Un nuevo hogar para Don Raúl

Después de vivir ocho meses en un auto, Raúl Romero encontró un lugar para alojarse. Todo sucedió cuando Cirilo Lincon, presidente del centro de jubilados Justicia Social, pasaba por el estacionamiento de la Terminal de colectivos de Trelew: “Un día iba para el centro y lo vi parado afuera, al lado de un árbol. Me dio lástima, así que me acerqué. Estuvimos hablando dos horas y le ofrecí venir al centro de jubilados”.

De allí enfilaron rumbo al hospedaje en el barrio Luz y Fuerza. Sobre lo ocurrido, Cirilo explica que “al principio no quiso quedarse, pero después lo convecinos y aceptó. Como centro de jubilados, nosotros le abrimos la puerta, del resto se encarga el municipio. Es decir, las viandas y la atención médica”.

Ocurre que al tratarse de una persona mayor su estado de salud se deterioró notablemente luego de vivir tantos meses en el asiento de un auto. Desde el hogar dijeron que su estado es “preocupante” y argumentaron: “Está muy delgado, tiene un problema grave en la vista y tiene las manos muy hinchadas. Necesitamos la asistencia médica de alguien que pueda llevarlo para que se atienda porque el centro no tiene recursos para trasladarlo”.