"Este año el impacto de 'El Niño' es aún más intenso que el pasado. Tras dos años de intensa sequía es fundamental ayudar a los agricultores a recuperar parte de sus pérdidas ayudándolos a tener campos más fuertes para la segunda estación", dijo hoy Felix Baquedano, economista del sistema de prevención temprana para Latinoamérica de la FAO.
Este es el segundo año consecutivo en que la principal cosecha de cereal se ve dañada por severas sequías relacionadas con ese fenómeno climático, caracterizado por un calentamiento anormal de la superficie de agua en el Pacífico oriental, publica la agencia de noticias DPA.
En ese escenario, el Consejo Agropecuario de Centroamérica, liderado por los ministros de Agricultura de la región, ha declarado el estado de alerta después de que cientos de miles de agricultores de subsistencia sufrieran pérdidas parciales o totales de la cosecha entre mayo y septiembre.
Las pérdidas ascienden hasta el 60 por ciento de la cosecha del maíz y el 80 por ciento del frijol.
La FAO prevé un panorama poco alentador ya que se espera que las sequías retrasen la plantación, reduzcan las áreas de cultivo y frenen el desarrollo agrícola.
Los gobiernos de El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua ya han empezado a distribuir paquetes de ayuda agrícola, como semillas, fertilizantes o bombas de irrigación, para ayudar a los agricultores a recuperarse lo antes posible de cara a la segunda estación de sembrado en marcha.
Los expertos de la FAO esperan que las condiciones de "El Niño" continúen hasta comienzos de 2016, por lo que esa segunda estación de cosecha se verá también limitada por severas sequías.
"Este año el impacto de 'El Niño' es aún más intenso que el pasado. Tras dos años de intensa sequía es fundamental ayudar a los agricultores a recuperar parte de sus pérdidas ayudándolos a tener campos más fuertes para la segunda estación", dijo hoy Felix Baquedano, economista del sistema de prevención temprana para Latinoamérica de la FAO.
Este es el segundo año consecutivo en que la principal cosecha de cereal se ve dañada por severas sequías relacionadas con ese fenómeno climático, caracterizado por un calentamiento anormal de la superficie de agua en el Pacífico oriental, publica la agencia de noticias DPA.
En ese escenario, el Consejo Agropecuario de Centroamérica, liderado por los ministros de Agricultura de la región, ha declarado el estado de alerta después de que cientos de miles de agricultores de subsistencia sufrieran pérdidas parciales o totales de la cosecha entre mayo y septiembre.
Las pérdidas ascienden hasta el 60 por ciento de la cosecha del maíz y el 80 por ciento del frijol.
La FAO prevé un panorama poco alentador ya que se espera que las sequías retrasen la plantación, reduzcan las áreas de cultivo y frenen el desarrollo agrícola.
Los gobiernos de El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua ya han empezado a distribuir paquetes de ayuda agrícola, como semillas, fertilizantes o bombas de irrigación, para ayudar a los agricultores a recuperarse lo antes posible de cara a la segunda estación de sembrado en marcha.
Los expertos de la FAO esperan que las condiciones de "El Niño" continúen hasta comienzos de 2016, por lo que esa segunda estación de cosecha se verá también limitada por severas sequías.