Marcha y desmanes: un reclamo de justicia que terminó mal

Familiares y amigos marcharon a la Seccional Primera. Hubo incidentes y destrozos en edificios públicos.

Algunos de los incidentes que se desataron en la Comisaría Primera tras la marcha por el joven.
19 FEB 2015 - 22:52 | Actualizado

Ayer por la tarde se vivieron momentos de tensión en pleno centro de Trelew. Una columna de amigos, familiares y militantes de los Derechos Humanos que pidieron justicia por la muerte del joven quemado en la Comisaría Primera de Trelew se concentraron frente a esas dependencias. Fue por la muerte del joven Mauro Castaño, muerto esta semana como consecuencia de quemaduras de tercer grado sufridas en su cautiverio.

En ese contexto de congoja, es que un minúsculo sector congregado entre los manifestantes, tomó pedazos de escombros, piedras y tachos con basura, los que fueron arrojados contra la fachada de la Seccional. Fuentes indicaron que estaban encapuchados.

Todo fue motivado por las quemaduras mortales que padeció Castaño tras haber sido demorado en un calabozo de contraventores perteneciente a la Comisaría agredida. La misma quedó con las ventanas y puertas destruidas. Las paredes evidenciaban anoche las pintadas contra la fuerza policial.

Lo habían detenido diez días antes de su deceso. Ese día, su celda apareció quemada. Un policía intentó salvarlo.Luego estuvo varios días en coma hasta que no soportó más las heridas.

En el marco de la protesta también agredieron la casa del comisario inspector Marcelo Diosquez, quien luego de dejar su cargo como jefe en esa dependencia ocupó una vivienda contigua. Diosquez recriminó que la situación se haya trasladado a una situación de violencia a la que se vio sometida su familia, incluidos sus hijos menores de edad. También le llevaron un sillón y rompieron partes de la vivienda. Un televisor quedó destruido y se evidenciaban daños en el mobiliario. Se lo vio muy enojado a tal punto que anunció su inmediata mudanza. “Yo así no puedo vivir, mi familia sufrió un momento horrible”, señaló.

Luego la situación se calmó y la columna de indignados permaneció por algunos minutos en la calle San Martín, aunque ya sin tanto acompañamiento. Eso fue debido a que se trasladaron a la sede de los tribunales de la calle 9 de Julio.

Tanto en esas escalinatas como en las dependientes de la Fiscalía de Trelew, hubo discursos y manifestaciones duras en contra de la Policía.

Tomaron la palabra familiares de jóvenes muertos por distintos motivos en Trelew y dirigentes de organizaciones sociales, entre ellos Lucas Krampotic, de la Comisión contra la Impunidad.

La Policía estaba alerta pero al parecer hubo un ataque que no dio lugar para repeler el embate antes de que ocurriera lo que pasó. Los daños a la vivienda donde vive la familia de Diosquez y las reparticiones de la Comisaría.

Finalmente, los uniformados salieron al frente tal como si fuera un combate. Se lo vio al comisario Williams esquivando piedras e intentando manejar la situación.

Tras algunas vociferaciones, el grosor de los manifestantes se alejó hacia las esquinas para luego trasladarse al palacio de tribunales.

Pruebas e impotencia

Darío Castaño, padre del óbito, expresó su indignación y el profundo dolor que atraviesa. Contó el manejo de su empresa de áridos y maquinaria de la que su hijo “era el sostén”. Darío tiene leucemia y aseguró que no puede trabajar por su salud. En ese marco apuntó que “esta vez se metieron con un chico equivocado, era un chico que era el sostén de una familia ¿ahora qué hago yo?”, se preguntó.

Consultado por este diario respecto de la sensación que tuvo al estar frente a la dependencia dijo que “impotencia, vi a mi hijo prendido fuego, vi al policía que bajaba del patrullero que no tenía nada que ver con la guardia que entró a la Comisaría cuando patrullaba, vio humo y entró a salvar a mi hijo. A ese policía lo tuvieron que atender. Ese es un policía, esa policía que necesitamos”, sostuvo.“Antes de morir dijo que nos iba a extrañar”.

Darío contó que un oficial de Policía que estuvo en el rescate de su hijo que le manifestó: “los voy a extrañar a todos, a mi papá a mi hijito”.

Según lo que le contó un oficial en medio del llanto “me dijo que no me extrañen, aun con lágrimas el oficial, dijo que a mi hijo lo trajeron para cuidarlo, no para entregárselo de esta manera”.

Darío sacó fuerzas de algún lugar inhóspito y adelantó ante la prensa que irá a fondo con el esclarecimiento del caso. “Con un grupo de abogados nos vamos a constituir como querellantes”.

Repudio

“Yo obviamente repudio todo esto, la marcha era pacífica. ¿Pero qué pasa?, hay un grupo de chicos a los que los pasan apuntando con el dedo, los persiguen”, dijo sin justificar los daños pero apuntando contra la Policía.

“Me han pedido disculpas pero se dio así. Yo tengo leucemia, tengo fecha de vencimiento, si es por mí no me importaría nada, agarro mi topadora y tiro todo a la m…”.

Enterate de las noticias de PROVINCIA a través de nuestro newsletter

Anotate para recibir las noticias más importantes de esta sección.

Te podés dar de baja en cualquier momento con un solo clic.

Las más leídas

Algunos de los incidentes que se desataron en la Comisaría Primera tras la marcha por el joven.
19 FEB 2015 - 22:52

Ayer por la tarde se vivieron momentos de tensión en pleno centro de Trelew. Una columna de amigos, familiares y militantes de los Derechos Humanos que pidieron justicia por la muerte del joven quemado en la Comisaría Primera de Trelew se concentraron frente a esas dependencias. Fue por la muerte del joven Mauro Castaño, muerto esta semana como consecuencia de quemaduras de tercer grado sufridas en su cautiverio.

En ese contexto de congoja, es que un minúsculo sector congregado entre los manifestantes, tomó pedazos de escombros, piedras y tachos con basura, los que fueron arrojados contra la fachada de la Seccional. Fuentes indicaron que estaban encapuchados.

Todo fue motivado por las quemaduras mortales que padeció Castaño tras haber sido demorado en un calabozo de contraventores perteneciente a la Comisaría agredida. La misma quedó con las ventanas y puertas destruidas. Las paredes evidenciaban anoche las pintadas contra la fuerza policial.

Lo habían detenido diez días antes de su deceso. Ese día, su celda apareció quemada. Un policía intentó salvarlo.Luego estuvo varios días en coma hasta que no soportó más las heridas.

En el marco de la protesta también agredieron la casa del comisario inspector Marcelo Diosquez, quien luego de dejar su cargo como jefe en esa dependencia ocupó una vivienda contigua. Diosquez recriminó que la situación se haya trasladado a una situación de violencia a la que se vio sometida su familia, incluidos sus hijos menores de edad. También le llevaron un sillón y rompieron partes de la vivienda. Un televisor quedó destruido y se evidenciaban daños en el mobiliario. Se lo vio muy enojado a tal punto que anunció su inmediata mudanza. “Yo así no puedo vivir, mi familia sufrió un momento horrible”, señaló.

Luego la situación se calmó y la columna de indignados permaneció por algunos minutos en la calle San Martín, aunque ya sin tanto acompañamiento. Eso fue debido a que se trasladaron a la sede de los tribunales de la calle 9 de Julio.

Tanto en esas escalinatas como en las dependientes de la Fiscalía de Trelew, hubo discursos y manifestaciones duras en contra de la Policía.

Tomaron la palabra familiares de jóvenes muertos por distintos motivos en Trelew y dirigentes de organizaciones sociales, entre ellos Lucas Krampotic, de la Comisión contra la Impunidad.

La Policía estaba alerta pero al parecer hubo un ataque que no dio lugar para repeler el embate antes de que ocurriera lo que pasó. Los daños a la vivienda donde vive la familia de Diosquez y las reparticiones de la Comisaría.

Finalmente, los uniformados salieron al frente tal como si fuera un combate. Se lo vio al comisario Williams esquivando piedras e intentando manejar la situación.

Tras algunas vociferaciones, el grosor de los manifestantes se alejó hacia las esquinas para luego trasladarse al palacio de tribunales.

Pruebas e impotencia

Darío Castaño, padre del óbito, expresó su indignación y el profundo dolor que atraviesa. Contó el manejo de su empresa de áridos y maquinaria de la que su hijo “era el sostén”. Darío tiene leucemia y aseguró que no puede trabajar por su salud. En ese marco apuntó que “esta vez se metieron con un chico equivocado, era un chico que era el sostén de una familia ¿ahora qué hago yo?”, se preguntó.

Consultado por este diario respecto de la sensación que tuvo al estar frente a la dependencia dijo que “impotencia, vi a mi hijo prendido fuego, vi al policía que bajaba del patrullero que no tenía nada que ver con la guardia que entró a la Comisaría cuando patrullaba, vio humo y entró a salvar a mi hijo. A ese policía lo tuvieron que atender. Ese es un policía, esa policía que necesitamos”, sostuvo.“Antes de morir dijo que nos iba a extrañar”.

Darío contó que un oficial de Policía que estuvo en el rescate de su hijo que le manifestó: “los voy a extrañar a todos, a mi papá a mi hijito”.

Según lo que le contó un oficial en medio del llanto “me dijo que no me extrañen, aun con lágrimas el oficial, dijo que a mi hijo lo trajeron para cuidarlo, no para entregárselo de esta manera”.

Darío sacó fuerzas de algún lugar inhóspito y adelantó ante la prensa que irá a fondo con el esclarecimiento del caso. “Con un grupo de abogados nos vamos a constituir como querellantes”.

Repudio

“Yo obviamente repudio todo esto, la marcha era pacífica. ¿Pero qué pasa?, hay un grupo de chicos a los que los pasan apuntando con el dedo, los persiguen”, dijo sin justificar los daños pero apuntando contra la Policía.

“Me han pedido disculpas pero se dio así. Yo tengo leucemia, tengo fecha de vencimiento, si es por mí no me importaría nada, agarro mi topadora y tiro todo a la m…”.


NOTICIAS RELACIONADAS