón de la Liga y 3 perfectos ´zapatazos´, todos desde larga distancia y en solo 10 minutos de juego establecieron un duro 3 a 0, para un equipo que no pudo ni acomodarse en el campo de juego.
Angeleri, debutante técnico de Alumni, arengaba a los suyos a despertarse y los de ´Carolo´, dueños de todo, comenzaban a demostrar un juego atildado que justificaba la diferencia en el marcador. Sin embargo y ya sobre la media hora de juego, tres confusas salidas desde su campo por parte del equipo local, posibilitaron que Alumni quedara con sus jugadores solos, debajo del arco, incluso con un Idiarte desairado.
Sin embargo la experiencia de varios jugadores ´aurinegros´ le permitiría sacar ventaja con dos golazos en los últimos 5 minutos de juego que estableció un sorprendente 5/0. Una diferencia de equipos notoria, que hizo pasar casi desapercibido, que Matías Paranao había dejado con 10 jugadores a su equipo, a instancias del línea del partido.
La segunda fracción, Angeleri ingresó con Gutiérrez que en la primera que le quedó, dejó solo al ´pibito´ Méndez, que estuvo a punto de concretar si no hubiera sido por la rápida salida de Idiarte. Eso motivó al ´carbonero´ que lo tuvo a su alcance con un cabezazo apenas desviado de Ojeda y un violento remate de Melgarejo.
Madryn ya no era el mismo. Encima, una chiquilinada de Correa le permitió a Soto dejarlo en la cancha con 9 jugadores y como si fuera poco un penal en favor del visitante. Volpi e Idiarte se conocen mucho y la pelota terminó yéndose al córner, donde a la vuelta de las acciones, encontró un remate de Jofré para establecer el primer gol de Alumni.
Un tiro libre brillante primero y una alta definición minutos más tarde de Volpi, puso las incidencias al ´rojo vivo´. Y mucho más cuando otra vez el habilidoso jugador acertó con otro tiro libre, con ayuda de uno de los palos.
Quedaban 5 minutos para el infarto. No había más piernas, solo amor propio que le dio al final un cierre casi brillante. Lo pudo haber empatado Alumni, con remate de Jofré que reventó el travesaño o un remate de Gutiérrez que lo terminó lamiendo. O lo pudo haber definido ya en suplementario Enzo Arancibia, que sin piernas, no pudo ejecutar a Rugnia.
Buen comienzo para lo dos. Madryn porque tiene fútbol. Alumni porque tiene alma.#
Quien siempre es castigado por aparecer en jornadas agradables (el viento), terminó siendo responsable directo de un partido por demás entretenido. El primer tiempo fue favorable para el último campeón de la Liga y 3 perfectos ´zapatazos´, todos desde larga distancia y en solo 10 minutos de juego establecieron un duro 3 a 0, para un equipo que no pudo ni acomodarse en el campo de juego.
Angeleri, debutante técnico de Alumni, arengaba a los suyos a despertarse y los de ´Carolo´, dueños de todo, comenzaban a demostrar un juego atildado que justificaba la diferencia en el marcador. Sin embargo y ya sobre la media hora de juego, tres confusas salidas desde su campo por parte del equipo local, posibilitaron que Alumni quedara con sus jugadores solos, debajo del arco, incluso con un Idiarte desairado.
Sin embargo la experiencia de varios jugadores ´aurinegros´ le permitiría sacar ventaja con dos golazos en los últimos 5 minutos de juego que estableció un sorprendente 5/0. Una diferencia de equipos notoria, que hizo pasar casi desapercibido, que Matías Paranao había dejado con 10 jugadores a su equipo, a instancias del línea del partido.
La segunda fracción, Angeleri ingresó con Gutiérrez que en la primera que le quedó, dejó solo al ´pibito´ Méndez, que estuvo a punto de concretar si no hubiera sido por la rápida salida de Idiarte. Eso motivó al ´carbonero´ que lo tuvo a su alcance con un cabezazo apenas desviado de Ojeda y un violento remate de Melgarejo.
Madryn ya no era el mismo. Encima, una chiquilinada de Correa le permitió a Soto dejarlo en la cancha con 9 jugadores y como si fuera poco un penal en favor del visitante. Volpi e Idiarte se conocen mucho y la pelota terminó yéndose al córner, donde a la vuelta de las acciones, encontró un remate de Jofré para establecer el primer gol de Alumni.
Un tiro libre brillante primero y una alta definición minutos más tarde de Volpi, puso las incidencias al ´rojo vivo´. Y mucho más cuando otra vez el habilidoso jugador acertó con otro tiro libre, con ayuda de uno de los palos.
Quedaban 5 minutos para el infarto. No había más piernas, solo amor propio que le dio al final un cierre casi brillante. Lo pudo haber empatado Alumni, con remate de Jofré que reventó el travesaño o un remate de Gutiérrez que lo terminó lamiendo. O lo pudo haber definido ya en suplementario Enzo Arancibia, que sin piernas, no pudo ejecutar a Rugnia.
Buen comienzo para lo dos. Madryn porque tiene fútbol. Alumni porque tiene alma.#