Bernie Sanders suspende su campaña por cuestiones médicas
El precandidato presidencial demócrata estadounidense Bernie Sanders fue sometido a un procedimiento cardíaco por una arteria bloqueada y canceló todos sus actos y apariciones "hasta nuevo aviso", informó hoy su equipo de campaña.
El senador, de 78 años, sintió un malestar en el pecho ayer durante un acto y se hizo una evaluación médica que descubrió que tenía una obstrucción arterial, dijo en el comunicado uno de sus asesores principales, Jeff Weaver.
Weaver agregó que los médicos le insertaron con éxito dos stents, que son pequeños tubos de malla de metal que mantienen abierta la arteria.
La nota no explicó qué vaso sanguíneo sufrió el bloqueo, pero el malestar en el pecho y el hecho de que la intervención haya sido "cardíaca" parecen apuntar a que fue una de las coronarias, las arterias que irrigan el corazón.
Para hoy, Sanders tenía previsto participar en un acto sobre el control de armas en Nevada junto a otros nueve precandidatos presidenciales demócratas que aspiran a competir con el presidente Donald Trump en los comicios del año próximo.
Sanders luchó por la candidatura demócrata en 2016 contra Hillary Clinton, quien finalmente fue la nominada.
El senador por Vermont es una de las principales figuras del ala más izquierdista del Partido Demócrata.
Las últimas encuestan sitúan al ex vicepresidente Joe Biden, de 76 años, a la cabeza de la intención de voto, seguido por la senadora Elizabeth Warren, de 70 años, y Sanders. Los tres son los únicos septuagenarios entre los precandidatos demócratas.
Aunque la contienda demócrata hace meses que se libra, los candidatos no se verán las caras en las urnas hasta el 3 de febrero del año que viene, cuando Iowa, el primer estado en votar, celebrará sus primarias con miras a las presidenciales de noviembre de 2020.
Sanders a veces se refiere en tono de broma a su avanzada edad, sobre todo en sus encuentros con jóvenes. Sus asesores han tratado de proyectar al senador como un candidato con más energías ahora que en su campaña de 2016.
Su procedimiento cardíaco probablemente dé nuevo impulso a un debate entre los demócratas sobre si el partido no debería dar paso a una nueva generación de líderes políticos, a semanas del próximo debate entre precandidatos, el mes que viene.
La colocación de stents coronarios por lo general mejora de manera inmediata síntomas como el dolor de pecho y la dificultad para respirar.
Los stents se ponen en su lugar a través de vasos sanguíneos de la ingle o la muñeca, algo que requiere una incisión muy pequeña. El dispositivo se hace llegar por ese vaso hasta la zona del bloqueo.
Los pacientes son monitoreados para ver si la arteria no vuelve a cerrarse, y por lo general tienen que tomar alguna medicación para evitar la formación de coágulos en el stent.
En una carta de 2016, el médico personal de Sanders dijo que el político tenía antecedentes de valores levemente elevados de colesterol en sangre pero no padecía una enfermedad cardíaca.
El senador, de 78 años, sintió un malestar en el pecho ayer durante un acto y se hizo una evaluación médica que descubrió que tenía una obstrucción arterial, dijo en el comunicado uno de sus asesores principales, Jeff Weaver.
Weaver agregó que los médicos le insertaron con éxito dos stents, que son pequeños tubos de malla de metal que mantienen abierta la arteria.
La nota no explicó qué vaso sanguíneo sufrió el bloqueo, pero el malestar en el pecho y el hecho de que la intervención haya sido "cardíaca" parecen apuntar a que fue una de las coronarias, las arterias que irrigan el corazón.
Para hoy, Sanders tenía previsto participar en un acto sobre el control de armas en Nevada junto a otros nueve precandidatos presidenciales demócratas que aspiran a competir con el presidente Donald Trump en los comicios del año próximo.
Sanders luchó por la candidatura demócrata en 2016 contra Hillary Clinton, quien finalmente fue la nominada.
El senador por Vermont es una de las principales figuras del ala más izquierdista del Partido Demócrata.
Las últimas encuestan sitúan al ex vicepresidente Joe Biden, de 76 años, a la cabeza de la intención de voto, seguido por la senadora Elizabeth Warren, de 70 años, y Sanders. Los tres son los únicos septuagenarios entre los precandidatos demócratas.
Aunque la contienda demócrata hace meses que se libra, los candidatos no se verán las caras en las urnas hasta el 3 de febrero del año que viene, cuando Iowa, el primer estado en votar, celebrará sus primarias con miras a las presidenciales de noviembre de 2020.
Sanders a veces se refiere en tono de broma a su avanzada edad, sobre todo en sus encuentros con jóvenes. Sus asesores han tratado de proyectar al senador como un candidato con más energías ahora que en su campaña de 2016.
Su procedimiento cardíaco probablemente dé nuevo impulso a un debate entre los demócratas sobre si el partido no debería dar paso a una nueva generación de líderes políticos, a semanas del próximo debate entre precandidatos, el mes que viene.
La colocación de stents coronarios por lo general mejora de manera inmediata síntomas como el dolor de pecho y la dificultad para respirar.
Los stents se ponen en su lugar a través de vasos sanguíneos de la ingle o la muñeca, algo que requiere una incisión muy pequeña. El dispositivo se hace llegar por ese vaso hasta la zona del bloqueo.
Los pacientes son monitoreados para ver si la arteria no vuelve a cerrarse, y por lo general tienen que tomar alguna medicación para evitar la formación de coágulos en el stent.
En una carta de 2016, el médico personal de Sanders dijo que el político tenía antecedentes de valores levemente elevados de colesterol en sangre pero no padecía una enfermedad cardíaca.