Los padres de los alumnos se movilizaron y reunieron firmas para pedir soluciones. Resisten el traslado de alumnos a las otras escuelas. Padres y docentes de las tres escuelas especiales se congregaron en la plaza San Martín con banderas y volantes para reunir firmas que enviarán al Ministerio de Educación, y solicitar que tomen medidas.
El conflicto se generó en la Escuela 528, que no está en condiciones para recibir a los casi cien alumnos. Las autoridades educativas ofrecieron el traslado de alumnos a la Escuela 520. No conformó a los padres, adhiriéndose al conflicto el malestar de los padres de otra institución, la Escuela 524, que resisten el traslado de alumnos dado que el director de esa escuela había decidido recibir allí a los alumnos.
Los padres en la plaza advertían que la Escuela 528 es la única de nivel secundario de la modalidad especial, y las clases no pueden dictarse para toda la matrícula por falta de espacio. Hubo reuniones con directivos y supervisores, sin respuestas. Según los padres, “nos autoconvocamos para pedir una respuesta ya porque los chicos están sin clases”.
Los padres sostienen que el problema no es nuevo, y piden un espacio físico adecuado para el dictado de clases. Una solución posible sería que la Escuela 528 funcione en el Centro de Encuentro pronto a inaugurarse, hasta tanto haya edificio propio.
Los padres de los alumnos se movilizaron y reunieron firmas para pedir soluciones. Resisten el traslado de alumnos a las otras escuelas. Padres y docentes de las tres escuelas especiales se congregaron en la plaza San Martín con banderas y volantes para reunir firmas que enviarán al Ministerio de Educación, y solicitar que tomen medidas.
El conflicto se generó en la Escuela 528, que no está en condiciones para recibir a los casi cien alumnos. Las autoridades educativas ofrecieron el traslado de alumnos a la Escuela 520. No conformó a los padres, adhiriéndose al conflicto el malestar de los padres de otra institución, la Escuela 524, que resisten el traslado de alumnos dado que el director de esa escuela había decidido recibir allí a los alumnos.
Los padres en la plaza advertían que la Escuela 528 es la única de nivel secundario de la modalidad especial, y las clases no pueden dictarse para toda la matrícula por falta de espacio. Hubo reuniones con directivos y supervisores, sin respuestas. Según los padres, “nos autoconvocamos para pedir una respuesta ya porque los chicos están sin clases”.
Los padres sostienen que el problema no es nuevo, y piden un espacio físico adecuado para el dictado de clases. Una solución posible sería que la Escuela 528 funcione en el Centro de Encuentro pronto a inaugurarse, hasta tanto haya edificio propio.