Emprendedor de Esquel fabrica máscaras protectoras en 3D
La emergencia sanitaria abre la solidaridad de distintos sectores y vecinos, que desarrollan alguna tarea que es de utilidad a la comunidad en estas circunstancias.
Un joven de Esquel, Fabricio Narvay, está fabricando máscaras protectoras para las fuerzas de seguridad y militares, que con su personal permanecen en las calles y rutas controlando el tránsito, y que se cumpla la cuarentena.
Fabricio explicó que “estamos haciendo protectores faciales en 3D”, un trabajo al que se están dedicando varios emprendedores en el país, para colaborar con quienes salen a la vía pública en medio de la pandemia, a realizar controles, caso de la Policía.
Remarcó que “nuestro objetivo es dar una mano a quienes están en la primera fila”, y por otro lado señaló que están tratando de solventar los gastos que esta fabricación demanda, principalmente el filamento que utilizan para la impresión en 3D. Por kilo de filamento, logran entre 15 y 20 protectores. El costo es de $ 1.200 el kilo.
Con esta máscara, se protege la cara, la nariz y la boca en este caso de los policías que están en los operativos de control, ya que pueden encontrarse con personas que estén afectados con coronavirus. Fabricio hace una semana que comenzó con la impresión de los protectores junto a su esposa, y se sumó un vecino que hace el corte de las placas con láser, y hay otros jóvenes que se van incorporando a la iniciativa. A la fecha llevan entregadas entre 120 y 150 máscaras, avanzando en la demanda de las fuerzas de seguridad, y también les han requerido desde el Regimiento y la Unidad Penitenciaria 14. “Nuestro trabajo es solidario y no se cobra. Sólo recibimos donaciones de materiales para seguir”, subrayó Narvay.
Un joven de Esquel, Fabricio Narvay, está fabricando máscaras protectoras para las fuerzas de seguridad y militares, que con su personal permanecen en las calles y rutas controlando el tránsito, y que se cumpla la cuarentena.
Fabricio explicó que “estamos haciendo protectores faciales en 3D”, un trabajo al que se están dedicando varios emprendedores en el país, para colaborar con quienes salen a la vía pública en medio de la pandemia, a realizar controles, caso de la Policía.
Remarcó que “nuestro objetivo es dar una mano a quienes están en la primera fila”, y por otro lado señaló que están tratando de solventar los gastos que esta fabricación demanda, principalmente el filamento que utilizan para la impresión en 3D. Por kilo de filamento, logran entre 15 y 20 protectores. El costo es de $ 1.200 el kilo.
Con esta máscara, se protege la cara, la nariz y la boca en este caso de los policías que están en los operativos de control, ya que pueden encontrarse con personas que estén afectados con coronavirus. Fabricio hace una semana que comenzó con la impresión de los protectores junto a su esposa, y se sumó un vecino que hace el corte de las placas con láser, y hay otros jóvenes que se van incorporando a la iniciativa. A la fecha llevan entregadas entre 120 y 150 máscaras, avanzando en la demanda de las fuerzas de seguridad, y también les han requerido desde el Regimiento y la Unidad Penitenciaria 14. “Nuestro trabajo es solidario y no se cobra. Sólo recibimos donaciones de materiales para seguir”, subrayó Narvay.