Voladura de la AMIA: Telleldín no se arrepiente

El reducidor de automóviles Carlos Alberto Telleldín, uno de los principales imputados en la causa por el atentado a la AMIA, afirmó hoy que no se arrepiente de haber recibido 400.000 dólares cuando se hallaba detenido por el ataque a la mutual judía para incriminar a policías bonaerenses en el atentado del 18 de julio de 1994, porque de haberse opuesto le hubieran dictado prisión perpetua.

24 SEP 2015 - 13:43 | Actualizado

En su declaración en el juicio por irregularidades en la investigación del atentado, Telleldín dijo desconocer de dónde provenía ese dinero y si bien negó haber atribuido responsabilidad a la policía bonaerense “porque no era verdad” si la acusó de presionarlo en el tema vinculado con ilícitos con automotores.

En audiencias anteriores, ex agentes de la disuelta Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) admitieron que fue desde ese organismo de donde salieron los 400.000 dólares que, según Telleldín, se entregaron en dos tandas a su ex mujer Ana Boragni, también procesada en esta causa.

Telleldín repitió versiones de declaraciones anteriores que brindó en el juicio por el atentado, que declaró la nulidad de la causa y la absolución de todos los procesados, luego de tres años de debate oral y público.

El reductor de automóviles, hoy abogado, afirmó que, antes que esa suma, le habían ofrecido 1.000.000 de dólares y “la libertad” para que vinculara en el hecho a jóvenes libaneses, entonces detenidos en Paraguay.

El ofrecimiento, según Telleldín, se lo efectuó el ex capitán Héctor Vergés, que, de acuerdo a su relato, seguía instrucciones del entonces ministro del interior Carlos Corach.

Telleldín aseguró que rechazó ese dinero e hizo la denuncia, pero aceptó el ofrecimiento de 400.000 dólares (que vinculó con la publicación de un libro) para ayudar a Boragni.

“Comida para mis hijos”, expuso Telleldín, quien se justificó argumentando que estuvo detenido 10 años y medio.

Al abundar en su declaración, Telleldín contó que cuando se hallaba detenido recibió la visita de la fallecida camarista federal Luisa Riva Aramayo, quien le mostró un croquis y le dijo “esto fue así” y que declarara que vendió la Trafic utilizada para el atentado a la policía bonaerense porque sino “me iban a dar perpetua”.

Luego, ese croquis Riva Aramayo “se lo entregó a (el ex juez federal Juan José) Galeano –instructor de la causa por el atentado y uno de los acusados por ilícitos en la investigación- y le dijo que lo hice yo”.

Durante su indagatoria ante el Tribunal Oral Federal 2, Telleldín criticó a Galeano, de quien dijo: "me apretaba la soga y después aflojaba”.

Galeano “era Dios y un poco más”, expresó Telleldín, quien indicó que la relación con el ex magistrado federal “se cortó”, después de que, asesorado por el abogado Víctor Stinfale (también procesado y sometido a juicio) lo recusó.

En tanto, sostuvo que los ex fiscales federal Eamon Müllen y José Barbaccia, también enjuiciados por los supuestos ilícitos en la investigación, “sabían todo”.

El reducidor de automotores agregó que los entonces fiscales del sumario por el atentado, lo “visitaban” cuando, al comienzo de la instrucción de la causa, se hallaba detenido en el penal de Caseros, para “quebrarlo”.

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24 SEP 2015 - 13:43

En su declaración en el juicio por irregularidades en la investigación del atentado, Telleldín dijo desconocer de dónde provenía ese dinero y si bien negó haber atribuido responsabilidad a la policía bonaerense “porque no era verdad” si la acusó de presionarlo en el tema vinculado con ilícitos con automotores.

En audiencias anteriores, ex agentes de la disuelta Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) admitieron que fue desde ese organismo de donde salieron los 400.000 dólares que, según Telleldín, se entregaron en dos tandas a su ex mujer Ana Boragni, también procesada en esta causa.

Telleldín repitió versiones de declaraciones anteriores que brindó en el juicio por el atentado, que declaró la nulidad de la causa y la absolución de todos los procesados, luego de tres años de debate oral y público.

El reductor de automóviles, hoy abogado, afirmó que, antes que esa suma, le habían ofrecido 1.000.000 de dólares y “la libertad” para que vinculara en el hecho a jóvenes libaneses, entonces detenidos en Paraguay.

El ofrecimiento, según Telleldín, se lo efectuó el ex capitán Héctor Vergés, que, de acuerdo a su relato, seguía instrucciones del entonces ministro del interior Carlos Corach.

Telleldín aseguró que rechazó ese dinero e hizo la denuncia, pero aceptó el ofrecimiento de 400.000 dólares (que vinculó con la publicación de un libro) para ayudar a Boragni.

“Comida para mis hijos”, expuso Telleldín, quien se justificó argumentando que estuvo detenido 10 años y medio.

Al abundar en su declaración, Telleldín contó que cuando se hallaba detenido recibió la visita de la fallecida camarista federal Luisa Riva Aramayo, quien le mostró un croquis y le dijo “esto fue así” y que declarara que vendió la Trafic utilizada para el atentado a la policía bonaerense porque sino “me iban a dar perpetua”.

Luego, ese croquis Riva Aramayo “se lo entregó a (el ex juez federal Juan José) Galeano –instructor de la causa por el atentado y uno de los acusados por ilícitos en la investigación- y le dijo que lo hice yo”.

Durante su indagatoria ante el Tribunal Oral Federal 2, Telleldín criticó a Galeano, de quien dijo: "me apretaba la soga y después aflojaba”.

Galeano “era Dios y un poco más”, expresó Telleldín, quien indicó que la relación con el ex magistrado federal “se cortó”, después de que, asesorado por el abogado Víctor Stinfale (también procesado y sometido a juicio) lo recusó.

En tanto, sostuvo que los ex fiscales federal Eamon Müllen y José Barbaccia, también enjuiciados por los supuestos ilícitos en la investigación, “sabían todo”.

El reducidor de automotores agregó que los entonces fiscales del sumario por el atentado, lo “visitaban” cuando, al comienzo de la instrucción de la causa, se hallaba detenido en el penal de Caseros, para “quebrarlo”.


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