Fernández admitió que la deuda es un condicionante para la economía argentina, aunque se mostró optimista en poder negociar con los acreedores en caso de ser elegido presidente.
"Yo siento que esa deuda vamos a poder afrontarla en una negociación seria y sensata con los acreedores y vamos a ganar tiempo para crecer", señaló durante un almuerzo en la Fundación Mediterránea, en Córdoba.
Consideró que "no va a ser tan difícil de hacer lo que hizo Uruguay": "He hablado con varios fondos de inversión. Es ganar tiempo y no hacer quitas", dijo.
"Los acreedores sienten que se les mintió y también que el Gobierno perdió el poder político que tuvo otros años", señaló.
Sostuvo que los bonistas "aspiran a poder discutir en otro tiempo con quien gobierne la Argentina en el futuro. En estas condiciones la Argentina no puede pagar la deuda".
Dijo que esa situación "en otras épocas esto se llamaba default. Por la era del posmodernismo lo llamamos reperfilamiento, pero en el fondo lo que decimos es que no podemos pagar"
Fernández admitió que la deuda es un condicionante para la economía argentina, aunque se mostró optimista en poder negociar con los acreedores en caso de ser elegido presidente.
"Yo siento que esa deuda vamos a poder afrontarla en una negociación seria y sensata con los acreedores y vamos a ganar tiempo para crecer", señaló durante un almuerzo en la Fundación Mediterránea, en Córdoba.
Consideró que "no va a ser tan difícil de hacer lo que hizo Uruguay": "He hablado con varios fondos de inversión. Es ganar tiempo y no hacer quitas", dijo.
"Los acreedores sienten que se les mintió y también que el Gobierno perdió el poder político que tuvo otros años", señaló.
Sostuvo que los bonistas "aspiran a poder discutir en otro tiempo con quien gobierne la Argentina en el futuro. En estas condiciones la Argentina no puede pagar la deuda".
Dijo que esa situación "en otras épocas esto se llamaba default. Por la era del posmodernismo lo llamamos reperfilamiento, pero en el fondo lo que decimos es que no podemos pagar"