Dos policías fueron condenados a un año por vejaciones: “Habíamos pedido pena más alta”
La abogada Ana Sánchez se presentó como querellante de dos ciudadanos de Gastre. Denunciaron a efectivos policiales por vejaciones. El juicio fue en esa localidad de la meseta. El hecho fue en 2016. “Más allá de los años de condena es importante que no haya quedado impune”, dijo la letrada.
Los policías Ezequiel Lorenzo Huincalef y Fabio Emanuel Pailacura fueron condenados por la jueza Marcela Pérez a un año de prisión en suspenso e inhabilitación para cubrir cargos públicos por doble del tiempo de la condena. El juicio se desarrolló en Gastre. Los imputaron por vejaciones en concurso real con severidades ilegales en carácter de autores. Las víctimas son el viceintendente de esa localidad Paulo Cáceres y el vecino Omar Cayupán. Denunciaron severas lesiones por parte de los efectivos en instancias de una detención. La abogada querellante Ana Sánchez dijo a Jornada que “habíamos pedido una pena más alta.
Queja
“El delito de vejaciones tiene un mínimo de un año y de ahí se pasa a tortura, que es perpetua. No hay una figura media”, se quejó la letrada. Y dijo: “Es muy difícil que el juez pueda comprobar la magnitud del daño y aceptar como delito de tortura alguno de estos casos”.
En una entrevista con Jornada, Sánchez relató que el hecho por el que se condenó a los policías ocurrió en el año 2016. “Fueron 3 años de proceso. Surgió la etapa investigativa que se inicia oficialmente cuando la Fiscalía en un control de detención, pueden observar que dos de los imputados que se encontraban detenidos por oficiales de Gastre estaban golpeados y uno de ellos, con un corte en la cabeza”, remarcó.
Las denuncias
La abogada indicó que “ahí se inicia el juicio por apremios ilegales en contra de esas personas. Las víctimas son el vecino Omar Cayupán y Paulo Cáceres (viceintendente de Gastre). “Cayupán, presenta su denuncia, certifica lo observado en el control de detención: maltratos físicos por parte de los funcionarios policiales que comienzan en Gastre el 30 de septiembre de 2016 donde son interceptados en su camioneta.
“Es detenida, en realidad, interceptada por un móvil policial, perseguida por Manuel Pailacura, invade la propiedad privada, estaciona el móvil policial dentro de la residencia de su familia, desciende del móvil e increpa y muestra un arma de fuego”.
Luego de eso –según manifestó la letrada- “comienza toda la odisea. Son golpeados por Emanuel Pailacura y Ezequiel Huincalef con tonfas reglamentarias, golpes de puño y de patadas en todo el cuerpo. Cayupán presentaba un corte con 11 puntos de sutura. Mientras le hacían curaciones, son detenidos, llevados a la Comisaría de Gastre, donde siguen las golpizas, encerrados en un calabozo y encima, se les arroja gas pimienta”, enfatizó.
Golpes
Sánchez, puntualizó que “en caso de Paulo Cáceres los golpes ocasionan la falta de conocimiento, se lo traslada al Hospital para recibir curaciones y se encuentran detenidos hasta el otro día en ese calabozo, donde las condiciones son deficientes, sin iluminación, sin recepción de aire, luz solar y se les arroja gas pimienta”.
“Luego son trasladados a Telsen. Allí, son llevados al hospital público donde se confirman las lesiones en los dos detenidos. Finalmente, terminan en Puerto Madryn donde se los lleva a un control de detención bajo el falso delito de resistencia a la autoridad, que era el delito por el que se les había imputado”.
Pormenores
Reveló al respecto que “son absueltas las víctimas de este cargo y comienza el juicio de vejaciones y severidades ilegales. Era contra 3 funcionarios. Había otro implicado de apellido Nahuelcheo que fallece en el proceso. Se continúa contra estas dos personas: Pailacura y Huinchaleo”.
“Una parte del proceso judicial que es el debate oral y ofrecimiento de los testigos tanto testimonial como agentes de salud, se realiza en la misma localidad de Gastre. Se hace en el mismo pueblo, en el Juzgado de Paz, un lugar pequeño por la cantidad de testigos que debían prestar testimonios”, describió.
Detalles
Y agregó: “La oficina se traslada a la localidad de Gastre es una actividad única. Es la primera vez que se realiza un juicio penal en el Juzgado de Paz. Dadas las circunstancias del caso se realiza esta excepción. La gente que no residía allí como el personal policial y médico, testimoniaron a través de videoconferencia en Puerto Madryn”.
Sánchez, remarcó que “luego de los alegatos de las partes. La magistrada Marcela Pérez, determinó la culpabilidad de ambas personas por delito cometido contra Omar y Paulo. Se ventiló además por el MPF otros delitos cometidos. El cometido contra ellos, es el primer detonante. Permite que se evidencien otros casos de abuso de autoridad”.
Culpabilidad
Para finalizar, aclaró que la culpabilidad a los policías se les endilgó por vejaciones debido al hecho ocurrido el 30 de septiembre de 2016 y por otra causa cuya víctima es un poblador de apellido Avilés.
“Se pidió la acusación de manera conjunta. Se unificó por todos los delitos”, dijo la querellante. #
Los policías Ezequiel Lorenzo Huincalef y Fabio Emanuel Pailacura fueron condenados por la jueza Marcela Pérez a un año de prisión en suspenso e inhabilitación para cubrir cargos públicos por doble del tiempo de la condena. El juicio se desarrolló en Gastre. Los imputaron por vejaciones en concurso real con severidades ilegales en carácter de autores. Las víctimas son el viceintendente de esa localidad Paulo Cáceres y el vecino Omar Cayupán. Denunciaron severas lesiones por parte de los efectivos en instancias de una detención. La abogada querellante Ana Sánchez dijo a Jornada que “habíamos pedido una pena más alta.
Queja
“El delito de vejaciones tiene un mínimo de un año y de ahí se pasa a tortura, que es perpetua. No hay una figura media”, se quejó la letrada. Y dijo: “Es muy difícil que el juez pueda comprobar la magnitud del daño y aceptar como delito de tortura alguno de estos casos”.
En una entrevista con Jornada, Sánchez relató que el hecho por el que se condenó a los policías ocurrió en el año 2016. “Fueron 3 años de proceso. Surgió la etapa investigativa que se inicia oficialmente cuando la Fiscalía en un control de detención, pueden observar que dos de los imputados que se encontraban detenidos por oficiales de Gastre estaban golpeados y uno de ellos, con un corte en la cabeza”, remarcó.
Las denuncias
La abogada indicó que “ahí se inicia el juicio por apremios ilegales en contra de esas personas. Las víctimas son el vecino Omar Cayupán y Paulo Cáceres (viceintendente de Gastre). “Cayupán, presenta su denuncia, certifica lo observado en el control de detención: maltratos físicos por parte de los funcionarios policiales que comienzan en Gastre el 30 de septiembre de 2016 donde son interceptados en su camioneta.
“Es detenida, en realidad, interceptada por un móvil policial, perseguida por Manuel Pailacura, invade la propiedad privada, estaciona el móvil policial dentro de la residencia de su familia, desciende del móvil e increpa y muestra un arma de fuego”.
Luego de eso –según manifestó la letrada- “comienza toda la odisea. Son golpeados por Emanuel Pailacura y Ezequiel Huincalef con tonfas reglamentarias, golpes de puño y de patadas en todo el cuerpo. Cayupán presentaba un corte con 11 puntos de sutura. Mientras le hacían curaciones, son detenidos, llevados a la Comisaría de Gastre, donde siguen las golpizas, encerrados en un calabozo y encima, se les arroja gas pimienta”, enfatizó.
Golpes
Sánchez, puntualizó que “en caso de Paulo Cáceres los golpes ocasionan la falta de conocimiento, se lo traslada al Hospital para recibir curaciones y se encuentran detenidos hasta el otro día en ese calabozo, donde las condiciones son deficientes, sin iluminación, sin recepción de aire, luz solar y se les arroja gas pimienta”.
“Luego son trasladados a Telsen. Allí, son llevados al hospital público donde se confirman las lesiones en los dos detenidos. Finalmente, terminan en Puerto Madryn donde se los lleva a un control de detención bajo el falso delito de resistencia a la autoridad, que era el delito por el que se les había imputado”.
Pormenores
Reveló al respecto que “son absueltas las víctimas de este cargo y comienza el juicio de vejaciones y severidades ilegales. Era contra 3 funcionarios. Había otro implicado de apellido Nahuelcheo que fallece en el proceso. Se continúa contra estas dos personas: Pailacura y Huinchaleo”.
“Una parte del proceso judicial que es el debate oral y ofrecimiento de los testigos tanto testimonial como agentes de salud, se realiza en la misma localidad de Gastre. Se hace en el mismo pueblo, en el Juzgado de Paz, un lugar pequeño por la cantidad de testigos que debían prestar testimonios”, describió.
Detalles
Y agregó: “La oficina se traslada a la localidad de Gastre es una actividad única. Es la primera vez que se realiza un juicio penal en el Juzgado de Paz. Dadas las circunstancias del caso se realiza esta excepción. La gente que no residía allí como el personal policial y médico, testimoniaron a través de videoconferencia en Puerto Madryn”.
Sánchez, remarcó que “luego de los alegatos de las partes. La magistrada Marcela Pérez, determinó la culpabilidad de ambas personas por delito cometido contra Omar y Paulo. Se ventiló además por el MPF otros delitos cometidos. El cometido contra ellos, es el primer detonante. Permite que se evidencien otros casos de abuso de autoridad”.
Culpabilidad
Para finalizar, aclaró que la culpabilidad a los policías se les endilgó por vejaciones debido al hecho ocurrido el 30 de septiembre de 2016 y por otra causa cuya víctima es un poblador de apellido Avilés.
“Se pidió la acusación de manera conjunta. Se unificó por todos los delitos”, dijo la querellante. #