El Colegio Secundario Nº 741 de Puerto Madryn se encuentra con sus actividades suspendidas hace más de una semana, después de comprobarse pérdidas en las cañerías de gas de la institución. Si bien los trabajos se iniciaron la semana pasada, hasta el momento no ha podido culminar con las tareas y se estima que hacia fines de esta semana podrían concluirse las tareas.
A pocos metros del lugar, en otro establecimiento educativo, en este caso la Escuela primaria Nº 42, tampoco hubo clases en los últimos días, pero según indicaron autoridades educativas, se habría logrado solucionar el inconveniente y las actividades se normalizaban por estas horas.
Según información suministrada por la empresa Camuzzi “ambos establecimientos educativos se encuentran con el suministro interrumpido, luego de haber recibido denuncias por olor a gas” y al presentarse el personal en el lugar se detectaron “deficiencias serias, como pérdidas en la instalación interna, problemas en las ventilaciones de los ambientes y en los conductos de evacuación de gases”. En el caso del colegio Nº 741 el corte de suministro se efectuó el día 28 de agosto y algunos días después, el pasado martes 2 de septiembre, se cortó el gas a la Escuela Nº 42.
De acuerdo a la información suministrada por la empresa prestataria del servicio de gas, “ante la gravedad de los hechos y como medida preventiva, se procedió interrumpir el suministro y a notificar fehacientemente a los establecimientos para que den intervención a un instalador matriculado”.
El informe difundido por Camuzzi señala que se operó a partir de que la compañía “toma conocimiento de que un usuario tiene una deficiencia a través de un reclamo o una denuncia. A partir de ello, personal especializado de Camuzzi Gas del Sur concurre al lugar y de acuerdo a la gravedad de la falta, procede al corte del suministro. Éste se efectúa cuando se verifica que las instalaciones no cumplen con las normas de seguridad vigentes y que por ende, se encuentra en riesgo la seguridad de las personas y de los bienes”.
Tal cual establece el protocolo en estos casos, la empresa “notifica fehacientemente la situación para que se de intervención a un instalador matriculado. Una vez que el instalador regulariza las deficiencias, el paso siguiente será solicitar la inspección final de la Distribuidora para que verifique el estado de las mismas. Una vez aprobado el trabajo, se procede a reconectar el suministro”.
Camuzzi informó que de acuerdo a las normativas vigentes, se efectúan “las inspecciones dentro de los márgenes establecidos e inclusive, al tratarse de reconexiones de servicios, en períodos de tiempo que se encuentran por debajo de los plazos regulatorios” y en el caso del pedido de inspección final, se realiza dentro de los 10 días hábiles de solicitada la inspección. La empresa aclaró que “los establecimientos educativos tienen máxima prioridad, por lo que al momento de solicitarse la inspección final, rápidamente procedemos a acercarnos al lugar para hacer las verificaciones del caso”.
Trabajos en marcha
Una fuente ligada al Ministerio de Educación confirmó ayer que los trabajos se iniciaron con la máxima celeridad posible, y que en el caso de la Escuela primaria Nº 42 en las primeras horas del lunes se habría logrado solucionar el inconveniente, de manera que entre la tarde de ayer y esta mañana se volvería al dictado de clases con normalidad.
En el caso del Colegio Nº 741 la situación es más compleja, porque al parecer las tareas han demandado más tiempo y podrían extenderse hacia fines de la presente semana, sin que hasta el momento se conozca cuándo retomarían las clases los alumnos.
Recuperación de contenidos
Según pudo averiguar Jornada, el equipo directivo y docente de las instituciones afectadas se encontraría trabajando en un programa de recuperación de contenidos con el fin de aplicarlo una vez habilitados los establecimientos. En el caso del Colegio Nº 741 se indicó que en un principio se había barajado la posibilidad de dictar clase en otro establecimiento, pero la falta de espacio suficiente en los mismos horarios para trasladar la matrícula habría imposibilitado esa idea.
El Colegio Secundario Nº 741 de Puerto Madryn se encuentra con sus actividades suspendidas hace más de una semana, después de comprobarse pérdidas en las cañerías de gas de la institución. Si bien los trabajos se iniciaron la semana pasada, hasta el momento no ha podido culminar con las tareas y se estima que hacia fines de esta semana podrían concluirse las tareas.
A pocos metros del lugar, en otro establecimiento educativo, en este caso la Escuela primaria Nº 42, tampoco hubo clases en los últimos días, pero según indicaron autoridades educativas, se habría logrado solucionar el inconveniente y las actividades se normalizaban por estas horas.
Según información suministrada por la empresa Camuzzi “ambos establecimientos educativos se encuentran con el suministro interrumpido, luego de haber recibido denuncias por olor a gas” y al presentarse el personal en el lugar se detectaron “deficiencias serias, como pérdidas en la instalación interna, problemas en las ventilaciones de los ambientes y en los conductos de evacuación de gases”. En el caso del colegio Nº 741 el corte de suministro se efectuó el día 28 de agosto y algunos días después, el pasado martes 2 de septiembre, se cortó el gas a la Escuela Nº 42.
De acuerdo a la información suministrada por la empresa prestataria del servicio de gas, “ante la gravedad de los hechos y como medida preventiva, se procedió interrumpir el suministro y a notificar fehacientemente a los establecimientos para que den intervención a un instalador matriculado”.
El informe difundido por Camuzzi señala que se operó a partir de que la compañía “toma conocimiento de que un usuario tiene una deficiencia a través de un reclamo o una denuncia. A partir de ello, personal especializado de Camuzzi Gas del Sur concurre al lugar y de acuerdo a la gravedad de la falta, procede al corte del suministro. Éste se efectúa cuando se verifica que las instalaciones no cumplen con las normas de seguridad vigentes y que por ende, se encuentra en riesgo la seguridad de las personas y de los bienes”.
Tal cual establece el protocolo en estos casos, la empresa “notifica fehacientemente la situación para que se de intervención a un instalador matriculado. Una vez que el instalador regulariza las deficiencias, el paso siguiente será solicitar la inspección final de la Distribuidora para que verifique el estado de las mismas. Una vez aprobado el trabajo, se procede a reconectar el suministro”.
Camuzzi informó que de acuerdo a las normativas vigentes, se efectúan “las inspecciones dentro de los márgenes establecidos e inclusive, al tratarse de reconexiones de servicios, en períodos de tiempo que se encuentran por debajo de los plazos regulatorios” y en el caso del pedido de inspección final, se realiza dentro de los 10 días hábiles de solicitada la inspección. La empresa aclaró que “los establecimientos educativos tienen máxima prioridad, por lo que al momento de solicitarse la inspección final, rápidamente procedemos a acercarnos al lugar para hacer las verificaciones del caso”.
Trabajos en marcha
Una fuente ligada al Ministerio de Educación confirmó ayer que los trabajos se iniciaron con la máxima celeridad posible, y que en el caso de la Escuela primaria Nº 42 en las primeras horas del lunes se habría logrado solucionar el inconveniente, de manera que entre la tarde de ayer y esta mañana se volvería al dictado de clases con normalidad.
En el caso del Colegio Nº 741 la situación es más compleja, porque al parecer las tareas han demandado más tiempo y podrían extenderse hacia fines de la presente semana, sin que hasta el momento se conozca cuándo retomarían las clases los alumnos.
Recuperación de contenidos
Según pudo averiguar Jornada, el equipo directivo y docente de las instituciones afectadas se encontraría trabajando en un programa de recuperación de contenidos con el fin de aplicarlo una vez habilitados los establecimientos. En el caso del Colegio Nº 741 se indicó que en un principio se había barajado la posibilidad de dictar clase en otro establecimiento, pero la falta de espacio suficiente en los mismos horarios para trasladar la matrícula habría imposibilitado esa idea.