Madryn: un Consejo Vecinalista para mejorar la política barrial
Por unanimidad, el Concejo Deliberante de Puerto Madryn crear el Consejo Municipal Vecinalista que reemplazará a la actual Dirección de Juntas Vecinales.
La pasada semana hubo varias reuniones de representantes del Ejecutivo y los ediles para explicar la iniciativa, que funcionará desde el 9 de diciembre.
La idea es crear un órgano de trabajo cuyo objetivo será democratizar la tarea de la actual Dirección. Se dispondrá que los 41 barrios de la ciudad queden segmentados en cuatro grandes sectores: norte, centro, sur y oeste. La división apunta a lograr soluciones a las problemáticas. La Dirección no desaparece sino que cambia la metodología de la toma de decisiones. Hoy todo se centra en el director, que depende de la Secretaría de Gobierno, pero con los cambios se sumarán 4 personas que serán los representantes de todos los barrios y que deberán buscar los acuerdos. Esto implicará transferir la toma de decisiones a los presidentes barriales.
La idea es que los presidentes de las vecinales que conforman esa zona puedan elegir entre ellos un representante que junto a los otros tres que representan a las otras zonas y al representante municipal, determinen las acciones que debe tomar el área.
Detalles
La propuesta de avanzar en estos cambios es el resultado de las directivas que el intendente Ricardo Sastre como su sucesor brindaron para optimizar el trabajo y la vinculación con los representantes de los barrios. Al defender la iniciativa, los representantes del Ejecutivo puntualizaron que “la idea es dar participación a todos los barrios y presidentes para avanzar en la democratización y mayor participación. La interacción entre una persona y otras 41 puede ser compleja”. Por eso se decidió avanzar para que los vecinos se agrupen con problemas y soluciones similares. Permitirá generar consensos y democratizar las acciones desde el Ejecutivo para las vecinalistas.
La sesión tuvo la participación de Julio Vezub en la Banca del Vecino. Presentó un proyecto para declarar la emergencia del Patrimonio Histórico y Cultural de la ciudad, y abordó la demolición de la Casa Derbes.
Además se aprobó el proyecto unificado del Frente para la Victoria y Unidos y Organizados, con “el más enérgico repudio” al golpe de Estado en Bolivia.
La pasada semana hubo varias reuniones de representantes del Ejecutivo y los ediles para explicar la iniciativa, que funcionará desde el 9 de diciembre.
La idea es crear un órgano de trabajo cuyo objetivo será democratizar la tarea de la actual Dirección. Se dispondrá que los 41 barrios de la ciudad queden segmentados en cuatro grandes sectores: norte, centro, sur y oeste. La división apunta a lograr soluciones a las problemáticas. La Dirección no desaparece sino que cambia la metodología de la toma de decisiones. Hoy todo se centra en el director, que depende de la Secretaría de Gobierno, pero con los cambios se sumarán 4 personas que serán los representantes de todos los barrios y que deberán buscar los acuerdos. Esto implicará transferir la toma de decisiones a los presidentes barriales.
La idea es que los presidentes de las vecinales que conforman esa zona puedan elegir entre ellos un representante que junto a los otros tres que representan a las otras zonas y al representante municipal, determinen las acciones que debe tomar el área.
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La propuesta de avanzar en estos cambios es el resultado de las directivas que el intendente Ricardo Sastre como su sucesor brindaron para optimizar el trabajo y la vinculación con los representantes de los barrios. Al defender la iniciativa, los representantes del Ejecutivo puntualizaron que “la idea es dar participación a todos los barrios y presidentes para avanzar en la democratización y mayor participación. La interacción entre una persona y otras 41 puede ser compleja”. Por eso se decidió avanzar para que los vecinos se agrupen con problemas y soluciones similares. Permitirá generar consensos y democratizar las acciones desde el Ejecutivo para las vecinalistas.
La sesión tuvo la participación de Julio Vezub en la Banca del Vecino. Presentó un proyecto para declarar la emergencia del Patrimonio Histórico y Cultural de la ciudad, y abordó la demolición de la Casa Derbes.
Además se aprobó el proyecto unificado del Frente para la Victoria y Unidos y Organizados, con “el más enérgico repudio” al golpe de Estado en Bolivia.