Un centenar de vecinos se agolparon en las puertas de la cooperativa Servicoop, ubicadas en la calle Fontana de Puerto Madryn, para exigir cambios en los montos de la facturación de los servicios recibidos en los hogares. La convocatoria se realizó por las redes sociales y permitió congregar a un número de socios que se acrecentó con el acompañamiento de un grupo de operarios de la ex Alpesca. La movilización no dejó conclusiones claras más allá del pedido de un grupo de vecinos le realizaron en la cara a los consejeros para que presenten sus renuncias ante la imposibilidad de brindar respuesta a los reclamos.
Sobre las 10 llegaron los vecinos que comenzaron a golpear las palmas y bombos para, con posterioridad, encender gomas y golpear la puerta de acceso al hall central de la cooperativa. En su interior los miembros del consejo de administración optaron por no recibir a los vecinos debido a que no estaban dadas las garantías, por el tenor de la protesta que llevaban adelante los socios de la institución.
La movilización, al no obtener respuestas de los consejeros, se trasladó hasta el Concejo Deliberante, en donde se llevaba adelante una nueva sesión ordinaria del cuerpo deliberativo. Desde allí volvieron acompañados de concejales.
Un centenar de vecinos se agolparon en las puertas de la cooperativa Servicoop, ubicadas en la calle Fontana de Puerto Madryn, para exigir cambios en los montos de la facturación de los servicios recibidos en los hogares. La convocatoria se realizó por las redes sociales y permitió congregar a un número de socios que se acrecentó con el acompañamiento de un grupo de operarios de la ex Alpesca. La movilización no dejó conclusiones claras más allá del pedido de un grupo de vecinos le realizaron en la cara a los consejeros para que presenten sus renuncias ante la imposibilidad de brindar respuesta a los reclamos.
Sobre las 10 llegaron los vecinos que comenzaron a golpear las palmas y bombos para, con posterioridad, encender gomas y golpear la puerta de acceso al hall central de la cooperativa. En su interior los miembros del consejo de administración optaron por no recibir a los vecinos debido a que no estaban dadas las garantías, por el tenor de la protesta que llevaban adelante los socios de la institución.
La movilización, al no obtener respuestas de los consejeros, se trasladó hasta el Concejo Deliberante, en donde se llevaba adelante una nueva sesión ordinaria del cuerpo deliberativo. Desde allí volvieron acompañados de concejales.