El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria decomisó 26.880 kilogramos de naranjas, mandarinas y pomelos, fruta considerada “hospedera” de la mosca de los frutos, en el puesto de control de la barrera zoofitosanitaria patagónica del Km 714 de la Ruta Nacional 3, y los donó al Banco de Alimentos de Bahía Blanca.
A Trelew
Según la documentación secuestrada, la fruta proveniente la localidad entrerriana de Colonia Ayui, se dirigía hacia Trelew, en la provincia del Chubut, sin haber sido declarada por el transportista, quien presentó documentación de cargas generales, y no contaba con los tratamientos cuarentenarios para prevenir el ingreso de la mosca de los frutos a la región Patagónica.
“La carga decomisada estaba compuesta por 13.440 kilogramos de naranjas, 12.320 kilogramos de mandarinas y 1.120 kilogramos de pomelos”, informó la supervisora del Senasa, Carla Calbe.
La Coordinación de la Barrera informó también que “el expediente ahora continúa con las actuaciones administrativas sobre la base del acta que se labró para determinar la sanción que le corresponde al infractor”.
La inspección y el decomiso se realizaron en el marco de las resoluciones del Senasa 472/14 y 31/15 y la Disposición 13/18 de la Dirección Nacional de Protección Vegetal.
“El chofer presentó el Documento de Tránsito que no detallaba el envío ni la trazabilidad al sur del país”, indicó la funcionaria y agregó que “la mercadería no contaba tampoco con los tratamientos cuarentenarios exigidos para ingresar a la Patagonia”.
Serio riesgo
Desde el Senasa se se informó que “el ingreso de productos hospederos sin tratamientos cuarentenarios que garanticen la eliminación de la plaga representa una seria amenaza para el patrimonio sanitario de la Patagonia, libre de mosca de los frutos desde el 2005”.
“Teniendo en cuenta que el ingreso de la fruta a la Patagonia pondría en serio riesgo el estatus fitosanitario, la donamos al Banco de Alimentos de Bahía Blanca, que a su vez la distribuirá a 60 entidades de bien público de la localidad”, detalló Calbe.
Por su parte, el supervisor de Barrera, Mauricio Leonardo, agradeció a “la empresa de transporte Cruz del Sur que desinteresadamente colaboró con la logística de retiro de la donación aportando un camión con semirremolque, sin ningún costo”.
Es importante destacar que este tipo de procedimientos es rutinario por parte de los agentes del Senasa, no sólo en la región patagónica, sino también en otros puntos estratégicos del pais con el fin de evitar pestes relacionadas a los alimentos.
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria decomisó 26.880 kilogramos de naranjas, mandarinas y pomelos, fruta considerada “hospedera” de la mosca de los frutos, en el puesto de control de la barrera zoofitosanitaria patagónica del Km 714 de la Ruta Nacional 3, y los donó al Banco de Alimentos de Bahía Blanca.
A Trelew
Según la documentación secuestrada, la fruta proveniente la localidad entrerriana de Colonia Ayui, se dirigía hacia Trelew, en la provincia del Chubut, sin haber sido declarada por el transportista, quien presentó documentación de cargas generales, y no contaba con los tratamientos cuarentenarios para prevenir el ingreso de la mosca de los frutos a la región Patagónica.
“La carga decomisada estaba compuesta por 13.440 kilogramos de naranjas, 12.320 kilogramos de mandarinas y 1.120 kilogramos de pomelos”, informó la supervisora del Senasa, Carla Calbe.
La Coordinación de la Barrera informó también que “el expediente ahora continúa con las actuaciones administrativas sobre la base del acta que se labró para determinar la sanción que le corresponde al infractor”.
La inspección y el decomiso se realizaron en el marco de las resoluciones del Senasa 472/14 y 31/15 y la Disposición 13/18 de la Dirección Nacional de Protección Vegetal.
“El chofer presentó el Documento de Tránsito que no detallaba el envío ni la trazabilidad al sur del país”, indicó la funcionaria y agregó que “la mercadería no contaba tampoco con los tratamientos cuarentenarios exigidos para ingresar a la Patagonia”.
Serio riesgo
Desde el Senasa se se informó que “el ingreso de productos hospederos sin tratamientos cuarentenarios que garanticen la eliminación de la plaga representa una seria amenaza para el patrimonio sanitario de la Patagonia, libre de mosca de los frutos desde el 2005”.
“Teniendo en cuenta que el ingreso de la fruta a la Patagonia pondría en serio riesgo el estatus fitosanitario, la donamos al Banco de Alimentos de Bahía Blanca, que a su vez la distribuirá a 60 entidades de bien público de la localidad”, detalló Calbe.
Por su parte, el supervisor de Barrera, Mauricio Leonardo, agradeció a “la empresa de transporte Cruz del Sur que desinteresadamente colaboró con la logística de retiro de la donación aportando un camión con semirremolque, sin ningún costo”.
Es importante destacar que este tipo de procedimientos es rutinario por parte de los agentes del Senasa, no sólo en la región patagónica, sino también en otros puntos estratégicos del pais con el fin de evitar pestes relacionadas a los alimentos.