Imputaron por homicidio culposo a la dueña de un perro que atacó a una mujer que luego murió
Un fiscal penal salteño imputó por homicidio culposo a la dueña de un perro que atacó en la vía pública a una mujer, quien murió tras sufrir un paro cardíaco mientras era trasladada para su asistencia, informaron este lunes fuentes del Ministerio Público de Salta.
El fiscal penal de la Unidad de Graves Atentados Contra las Personas, Gustavo Torres Rubelt, imputó a Paulina Isabel Subelza, de 28 años, por la comisión del delito de homicidio culposo en calidad de autora material y en perjuicio de una mujer de 73.
Según la investigación, el hecho ocurrió el 17 de julio pasado, cuando la víctima regresaba del almacén hacia su domicilio, ubicado en un barrio de la zona este de la ciudad de Salta, y fue atacada por uno de los perros que pertenece a Subelza.
La mujer fue auxiliada por un ocasional transeúnte, que primero logró espantar a los perros que estaban en el lugar.
No obstante, uno de los animales volvió, mordió a la mujer y la hizo caer de rodillas, por lo que el hombre descendió del vehículo en el que estaba y la acompañó hasta su vivienda, ubicada a metros del lugar donde ocurrió el ataque.
La hija de la víctima llamó al Sistema de Emergencias 911, por lo que fue trasladada en un móvil del Samec al hospital San Bernardo, pero durante el trayecto sufrió un paro cardíaco y, pese a las maniobras de reanimación, falleció en el hospital, como consecuencia de un shock hipovolémico, según determinó la autopsia.
La denuncia contra la propietaria del perro fue radicada por la hija de la víctima, y entre los elementos recabados durante la investigación, se sumaron las declaraciones de tres testigos del ataque.
Entre ellas se destaca la de un vecino que declaró que “los perros que residen en esa vivienda siempre salen a atacar a los transeúntes que se desplazan por la calle” y que esa no fue la primera vez que agredió a una persona, ya que incluso atacó a un familiar suyo, sin que haya radicado la denuncia correspondiente.
Torres Rubelt indicó que “quien posee un animal, es titular de un especial deber de cuidado” y debe arbitrar los medios necesarios para minimizar los riesgos que trae consigo la tenencia”.
“Por ello, la falta de adopción de medidas de seguridad específicas y dirigidas a evitar que el animal dañe a otros, equivale crear un riesgo jurídicamente desaprobado. Más aún, teniendo en cuenta que la propietaria del perro, habría inobservado los deberes a su cargo de cuidado del animal para que no dañe a terceros y a pesar de que podría haber advertido el peligro porque que el perro ya habría atacado a otra persona”, expresó el fiscal.
Los voceros detallaron que Subelza se abstuvo de declarar durante la audiencia de imputación.
El fiscal penal de la Unidad de Graves Atentados Contra las Personas, Gustavo Torres Rubelt, imputó a Paulina Isabel Subelza, de 28 años, por la comisión del delito de homicidio culposo en calidad de autora material y en perjuicio de una mujer de 73.
Según la investigación, el hecho ocurrió el 17 de julio pasado, cuando la víctima regresaba del almacén hacia su domicilio, ubicado en un barrio de la zona este de la ciudad de Salta, y fue atacada por uno de los perros que pertenece a Subelza.
La mujer fue auxiliada por un ocasional transeúnte, que primero logró espantar a los perros que estaban en el lugar.
No obstante, uno de los animales volvió, mordió a la mujer y la hizo caer de rodillas, por lo que el hombre descendió del vehículo en el que estaba y la acompañó hasta su vivienda, ubicada a metros del lugar donde ocurrió el ataque.
La hija de la víctima llamó al Sistema de Emergencias 911, por lo que fue trasladada en un móvil del Samec al hospital San Bernardo, pero durante el trayecto sufrió un paro cardíaco y, pese a las maniobras de reanimación, falleció en el hospital, como consecuencia de un shock hipovolémico, según determinó la autopsia.
La denuncia contra la propietaria del perro fue radicada por la hija de la víctima, y entre los elementos recabados durante la investigación, se sumaron las declaraciones de tres testigos del ataque.
Entre ellas se destaca la de un vecino que declaró que “los perros que residen en esa vivienda siempre salen a atacar a los transeúntes que se desplazan por la calle” y que esa no fue la primera vez que agredió a una persona, ya que incluso atacó a un familiar suyo, sin que haya radicado la denuncia correspondiente.
Torres Rubelt indicó que “quien posee un animal, es titular de un especial deber de cuidado” y debe arbitrar los medios necesarios para minimizar los riesgos que trae consigo la tenencia”.
“Por ello, la falta de adopción de medidas de seguridad específicas y dirigidas a evitar que el animal dañe a otros, equivale crear un riesgo jurídicamente desaprobado. Más aún, teniendo en cuenta que la propietaria del perro, habría inobservado los deberes a su cargo de cuidado del animal para que no dañe a terceros y a pesar de que podría haber advertido el peligro porque que el perro ya habría atacado a otra persona”, expresó el fiscal.
Los voceros detallaron que Subelza se abstuvo de declarar durante la audiencia de imputación.